Por: Ramón Antonio Veras.
I.- La ideología y la lucha por sembrarla
1.- Una persona física aloja en su cerebro la
conciencia social, formada por ideas
políticas, científicas, filosóficas, religiosas, éticas y morales, que en
conjunto constituyen la ideología,
que será
la que en su vida guiará
sus distintas actividades.
En las sociedades divididas en clases sociales, cada
una de ellas tiene su concepción ideológica, pero predomina la de las clases dominantes.
2.- En forma intencional, deliberadamente los
grupos que se identifican con el sistema
social vigente, están interesados en que su ideología sea la base de orientación de
todos los integrantes de la sociedad.
Los ideólogos del orden establecido procuran con intensidad premeditada que la
generalidad asuma su doctrina, abrace
sus ideas, el credo, los principios
que dan sustentación al aparato
ideológico y a la base económica del sistema.
3.- En cada
medio social se desarrolla una lucha ideológica que se expresa de
diferentes formas, procurando que
se imponga una cualquiera sobre otra. La portadora de las
ideas del sistema, del estatus quo, busca reinar, mandar en la conciencia de la
población, que prevalezca por cualquier medio.
4.- La contienda ideológica se lleva a cabo
en forma abierta y encubierta, perceptible e imperceptible, tangible e intangible,
comprensible e incomprensible, hermética y abierta, verbal y escrita. La pugna
del pensamiento se manifiesta de las
formas más diversas. El pugilato está presente
a cada momento y no es fácil de advertir.
5.- No resulta cómodo entender cuando alguien quiere que su
ideología penetre en la conciencia de otro, porque los mensajes son
enviados con sutileza muy refinada,
suave, con exquisitez. Hay que estar bien organizado ideológicamente, con ojo avizor, ser agudo, mantenerse
avispado, porque a cualquier tonto que se
comporta obtuso lo venden
ideológicamente metiéndole gato por
liebre.
II.- Trabajo ideológico para que el pueblo
acepte y santifique el sistema
6.- El trabajo de convencimiento ideológico
elaborado por los ideólogos del sistema, está dirigido al pueblo para que lo
digiera bien, lo absorba suavemente como un
agradable alimento, para que se nutra con las ideas que le sirven
los que las fabrican y
las exhiben como buenas y bonitas, aunque en el fondo son
malas y feas.
7.- Nadie discute lo bonito, lo lindo que suena Internacional Socialista, y
el exquisito mote de Partido Democrático
y Socialista, Partido Social Demócrata, Partido Revolucionario Dominicano, Partido
Revolucionario Moderno, Partido de la Liberación Dominicana, Partido Liberal,
Partido Humanista, Partido Moda, Partido Evolucionista, Partido
Nacionalista, Partido Reformista
Socialcristiano, y muchos más con lindezas, preciosidades y encantos de democracia cristiana y
socialista. Se exhiben con tanta
atracción que adormecen, dan ganas de acariciarlos, mimarlos y besarlos
con absoluta terneza.
8.- Si
examinamos cada una de las citadas organizaciones, sin mucho esfuerzo
comprobamos que no son más que sugestiones ideológicas, fascinaciones para hechizar la conciencia de
las masas populares; ofuscar, con el objetivo de vestir las organizaciones
defensoras del capitalismo con ropaje que motive agrado, vestidura ideológica a
los fines de encubrir, camuflar, disimular su esencia odiosa, caníbal,
repudiable y deshumanizadora.
9.- Las señaladas agrupaciones, todas,
enteras, por completo, en bloque,
separadas, en conjunto, en su totalidad,
en masa, no son más que muñecos de pantallas para engañar;
señuelos para adormecer a los hombres y
mujeres del pueblo; trampas para estafar la buena fe de los ciudadanos y ciudadanas que
rechazan todo aquello que tenga sabor
al sistema. Los ideólogos del capitalismo en decadencia persiguen
cubrirlo con ideas sociales y transformadoras que
solamente pueden ser una realidad en el socialismo real, el verdadero, el que
no necesita traje prestado ni
fraseologías huecas.
