miércoles, 30 de diciembre de 2015

El derecho a entrar y salir de mi hogar en La Zurza, de Santiago, sin limitaciones


 Por: Ramon Antonio Veras.

1.- En la ciudad de  Santiago de los Caballeros,   la zona del Monumento a los Héroes de la Restauración,  incluyendo el entorno del Gran Teatro del Cibao, en los  últimos  años  se ha convertido en el lugar principal  para  efectuar masivas  actividades recreativas, culturales,   cívicas, políticas y politiqueras.

2.- La concurrencia para llegar al sitio de las actividades, utilizando  vehículos de motor,  lo hace no sólo por las calles laterales a los  puntos de encuentros, sino  que también penetra  y sale por  la Urbanización La Zurza, de Santiago.

3.- Los asistentes a los actos, en interés de converger en forma simultánea, convierten la zona de la Urbanización  La Zurza, en un verdadero caos; la anarquía predomina; la confusión se apodera  de los conductores y choferes que se dirigen  a la cita convocada; el desbarajuste es total  y el estado de tensión motiva un embrollo incontrolable.

4.- A los fines de evitar  el continuo desorden vehicular  que ocurre en   la Urbanización La Zurza de Santiago, cuantas veces se efectúan  actividades multitudinarias  en el espacio físico del área monumental y del Gran Teatro del Cibao,  lo  que procede es que los organizadores de los encuentros  coordinen,  previamente, con el organismo que regula el  tránsito de vehículos de motor en Santiago,  -Ametrasan-, la forma que se ha de utilizar,  para penetrar o salir de La Zurza,  a los fines de evitar el martirio de sus habitantes, que tenemos derecho a no estar sometidos a mortificaciones  que para otros  son diversiones.

5.- No me opongo que se escojan  para esparcimiento, actividades cívicas,  políticas o politiqueras, todos los terrenos  donde están  ubicados  el  Monumento a los Héroes de la Restauración y el Gran Teatro del Cibao,  pero reclamo el derecho que tengo, al igual que todos los habitantes de La Zurza, en Santiago, a entrar y salir  del lugar  donde está mi hogar,  sin traumas, sobresaltos y conflictos.

6.- Benito Juárez, en su oportunidad, dijo: “Entre los individuos, como entre las naciones, el respeto al derecho ajeno es la paz”.  Precisamente, en la medida que reconozco el derecho de otros y otras a divertirse como les plazca, defiendo el derecho que tengo, al igual que todos los habitantes de la Urbanización La Zurza en Santiago, a entrar y salir de mi hogar, sin problemas ni cortapisas.


Santiago de los Caballeros,

30 de diciembre de 2015.

Ante la llegada de un nuevo año



Por: Ramón Antonio  Veras.

I.- El nuevo año y lo que recibimos
1.- El calendario gregoriano, al llegar el mes de diciembre avisa a las dominicanas y  dominicanos,  la fiesta de la navidad; la conclusión del año que transcurre, que se avecina uno nuevo que  es  esperado, por muchos, con optimismo; y con  la esperanza de que será mejor que el que quedó atrás; el pasado sólo ha de servir como referencia.

2.- Aunque todavía desconocido, el nuevo año debemos esperarlo como al principiante que viene cargado de confianza y muchas  cosas venturosas.

3.- A la espera del nuevo año no debemos hacer cálculos de pesares, pesimismo y lamentos,  ni  reeditar penurias y catástrofes; tenemos que pensar en forma positiva, aislando todo lo dañino que pueda contaminar lo bonito que han de venir los próximos doce meses.

4.- Debemos hacer un ejercicio mental minucioso de lo que, hasta ahora, hemos hecho o dejado  de hacer para disfrutar, material y espiritualmente, de un mejor país; de una convivencia llevadera, sin agravios, ultrajes y vejaciones de todo tipo.

5.- Al recibir el nuevo año tenemos que hacer  un alto en el camino, y razonar en el sentido de que no hemos cumplido con el rol de hombres y mujeres de bien para la comunidad; pero en lo adelante reflexionaremos positivamente, contribuyendo con nuestras actuaciones para dar ejemplo de que hemos cambiado, de ser  personas que tratamos a los demás con acritud y acerbidad, y en el nuevo año seremos diferentes, porque nuestro comportamiento va a ser de dulzura y amabilidad.

6.- El nuevo año que se aproxima debe  servirnos de motivación  para reflexionar en el sentido de que no podemos comportarnos como testigos indiferentes ante hechos aberrantes que ponen en entredicho a la especie humana, y su deseo de vivir en un ambiente propio de seres humanos civilizados. 
   
7.- Lamentablemente, el nuevo año lo vamos a recibir con un ambiente convulsionado por guerras regionales; con almacenes de ojivas  nucleares;  amenaza permanente del terrorismo;  notoria presencia del narcotráfico y su secuela de criminalidad; incidencia de prejuicios por cuestiones de raza, color, ideología y preferencia sexual; millones de seres humanos con hambre y analfabetos; el fenómeno de la corrupción desnaturalizando el accionar político decente y democrático; un centro de torturas dirigido por el país más poderoso del mundo actual, en fin, el estatuto colonial de Puerto Rico, que son hechos que deben repugnar y preocupar a todos los hombres y mujeres sensibles.

II.- En el nuevo año debemos de ser mejores ante nuestros semejantes

8.-  En un mundo cada  día  más dominado por pequeñeces que  afectan al ser humano, se debe sentir bien aquel que dispensa un trato agradable a los demás. Resulta afortunado quien recibe expresiones oportunas que motivan felicidad, cuando otros son víctimas de gestos desagradables.
9.-  La naturaleza sensitiva de las personas contribuye a que  el trato bondadoso sea recibido con alegría; mientras que, por el contrario, produce disgusto, enfado, el ultraje; sentirse ofendido hace al ser humano infeliz, y lo lleva a reaccionar mal.

10.- Al oído de los seres humanos llegan bien las palabras delicadas, dirigidas con dulzura, y más en los momentos difíciles. Escuchar expresiones de  aliento, hacen desaparecer cualquier signo de pesar que pueda afligir o mortificar. Una persona lastimada requiere escuchar bellas expresiones para elevar su estado de ánimo y cualquier desazón.

11.- Debemos mandar a los demás señales  de aliento cargadas de exhortación al regocijo; hacer divertida el alma de quien precisa llenar el espíritu de lo bonito, que sólo puede aportar quien tiene sensibilidad, y se preocupa por la felicidad de otro.

12.- Una frase fea lleva a quien se le dirige a cambiar su estado de alegría a tristeza; de ahí que el lenguaje debe ser utilizado con suma prudencia para no estropear los sentimientos de quien sólo merece gestos exquisitos transmitidos con dulzura.

13.- No sólo físicamente se agrede a otro; una actitud de indiferencia, de desprecio, entraña una lesión; un desaire pesa en la conciencia de un hombre o mujer  digna; el menosprecio es inaceptable para una persona de vergüenza.

14.-  Demuestra indolencia aquel que en forma consciente trata con desdén a sus relacionados, amistades y amigos; un desaire hacia una persona sana y de buen proceder, es un golpe en su corazón. Una desatención, una dejadez ante el requerimiento de una amiga o amigo, es una señal de falta de distinción que daña la relación entre personas que, se supone, se tienen afecto y respeto mutuo, porque en lo adelante los vínculos afectivos ya no serán los mismos.

15.- El trato tosco hacia una persona acreedora de respeto por su comportamiento de bien, constituye una ofensa, un oprobio que sólo es dirigido por quien busca reducir a los demás  por medio del ultraje.

16.- Todo aquel que se respeta, y no acepta ofensas gratuitas, debe proceder en todo momento con mucho tacto para no permitir una agresión por  muy leve que sea; una torpeza, una inobservancia, puede llevar a un abusador a reincidir en sus ofensivas actuaciones. No se puede caer en debilidad ante el bellaco y rudo

III.- Un trato agradable hacia los demás debe ser un signo de que en nuestra conciencia  también ha llegado un nuevo año

17.- Tiene mucha significación en una persona el trato que le dispensa  a otra con motivo de una relación cualquiera; la forma de comportarse ante los demás puede servir  para definir a un  ser humano.  Es de inteligentes entender la forma como deben mantenerse las relaciones sin lesionar; ahí reside la capacidad para entender lo que puede hacer sentir bien o mal a otro.

18.- Aquel que tiene fino trato hacia los amigos, conocidos y amistades, conservará relaciones armoniosas en todo momento, y difícilmente se encontrará en conflictos por malos gestos y actos hacia los demás. Cada persona ha de tener en su cabeza una especie de código del trato para aplicarlo tomando en consideración a cada ente social; porque en el seno de la sociedad los miembros que las integran tienen diferentes criterios de lo que es moral o inmoral, y lo que acepta como normal o inhabitual.

19.- A aquel que proviene de un hogar en el cual se formó en la decencia, honradez y decoro, en el curso de su vida le será imposible aceptar proposiciones indecentes, deshonestas e indecorosas; como tampoco tolerará  las posiciones caprichosas de quienes no valoran sus virtudes. Es indigno quien permite desconsideración a su persona sin importar de quien proviene.

20.- Se reduce como persona quien se comporta tranquilamente ante el maltrato que se le da, disminuyendo así su reputación o la estimación de que goza en el medio social donde habita. Aceptar el descrédito con sumisión es propio  de mequetrefes.

21.- Es sinónimo de poca cosa como persona aquel que, en nombre de obtener algún beneficio para sí o los suyos, acepta ofensas, llegando  con su actitud a la humillación; en lo adelante va a ser visto como un réptil, arrastrándose ante quien le hiere para degradarlo.

22.-   No hay razón valedera para no actuar inmediatamente se advierta un gesto o actitud que entrañe desconsideración hacia su persona y honra; abstenerse de darle una respuesta merecida al ofensor es inhibirse  ante los insultos; es intolerancia,  el agravio que evidencia irrespeto con males morales o insinuaciones hirientes.

23.- Aquel que bien te conoce y te ofende, merece de tu parte una respuesta digna, para que no le quede la menor duda de la indignación que ha motivado su gesto o actuación; se le responde al abusador sin pérdida de tiempo y en el mismo escenario donde ha pretendido herir.

24.- Por lo general, se cree muy listo aquel que trata por igual a todos a quienes ofende con su forma grosera de proceder; de tanto lesionar a los demás,  el que no tiene sentido de actuar con sensatez, ni distingue a las personas por lo que valen, cree que los inteligentes y los bobos son iguales.