10.- La palabra social, socialista,
progresista, liberadora, revolucionaria etc., la encontramos no solamente en
partidos políticos del sistema, sino
también hacen uso de ellas instituciones y órganos del Estado. Así, por
ejemplo, la Alcaldía de Santiago dice
que hace una Gestión Socialista; el Ministerio de Educación ha acuñado la consigna de Revolución
Educativa; el ministro de Energía y
Minas habla de la Revolución en Materia de Hidrocarburos, y el presidente del Instituto de
Telecomunicaciones (Indotel), se refiere a que, supuestamente, la República
Digital constituye una propuesta para Revolucionar tecnológicamente tanto el
Estado como la vida productiva y educativa en el país.
11.- La misión de los ideólogos del sistema
social que impera aquí, es hacer creer al pueblo que el régimen que lo
mantiene viviendo en pobreza, estado de
desigualdad y opresión
social, es algo natural, como que Dios
lo mandó, y como tal hay que aceptarlo,
procurando que la resignación, el conformismo, la docilidad, y la
mansedumbre se apodere, así por así, de
los oprimidos.
III.- Los ideólogos disfrazando el sistema
12.- En razón de que la sociedad dominicana
está compuesta por mujeres y hombres con
formación clasista e ideológica distintas, y
el poder del Estado está en manos de grupos que se identifican con el
sistema, estos últimos tienen
interés que la ideología suya sea la
aceptada por todos.
13.-
Los defensores y los difusores de la ideología del ordenamiento
económico social y político del país, la presentan bonita, hermosa, como
enviada por Dios al pueblo dominicano; y las supuestas bondades del sistema
las venden con tanta dulzura que
cualquiera las enamora.
14.- Los aliados o aprovechados del régimen económico dominicano actual lo
defienden con energía y autoritarismo; en forma ardorosa, apasionada, con
vehemencia. Algunos actúan ingenuamente con el convencimiento de que es verdad
lo que defienden; otros, están conscientes de que venden una mentira, que están haciendo un
teatro, presentando una comedia con infundios, engañifas y fanfarronadas.
15.- Por muy injusto, decadente, atrasado e
infuncional que sea el sistema capitalista,
sus ideólogos tratan de pintarlo como justo y funcional. Lo protegen
como la niña de sus ojos y lo amparan
para que siempre perviva. Con palabras rebuscadas lo maquillan, presentándolo
gracioso, como si fuera muy atrayente para los
oprimidos.
16.- Los políticos conformes con el sistema,
y coincidentes con el modelo actual,
utilizan toda una serie de calificativos a los fines de hacerlo agradable, simpático, ameno y encantador,
conscientes de que la desigualdad y las lacras sistémicas indignan a amplios sectores de la sociedad
dominicana.
17.- Los más ardientes ideólogos del sistema
capitalista saben que no tiene alma, pero se la ingenian para hacer creer que es poseedor de sentimiento, que se apiada
del dolor, que entristece ante la
explotación, que motiva piedad hacia el ser humano y es poseedor de sensibilidad.
18.-Aquellos que por su capacidad se destacan como ideólogos de primera línea
del sistema, han diseñado modos variados para presentarlo atractivo, maneras
diferentes de mostrarlo conveniente al
ser humano; como arquetipo, prototipo de vida placentera, paradigma de lo
perfecto para el desarrollo humano integral.
Democracia, humanismo, libertad, civilización, progreso, igualdad,
revolución, cambio, etc., son palabras que
en nuestros días no dejan de usar los protagonistas del sistema, aunque
se ha comprobado que saliendo de sus gargantas
entrañan confusión y engaño.
IV.- La ignorancia, terreno ideal para la ideología del sistema penetrar
19.- La ignorancia es el terreno
ideal para desarrollarse la
ideología sustentadora de un sistema
social injusto. La falta de
instrucción, la ausencia de
conocimientos permite que las ideas de las clases dominantes penetren con
libertad al cerebro de los analfabetos por completo y al de los funcionales. El
ignorante, el paleto es presa fácil de los ideólogos del sistema.
20.- La persona que carece de capacidad para
pensar es una víctima a ser conquistada por
los propagadores de la ideología
que conduce a la sumisión de los dueños del poder político, que difunden
y estimulan a los de abajo a la obediencia, a ser manejables y resignados; para
que lo acepten todo comportándose avasallados, subyugados y vencidos; supeditados para que el condicionamiento les
acompañe siempre.
21.- La mujer o el hombre que no piensa es algo así como un semoviente, fácil de
domesticar para servirle a los intereses de su amo. Aquel que está dominado por la ideología
de su adversario, da su aprobación a lo que conviene al que lo ha adoctrinado, y jamás se va a
manifestar contrario a lo que es favorable a quien lo domina mentalmente.