25.- Se comporta en forma correcta en el trato con una persona aquella que la valora por las mutuas relaciones, y bajo ninguna circunstancia la hiere con acciones u omisiones. Si mimamos a un ser humano cualquiera, lo tratamos con respeto, cariño y condescendencia. La consideración y el irrespeto han de estar separados, para reservar la distinción especial para quien merece un trato fino, con esmero.

26.- Así como todos los seres humanos no tenemos idéntico carácter, tampoco merecemos igual trato; la personalidad de cada quien ha de guiarnos a un comportamiento acorde con la estatura moral, de ética y dignidad; no todos aquellos a quienes tratamos nos han de merecer la misma entrega; saber tratar a otro es conocerlo y distinguirlo como merece.

27.-El proceder y carácter de una persona define su forma de ser, lo hace diferente de los demás; saber de su temperamento, permite no caer frente a ella en errores que pueden contribuir a desavenencias que terminan en situaciones insalvables.

28.- Prepararnos para hacer sentir bien a las personas que forman parte de nuestra vida, es hacernos felices a nosotros mismos; incomodar a otros no tiene nada de agradable; es algo propio de quienes no tienen sensibilidad, y procuran con gestos o palabras que sus semejantes se sientan fastidiados.

29.- No debe escapar a nuestro conocimiento  que el orden social bajo el cual vivimos en la actualidad, genera comportamientos que predominan en personas sin conciencia del bien y del mal;   o sea, tienen actitudes que sólo merecen la recriminación de lo mejor de la sociedad, porque no ajustan sus actos al proceder de la mayoría de sus semejantes.

30.- No podemos actuar pensando sólo en nosotros mismos, sino también en los demás;  comportarnos en forma individualista es renegar del sentido de la solidaridad que debe primar sobre todo; es correcta una actitud de comprensión e identificación con todos aquellos que accionan en procura del bien.

Conclusiones
a-) Al desarrollar las reflexiones que contiene este escrito no procuro convertirme en orientador cívico, sino que las ideas que expongo sirvan para que quienes tienen la posibilidad de leerlo conozcan mi percepción con relación a lo que creo podemos afianzar, modificar, o de cualquier forma transformar nuestro comportamiento, a los fines de hacer aportes significativos a la lucha social y política del país, así como mejorar o superar  las relaciones con nuestros familiares, amigos, amigas, conocidos y amistades.

b.-) El año nuevo, como todo lo fresco, novedoso y tierno, debemos recibirlo con original sentido de la vida en comunidad; poniendo por delante lo agradable que hay en cada una de las dominicanas y los dominicanos cuando ponen su gracia en procura de la felicidad de sus semejantes.

c.-) La llegada del nuevo año ha de ser acogida por los hombres y mujeres de bien del país, con los parabienes que deben llegar, enhorabuena, para la felicidad de lo que en verdad se llama pueblo dominicano.

d.-) Porque no creo en la deshumanizada tesis de que “entre peor mejor”, siempre he confiado y actuado con el convencimiento de que nuestro pueblo, más temprano que tarde, se liberará de las cadenas de la opresión.

e.-) Porque los procesos sociales no están enmarcados dentro de fechas o períodos, y las masas populares tienen la potencialidad de condensar  veinte años en un día; quién sabe los grandes logros políticos y sociales que el pueblo dominicano puede alcanzar en el año venidero.

f.-) Porque he vivido armado de optimismo, siempre espero lo bueno, lo fructífero; el aliento del triunfo lo he tenido presente hasta en las coyunturas más difíciles de mi vida; el pesimismo nunca vencerá mi deseo de ver a mi pueblo con el control del poder del Estado. La ilusión y la alegría fortalecen mi espíritu.

g.-) No son conceptos abstractos, sino  realidades, las  narraciones que hago desde el punto número 8 hasta el 30; de ellas, unas las he vivido directamente, y otras las he sentido al ser ejercidas o recibidas por otras personas.

h.-) Finalmente, aquellos que en nuestro país  maltratan a los demás con actitudes,  gestos,  palabras o acciones,  la llegada del nuevo año   les debe servir  para que comiencen a distinguir   y a valorar al ser humano como tal, y a los que merecen respeto  por su comportamiento en el medio social.

  
Santiago de los Caballeros,

diciembre de 2015.

miércoles, 23 de diciembre de 2015

Mis hijos, quiero que aprendan de la práctica de la vida


Por: Ramón Antonio Veras.
1.- La sociedad humana es el laboratorio que sirve de escenario para la ejecución de nuestras ideas; la  práctica de la vida es lo que más enseña;  con la ejercitación de nuestro pensamiento demostramos lo que somos, y la experiencia la adquirimos del  accionar   propio y del de los demás.

2.- Mis hijos saben,  desde el momento que tienen uso de razón,  por la práctica de mi vida, que ideológicamente me identifico con el socialismo real como el   único sistema social que resuelve los problemas de la humanidad, en el orden material y espiritual;  pero también saben que nunca en la vida les he  inducido a que se identifiquen con mi pensamiento político.

3.- Mis descendientes han aprendido lo que es la intolerancia política porque han visto, en la práctica,   que a su padre se le ha perseguido, apresado, torturado y difamado, por sostener ideas contrarias a las de sus adversarios ideológicos.

4.- Mis vástagos entienden lo que es el crimen organizado porque han vivido, en la práctica, que Jordi fue víctima de una tentativa de asesinato ejecutada por  sicarios, expresión de  criminalidad nueva en el país.

5.- Siempre  he querido que mis retoños aprendan de la vida, de  la práctica, de  sus propias experiencias, aciertos y desaciertos; que  saquen enseñanzas de lo que les ocurre en el quehacer diario, de las actividades que realizan, las diligencias fructíferas y frustratorias; de las ilusiones y los desengaños, en fin, de los logros y los fracasos.

6.- He tratado de  que  mis hijos  cultiven, aprendan  de la práctica,  porque sólo así descubren, asimilan lo que les será  de utilidad, de provecho en todo el curso de su existencia. Meterse en la cabeza lo que  se extrae   del medio circundante, hace posible vivir sin sorpresas, sobresaltos y desconciertos.

7.- Cuantas veces tengo oportunidad les comento a mis hijos que deben estar preparados para todo, porque el trayecto que lleva  la sociedad dominicana,  el derrotero del país da grima, por lo que  hay que estar listo para moverse con éxito en agua y tierra firme; que  como ellos siempre proceden dominados por la buena fe, deben mantenerse a la expectativa para no ser víctimas de una conspiración.

8.- Les  he hecho saber a ellos, a mis descendientes,  de la conspiración,  porque en nuestro medio  está prohibido progresar;  y todo aquel que saca la cabeza para salir adelante en base al trabajo y el talento, tiene  de frente  a  adversarios  listos para confabularse  e impedirle  que avance. Las tramas, el complot,  forman parte de los métodos  que aplican  aquellos  que sólo saben competir mediante las zancadillas, las emboscadas y las trampas perversas. Aprender  a defenderse de los que conspiran para hundir a los  que buscan salir adelante  con  reglas  sanas, forma parte de la práctica de la vida.

9.- Mis hijos, en el terreno de la  conspiración deben ser sumamente cuidadosos, porque  las maquinaciones en su contra pueden venir  directamente  de competidores suyos, así como también de muchos que dicen ser mis amigos, pero  cuando de intereses se trata se convierten  en simulados amigos. La práctica ha demostrado que los intereses pesan más que la amistad y la sangre.

                                                         Santiago de los Caballeros,   23 de diciembre de 2015.

Yuri, en tu cumpleaños, te reitero: te quiero mucho

Tu padre: Negro Veras.
1.- Uno de los acontecimientos  que más impacto me causó en los primeros años de mi juventud,  fue la llegada al espacio sideral del primer ser humano, el soviético  Yuri Alekséyevich Gagarin, el 12 de abril de 1961. Este hecho me  produjo una impresión que ha quedado fija en mi conciencia para siempre.

2.- El día martes 21 de diciembre de 1971,  mi compañera  Carmen, teniendo como médico  a su amigo y compañero de estudios, al doctor Lowell Whipple Llenas, parió un hermoso niño, de   ocho libras y gran tamaño.

3.- Rebosante de alegría, eufórico, exaltado, como habiendo recibido mi mayor y  bonito  regalo de pascuas y cumpleaños, le dije a Carmen que  al recién nacido le pusiéramos por nombre Yuri Alekséyevich Manuel. Los dos primeros, en homenaje al cosmonauta, y el  segundo, de Manuel, como testimonio de mi  entrañable cariño a mi tío y padre espiritual Manuel Veras. Carmen compartió  mi sugerencia.

4.-   En octubre de 1980, Carmen y yo,  mientras nos encontrábamos en Moscú,  invitados por el Partido Comunista de la Unión Soviética,  les manifestamos a nuestros anfitriones que nos llevaran  a visitar el monumento a Yuri Gagarin; nuestra petición fue acogida.  La edificación es una verdadera obra de arte, digna de llevar el  nombre de un  hombre, de origen obrero, que escribió con letras de oro una de las páginas más gloriosas de la  ciencia,  del dominio de la naturaleza por la especie humana.
5.- Sin que se pueda interpretar como una temeridad de mi parte, puede decir que conozco, en esencia, a mis hijos, sin distinguir  que sea  el de menor o mayor edad,   Alexei o Ramón Antonio.

6.- Por eso, de Yuri puedo decir que es sumamente inteligente e ingenioso; de trato accesible, transparente, observador y prudente; solidario, cariñoso, cargado de ternura y sensibilidad; de un carácter firme y apegado a sus convicciones. Escogió la profesión de administrador de empresas, pero por sus  habilidades y talento, bien podría haber sido mecánico automotriz, ebanista o sociólogo.

7.- Yuri está casado con Claudia Cantisano Arias, de cuyo matrimonio han procreado a Yuri Javier, Paola, Pamela y Sofia. De mis doce nietos y nietas, Yuri Javier y Paola, cada uno en su sexo, son los de mayor edad.

8.- Hoy, cuando Yuri cumple 44 años de edad, puedo decirle: te  quiero mucho; te admiro como ser humano, hijo, padre, esposo y dominicano ejemplar; te valoro  en grande  por tus cualidades excepcionales de talento, sensibilidad, solidaridad y firmeza. Tu persona me motiva  a vivir eternamente apegado a la  idea  de que en nuestro país  los mejores y buenos son los más, y los malos son los menos.