22.- Todo aquel que ha formado su conciencia
social en base a conocimientos asimilados mediante enseñanza condicionada por
la ideología de los grupos detentadores
del poder del Estado, está educado para
la sumisión y la entrega, no para la
brega, el forcejeo y el combate. Para resistir y luchar hay que estar
formado contra el conformismo, a no
aceptar lo establecido sobre la
base de la injusticia, la
desigualdad y el desprecio al ser humano.
23.- La facultad de pensar, el desarrollo de
la inteligencia, la aplicación del juicio correcto y poner en función el
raciocinio, hace posible vencer la penetración ideológica de los enemigos del
pueblo humilde y trabajador. En la medida que la razón impera y dominan los
conocimientos, el ser humano sobresale y
se convierte en dueño de su forma de actuar en el medio social donde realiza
sus actividades.
24.- Los
pueblos que no asimilan las experiencias, las maquinaciones que les han
causado perjuicios, continuarán siendo
sacrificados por sus victimarios. Las ideas vertidas en el pasado que resultaron perniciosas, procede sean
rechazadas, porque de lo contrario estaríamos incurriendo en hacerles
el juego por no escarmentar. Tal es el caso de los politiqueros que en
las distintas campañas electorales hacen ofrecimientos que nunca cumplen,
burlándose así de electoras y electores.
V.- Ideología y elecciones
25.- El engaño ideológico es logrado por el ideólogo mensajero, manejando el recado venenoso en forma
melodiosa, suavemente, armoniosa, en línea de estribillo, todo con el fin de
que aquel que lo escucha quede bien
enseñado, adoctrinado; llegando a memorizar
la comunicación, a retener lo enviado
como sello distintivo, viva
estampa de guía para pensar y actuar
aquel que recibió el mensaje ideológico.
26.- La misión de los ideólogos es hacer una
tarea de martillo en la conciencia de aquellos sectores de la sociedad a quienes buscan embaucar, hechizar, embrujar
para que las ideas del sistema queden enclavadas en el cerebro de las víctimas
ideológicas. El enchufe, el ajuste que
se produce en el cerebro del destinatario, como consecuencia de la fijación de
un concepto, frase o juicio, va a sobrevivir
indefinidamente en sus sentidos.
27.- En cada proceso electoral dominicano, los ideólogos del sistema educan a los candidatos de los partidos tradicionales para que en sus discursos no destaquen los rasgos que caracterizan al
sistema capitalista como atrasado e injusto, ni expliquen al electorado las cualidades, el perfil real,
la verdad de que es sistémica la pobreza,
desigualdad, corrupción, criminalidad, violencia, impunidad, discriminación y
otras taras que identifican al ordenamiento económico y social del país.
28.- Los ideólogos vendedores de las falsedades del sistema que padecemos, lo
presentan como algo idílico. De ahí que elaboran consignas de votar por el
progreso; por el cambio; para continuar mejor, por la honestidad en el congreso, y para que vivas mejor. Estos criterios
persiguen que el electorado esté
motivado para idolatrar el modo actual de vida, reverenciar y acariciar
las cadenas que le oprimen.
29.- Aquellos que diseñan la influencia ideológica en nuestro medio, demuestran su mayor efectividad de
penetración en el curso de las elecciones presidenciales, legislativas y
municipales, porque es cuando están en juego los poderes del Estado, y conviene
legitimarlos por medio de las
votaciones.
30.- El ideólogo cumple fielmente su misión
de adoctrinamiento educando a los
políticos candidatos en la etapa electoral
para que estimulen a los votantes para que con sus votos contribuyan hacer legítimos,
conforme la Constitución y la ley, a los que resultan electos; el ideólogo
trata de dar carácter de autenticidad a
las autoridades electas y a las instituciones del Estado.
31.- Luego de
los electores y las electoras depositar sus votos, para el sistema
ya no son nada, dejan de tener
importancia, son inexistentes. A lo sumo se convierten en una cosa, bagatela; de ser
sujetos apetecidos, se transforman
en porquería política. Más allá del
voto, el individuo no es más que un número en el padrón
electoral
32.- Los electores y electoras, en el curso de la actual campaña jamás van
a escuchar a los candidatos de los partidos tradicionales, diciéndoles
que el sistema que predomina en el país y el actual modelo económico, es cruel,
desalmado, despiadado e implacable;
generador de desigualdad, corrupción, criminalidad y todas las lacras
que degradan la sociedad dominicana, convertida hoy en una cloaca, un vertedero
social.