9.- Nunca he olvidado que recién nacido  Yuri,  cuando  éste no había cumplido todavía  los seis (6) meses de edad, en el local del sindicato de UNACHOSIN, en Santiago, el 1 de mayo de 1972, fui víctima de una paliza por agentes policiales  que me mantuvo interno por más de veinte días.

10.- En una sociedad como la nuestra, en la cual a cada momento ocurren hechos repugnantes, la llegada de un  año más de vida de uno cualquiera de mis hijos, nietas o nietos, me llena de alegría,  me anima  a seguir  formando parte del mundo de los vivos,  por tener la dicha de ser testigo del desarrollo  de mis descendientes.


Santiago de los Caballeros,

21 de diciembre de 2015.

sábado, 19 de diciembre de 2015

Reflexionando a mis 77 años de edad

Por: Ramon Antonio Veras.

I.- La influencia de mamá en mi forma de ser

1.- No tengo el menor reparo  en contar lo que ha sido mi vida, y hacerlo con sinceridad, porque  de lo contrario no haría más que  engañarme  y pecar  de farsante por conveniencia.

2.- Llegar vivo  a los setenta  y siete (77) años de edad,  me permite reflexionar  sobre particularidades relacionadas con mi forma de ser, la actitud que asumo ante los demás, y que  puedo hacer para liberarme de mis defectos, y conservar las escasas virtudes que  resultan  de mi proceder en el medio social donde vivo.

3.- No puedo hablar de mi forma de ser, sin especificar  lo determinante  que en mi comportamiento ejerció la formación hogareña que me dio mi madre; en todo el curso de mi vida he tenido  hacia ella  una gratitud, un apego sin igual;  valoro su esfuerzo  por hacerme un ser humano libre por entero, lo que me ha permitido  tener una existencia espiritual agradable, sin anidar  pesares ni resentimientos.

4.- Al asimilar los consejos de mamá  he podido mantener mi conciencia tranquila, sin angustiarme  por los agravios  provenientes de aquellos que han pretendido destruirme, eliminarme físicamente, y moralmente  hiriéndome, recurriendo a la blasfemia y a la descalificación. Por las orientaciones de mamá, anhelar vivir en paz  me ha permitido no tener animadversión  hacia nadie; en el interior de mi alma  no hay lugar  para la congoja  ni la zozobra.

5.- Físicamente no me parezco a mi madre; mis gestos, son distintos a los de ella, pero heredé su carácter, mi temperamento es una copia fiel del suyo, y en mi cabeza tengo una especie de código  que me impuso  en el hogar, el cual contiene   normas resultantes de su rigidez disciplinaria.

6.- Ahora, al cumplir 77 años de edad,  me he dado cuenta  que mi forma de proceder es fruto de una mezcolanza, variedad de enseñanzas,  diversidad educativa, porque aprendí   de la crianza que me dio mamá,  lo asimilado  por los estudios  y lo capturado  en ordenamientos sociales distintos, o sea, en el que nací  y en el que me he ido  desarrollando.

7.- Gracias a las   sabias  indicaciones de mamá,  dentro de los defectos que tengo como persona,  no están  la  venganza, el odio, el egoísmo, la deslealtad, el individualismo  y otras taras sociales que dañan a la especie humana formada en sociedades  fundamentadas  en la desigualdad y la opresión social.

II.- Debilidades  que reconozco a mis 77 años
8.- Aunque mi madre me templó como el acero,  para que no me doblara ante las adversidades, como ser humano  reconozco tener debilidades las cuales he comprobado con el transcurso de los años.

9.- Soy un ser humano que se comporta sólido, pero de un momento a otro  me  torno  frágil,  tal como me ocurre en ocasiones. Así, reconozco un error de apreciación  mía   actuar con ingenuidad frente a individuos que  con el tiempo  descubrí  no merecían mi nobleza. En este sentido  he reincidido durante mi existencia;  la candidez debo reservarla para quien sea merecedora de ella.

 10.- Admito que  reaccionar en forma apasionada no me ha dado buenos resultados; la realidad me ha enseñado que  en determinados momentos  actúo dominado por emociones; a veces   los sentimientos me impulsan  a ser vehemente sin ser correspondido. Debo aprender a no ser  iluso, un soñador despierto, porque  el medio  me lo está imponiendo.

11.- Ser confiado me ha llevado a sufrir  pesares; al  creer  que otro actuaría  como espero, me lleva a entregármele  por completo; fiarme de quien creía merecía confiar, ha sido una falla mía.

12.- Ser sincero, comportarme sin fingimiento ni doblez, en este  ambiente de hipócritas, me   ha hecho comprender  que  debo  revisarme  porque he estado equivocado al dar trato  igual  a  falsos y  leales.

13.- En el querer a los demás  con absoluta franqueza lo he hecho sin darme cuenta que lo practico sin correspondencia; he sido muy dado a tenerle cariño a personas que no  tienen hacia mi ninguna estima.  Esto he llegado a comprobarlo  a nivel familiar, de amistad, sentimental y político.

14.- En mi actitud de generosidad,  me he equivocado, porque la  he materializado con personas no  merecedoras de ella.  En lo adelante   debo ser desprendido con aquel que  bien lo merece y valora  mi gesto.  He caído de tonto con verdaderos ingratos.

III.- La política al llegar a mis  77 años
15.- Al llegar a mis 77 años de edad, puedo decir que la política ha sido mi gran  pasión;  a ella llegué por convicción  y así la he  llevado a la práctica, con la creencia de que actúo  para el bien de lo que en verdad se llama  pueblo dominicano.

16.- En política,  aunque me  guío por  principios que creo correctos, inequívocos, he cometido errores, y aunque no han  lesionado a terceros, me han hecho sentir mal. No siempre he juzgado o interpretado una situación con acierto, sin equivocarme.

17.- En el accionar político, la emoción no ha  cubierto mis  ojos,  ni ha   modificado mi forma libre de pensar; he tratado de vivir la política sin cortapisas, con llaneza, sin  afectación alguna, con absoluta naturalidad.

18.- La forma como ahora se está haciendo política en el país,  me ha decepcionado, porque no  me formé  en esa actividad como se hace hoy; sólo defraudado puedo considerarme de lo  que veo en la política. Me motiva desaliento la politiquería que se hace aquí a diario.

19.- Porque llegué a la política por la pasión  que despertó en mí desde niño,  por  ella me he sentido  cautivado, seducido para materializar las ideas que me han conquistado  por  siempre, y seguiré acariciándolas  mientras tenga vida.

20.- Hubiera querido llegar a los 77 años sin lamentaciones  por la política, pero hoy mi queja se justifica porque la politiquería se ha   convertido en algo que  genera tristeza, un sentir lastimoso;  como veo a los politiqueros  ahora  me acongoja, me da nostalgia, pena por ellos.

21.- Por haber llegado a la actividad política por ideales, no la resisto con carácter mercantil; política y negocios,  para mí  no cuadran  en  la lucha social y de masas; el comerciar  la  política los politiqueros,  me ha  hecho verla como algo propio  de truhanes, mercachifles de baja estofa. En la actualidad, el politiquero es un  artículo de comercio sumamente devaluado.

22.- Para mí, en la política del país se ha producido una metamorfosis para mal, porque  se ha desnaturalizado, convirtiéndose  de una actividad decente y limpia, a algo sucio,  propio de personas de escasa o ninguna valía.

23.- A mis 77 años de edad, lo que me  mantiene incidiendo en las actividades políticas es que  creo  que todavía en mi país los más son los mejores, y  que más temprano que tarde se ha de producir una conversión  de la forma de hacer política con sentido social, y han de imponerse las ideas liberadoras contra todas las lacras sociales y politiqueras.


IV.- A mis 77 años de edad me siento ser dichoso
24.- Solamente mi familia cercana y amistades muy íntimas, saben los justos  motivos que tengo para  reconocer que soy un agraciado al cumplir 77 años de edad, luego de haber transitado tantos y tantos caminos tortuosos.

25.- Por haber vivido setenta y siete años, en un país subdesarrollado, controlado por la potencia económica y militar más poderosa que se conoce en la historia de la humanidad; y accionando en política abiertamente, impugnando el sistema y sus aliados nacionales y extranjeros, me siento no sólo dichoso, sino  suertudo, lo que  me motiva a ser  una persona llena de felicidad. No tengo ningún motivo para considerarme infortunado; por el contrario, soy un ser humano agraciado, venturoso, con posibilidad de generar alegría a quien  precisa de ella.

26.- Por agradecimiento a la vida he convertido  los padecimientos en alegría,  los suplicios en  satisfacción, y los tormentos  en gozo; no me  he dejado  dominar por la aflicción, porque ante ella he puesto la firme voluntad del placer.

27.- Las veces que he sentido lacerado mi corazón, como ocurrió con la muerte de mi madre, de mi padre espiritual y  de mi compañera  Carmen, así como la tentativa de asesinato  contra mi hijo Jordi, he sabido sobreponerme, colocándome por encima de las adversidades  circunstanciales.

28.- Cuantas veces me siento golpeado, en lugar de amilanarme trato no acobardarme, sino de animarme, tomar nuevos impulsos y mostrarme dispuesto a no sucumbir, sino  a vencer. En  las oportunidades que me ha llegado la tristeza, la espanto con mi decisión inquebrantable de no darle espacio en mi vida, porque me he formado en la alegría, haciéndola bonita con la  sonrisa, poniéndome ante ella  gozoso.


V.- Por llegar a los  77 años de edad, conocí simulados amigos
29.- Me alegro de estar vivo a los 77 años de edad, entre otras cosas, porque solamente así  podía llegar a conocer muchas de las cosas feas que guarda el ser humano en su cerebro, y que sólo el transcurso de los años hace posible su comprensión, y esto lo digo por lo siguiente.

30.- En la medida que el medio social dominicano se ha ido deteriorando, se ha hecho más difícil  contar  con una amistad sincera,  y resulta mucho más intrincado  para aquellos  que nos formamos en la franqueza  y la lealtad, y no somos  engañadores.

31.- En los últimos años de mi vida  he descubierto  que personas a las cuales  siempre creí buenas como amigas,  no son más que traidoras, desleales, farsantes, envidiosas y descalificadoras.

32.- Haber llegado a mis 77 años de vida, me ha facilitado  descubrir  a felones  que quise como amigos,  y hoy sé que  en el fondo de su alma siempre me adversaron;  no fueron más que hipócritas, simuladores, practicantes de la doblez, el disimulo, el engaño y la falsía.