33.- Lo ideal sería que toda persona con
calidad para elegir y ser elegida, se le dé el trato que merece como ser humano, y no como una simple pieza del
sistema a ser utilizada conforme las
conveniencias de aquellos que dominan el
ambiente político del país. Los ciudadanos y las ciudadanas no pueden ser
manejados como una cosa al servicio de apetencias personales insaciables.
34.- Cada cuatro años somos convocados para
ir a las urnas a reelegir el sistema que mantiene a la generalidad de las
dominicanas y los dominicanos viviendo
en esta sociedad degradante, en la más horripilante miseria. Es sumamente
lamentable, penoso, que nuestro pueblo sea miserablemente manipulado; lastimoso
que ideológicamente se le maneje como estúpido, como si fuéramos borregos,
monigotes amaestrados, dóciles peleles,
mequetrefes de ocasión.
Reflexiones finales
a.- Históricamente, los encargados del diseño
de la propagación del sistema capitalista, tienen como objetivo justificar el
régimen y las instituciones que le sirven de funcionamiento. De ahí que
procuran elaborar ideas que se conviertan en convicciones de los integrantes de
la sociedad, en principios que guíen sus actuaciones.
b.- En
cada época encontramos calificativos que encasillan a organismos, membretes
aplicados a instituciones, inscripciones que sirven para ubicar agrupaciones y
partidos de esencia netamente capitalista, pero con rótulos que cautivan,
encantan, seducen, fascinan, hacen el papel de hechiceros ideológicos.
c.- Precisamente, una de las funciones de los
estrategas ideológicos del sistema capitalista es hacerlo atractivo, totalmente
seductor, fascinante, persuasivo, entretenido; pero nunca repulsivo, odioso,
horroroso, nauseabundo, motivador de aversión.
d.- El juego de palabras hermosas que
utilizan los paniaguados del sistema son, algo así, como rosas perfumadas
para un ambiente lleno de fina
fragancia, con aroma por todas partes; un medio oloroso, agradable a los olfatos más exigentes. Hay
que tener una inteligencia muy fina, ser
agudo, para no caer en la carnada, en el
señuelo difundido que luego se comprueba que no es más que un regalo
envenenado para intoxicar a todo aquel que lo toca.
e.- En la lucha política y social, el
pugilato ideológico es de una trascendencia tal que es el bastión de las clases sociales ya en
desbandadas más difícil de
derrotar; supervive a su derrota.
f.- A las fuerzas revolucionarias les resulta
mucho más cómodo sacar del poder del Estado a las clases sociales que lo detentan, que aniquilarlas en el campo
ideológico. La realidad ha demostrado
que allí donde la clase obrera,
su partido y sectores progresistas y democráticos aliados han resultado triunfantes, han tenido que coexistir, ser comprensivos y tolerantes, durante un largo periodo, con
sectores ideológicamente adversos.
g.- Lo
ideológico ejerce tanto dominio sobre la persona, que la hace sentir adormecida; no siente ni
padece, solo está motivada por lo que las ideas le mandan hacer o no hacer. La
anestesia, que vienen a ser los conceptos, principios políticos, económicos y
sociales, es transmitida por los ideólogos que hacen de anestesiólogos en el seno de la sociedad
donde difunden sus criterios ideológicos.
h.- Uno
de los objetivos de los ideólogos del modelo económico que existe en
nuestro país, es llevar a las masas populares dominicanas a que lo acepten como
justo, normal y predestinado y que, por
tanto, deben permanecer en calma, en total serenidad, sufriendo tranquilas;
haciendo caso omiso a los que las llaman
a reclamar sus derechos a la
emancipación, a que pongan términos para siempre al papel de yunque y se
conviertan en martillo.
i.- Aquellos que sirven de adoctrinadores del sistema
que mantiene al pueblo dominicano
en la marginación social y el
oscurantismo, son los mismos que haciendo labor de adiestradores y bomberos sociales, dicen
que los partidos del sistema son los buenos, y los que cuestionan
el orden económico y social actual son los malos, disociadores, inadaptados y desfasados.
Santiago de los Caballeros,
24 de
Abril de 2016.