33.- Puedo decir,  sin temor a equivocación que, en los últimos dos años de mi vida he aprendido a conocer a los traidores y farsantes, más que los 75 años anteriores de existencia, hasta el punto de que  muchas veces creo  estar viviendo, no  en una comunidad civilizada, sino en una cueva de fieras,  en la que no se sabe  cuál de ellas está esperando la ocasión  para devorarte.

34.- Por haber descubierto  la falsedad de simulados amigos, ahora sólo tengo  los  de calidad; los falsos se  espantaron de mi lado, o ellos mismos, al sentirse desenmascarados, se esfumaron, todo para  mi felicidad y tranquilidad espiritual.  


VI.- A  quienes quiero sólo pido  respeto
35.- Admito que de no  haber sido por mi carácter, mis relaciones familiares, amorosas, profesionales y políticas, hubieran sido más llevaderas; mi temperamento no sintoniza fácil  con las normas que rigen el relajo de  comportamiento en la sociedad dominicana de hoy

36.- Aquel que quiere conocerme, familiar o amistad, debe remontarse a la época en que nací, saber lo que fue mi formación hogareña, así como lo que  ha sido mi vida  material y espiritual desde mi niñez hasta ahora. Por tanto,  quienes más y mejor deben conocerme son  mis familiares más cercanos y mis íntimas   amistades.

37.- Acepto que conmigo se equivoque  quien no me conoce, pero no así aquel que  sabe bien  la  persona  que he sido y soy en lo familiar  y vínculos de amistad. A mis hermanos les quiero; a mis hijos, nietas y nietos, que  son la razón de mi vida, les   amo sin límite, en pocas palabras, gozan de mi adoración plena.

38.- Aunque ocupan un lugar especial en mi corazón, de mis descendientes, hermanas y hermanos, no espero reciprocidad afectiva, sino  el respeto que creo merecer. Es lo mismo que aspiro  recibir de mis amigas y amigos.




Santiago de los Caballeros,

19 de diciembre de 2015.

lunes, 7 de diciembre de 2015

En procura de una unidad programática


Por: Ramon Antonio Veras.

I.- Una generación de luchadores
1.-  En los últimos cien  (100) años de historia dominicana, la generación de hombres y mujeres  que más ha incidido en la política   ha sido la nacida entre 1930 y 1970; en todos los grandes acontecimientos ocurridos en el país ha estado presente, accionando en forma decisiva, y sin importar  que sean actividades  cívicas o políticas, de contenido social o militar, pacificas o violentas.

2.- Pero los entes sociales  nacidos en la indicada etapa, con su propio discurso, con sus ideas progresistas, democráticas, de izquierda o socialistas,  no han llegado  a ocupar ningún cargo electivo;  y si  han estado en el poder es porque han abjurado a los principios que habían  defendido.

3.- El objetivo de este escrito no es referirnos al comportamiento político  de los que  renegaron, a los  que abandonaron  la línea que juraron seguir, sino a los que  se han mantenido firme, sin  apartarse de la ruta que se trazaron.

4.- No vamos a proceder a analizar  las motivaciones que han tenido o tienen  luchadores democráticos  para no concertar  alianzas con otras fuerzas; sólo  haremos  precisiones de lo que creemos conviene hacer para  unificar posiciones en torno a puntos concretos.

II.- Trabajos unitarios en curso de un proceso electoral

5.- En un medio social como  el dominicano de hoy, no  pueden  esperarse aliados políticos químicamente puros, homogéneos, y de sólidos principios; se impone ser prácticos,  sin  ceder en los principios. Pactar con aliados   circunstanciales no rebaja la lucha política por causas justas, simplemente la hace menos áspera, llevadera.

6.- Los hombres y mujeres del país,  históricamente identificados con  el accionar político democrático, deben  aprovechar las coyunturas electorales para expresar su sentir, tomando en cuenta la correlación de fuerzas, las posibilidades de éxitos total o parcial, de sumar para exigir o, simplemente, aceptar algo ahora,  para reclamar mucho después.

7.- Aquellos que luchan por cambios políticos y sociales  verdaderos, no pueden marginarse de los procesos sociales, aunque  las coyunturas no sean  favorables, porque  las masas populares no deben ser abandonadas al mensaje de sus adversarios. A los  que buscan  embaucar al pueblo hay  que enfrentarlos con la denuncia verdadera, certera y esperanzadora.

8.- Si conviene a los intereses  de las grandes mayorías nacionales que  sus  más dignos representantes,  abandonando el puritanismo y  con un   pañuelo en la nariz, sentarse  a debatir un programa mínimo de lucha con sectores  opuestos ideológicamente, pero dispuestos  a  ceder, hay que ir a la mesa de negociación  para  ver qué se puede lograr.

9.- En política hay que ser realista,  estar preparado para bregar en todos los escenarios; ante aliado y adversario, obrar con el convencimiento de que en todo asunto político subyace un interés clasista. Cada actor procura sacar la  mayor ventaja para su clase, sector o capa social.

III.- Sentido político en  trabajos unitarios programáticos

10.- A los encuentros para concertar puntos comunes dentro de las diferencias,  no se puede ir con prejuicios para no acordar, sino con la cabeza fría y en pleno estado de libertad para aceptar, rechazar o conciliar sin lesionarse políticamente. El que va a pactar tiene que estar en condiciones de  acordar o disentir, retirarse y regresar.

11.- En los arreglos políticos basados en cuestiones programáticas  se acepta como también  se puede  discordar. La unidad dentro  de la diferencia se alcanza con inteligencia política de altura.

12.- En política, los acuerdos serios se hacen  de cara al sol, exhibiendo cada parte sus pretensiones. Los encuentros para llegar a la unidad de acción no son  conciliábulos a espalda de las masas, citas hechas para conjuras, ni maquinaciones para operaciones politiqueras.

13.- Los pactos políticos ejecutados en base a la repartición de cargos, se hacen tomando en cuenta beneficios personales y grupales a costa del presupuesto nacional;  los dineros del erario sirven  de motivación a los negocios entre iguales, donde los intereses del pueblo no cuentan, a no ser para  resultar  afectados en la operación  comercial y política.

IV.- Posibles resultados de los encuentros para lograr  unidad programática

14.- La presencia de sectores democráticos en una alianza electoral con corrientes opuestas,  sirve como órgano  dinámico para las masas populares obtener conquistas sociales y políticas  y, a la vez, espacios  orientadores y realizadores.

 15.- Comenzar por trabajos unitarios electorales abre la posibilidad de crear un amplio frente de fuerzas opuestas, que  pueda llegar a englobar a todo un mosaico político ideológico, a los fines  de que en el futuro  el verdadero pueblo dominicano pueda participar efectivamente en el ejercicio   del poder y de su democracia.

16.- Lo que se ha visto hasta ahora es que en el seno del pueblo dominicano hay hombres y mujeres con suficiente  talento  y honestidad,  que  morirán  siendo muy serios y virtuosos, pero condiciones que para nada sirvieron al quehacer político y democrático del país.


 Reflexiones  finales

a.- Demuestra lucidez política quien va a tratar puntos sobre unidad programática, consciente de que  las negociaciones no se desarrollan sin contradicciones, sin obstáculos ni dificultades a vencer. Los inconvenientes  son previsibles, pero hay que elevarse sobre ellos y superarlos con inteligencia para lograr el acercamiento posible y deseado.

b.- El momento es para mujeres y hombres  que,  con visión democrática, vean nítidamente clara la necesidad de la unidad en base a puntos programáticos y no  en reparto de cargos, para contribuir  a la creación de  bases firmes para una alianza futura de mayores proporciones.

c.- En la presente ocasión, ante  las peculiares condiciones actuales, el político sagaz y realista, con orientación certera, ha de aplicar una táctica flexible, defendiendo sus ideas con audacia y sin claudicación, para lograr acuerdos programáticos que recojan, entre otros,  puntos tales como estimulo del  progreso económico, asegurar  la ocupación  a todas las personas aptas para el trabajo, defensa de los recursos naturales nacionales frente a los intereses extranjeros, elevar el nivel de vida de las masas trabajadoras, una política exterior independiente y de colaboración pacifica, el desarrollo del comercio con  todos los países; adecentamiento de la vida pública y la creación de mecanismos para la  instauración de instituciones funcionales. No importa lo dura y porfiada que sea la lucha por la unidad, lo importante es lograrla sin ceder en los principios.

d.- Las discrepancias son normales entre organizaciones políticas con posiciones ideológicas opuestas; las divergencias siempre están presentes  por  criterios subjetivos que  agrietan la unidad, crean  fisuras. Pero lo que debe primar es ponerse de acuerdo en lo que une, y no   insistir en lo que separa y se convierte en fatal tropiezo.

e.- La práctica, la experiencia acumulada en el quehacer político aconseja que hay que comprender que la unidad supone la discusión, de donde resulta que en procura de llegar a acuerdos programáticos  no hay que perseguir una  polémica en términos agraviantes que pongan en peligro el proyecto unitario. Las ofensas crean  irritación que dañan el buen ambiente que se necesita para llegar a puntos coincidentes.

f.- Para alcanzar un entendimiento en base a principios programáticos, aquellos que participan en el dialogo deben  tener la plena libertad, con apego  a la fidelidad de sus ideas, para  actuar con nobleza, interés, consecuencia, pasión y optimismo.

g.- Si se acercan  mutuamente  diversas  organizaciones  políticas a los fines de acordar puntos programáticos a ejecutar en los marcos de un proceso electoral, las partes han de ir convencidas de que la unidad es posible y necesaria, independientemente de las discrepancias teóricas que surjan.  En  la  negociación  ha de  primar el dialogo, la plática franca, la conversación respetuosa.

h.- En procura de avanzar por conquistas positivas para el pueblo, las fuerzas democráticas,   en los encuentros por la unidad, en las negociaciones  deben hacer suyas  las  ideas de Georgi  Dimitrov, con relación a los frentes populares: a.-)  Si están en mayoría, imponen sus puntos de vista; b.-)  en igualdad de condiciones, discuten; c.-) si están en minoría, pura y simplemente,  se funden.



Santiago de los Caballeros,

07 de diciembre de 2015.

viernes, 4 de diciembre de 2015

Para el licenciado Fausto García, con cariño


Por: Ramon Antonio Veras.

1.- Mi dilecto amigo y distinguido colega, el licenciado Fausto García, en el periódico La Información,  de fecha 2 de diciembre en curso, 2015, escribió un artículo  con el título “¿Qué nos espera como país?”. Al Dr.  Ramon Ant. Veras y licenciado José Luis Taveras. El licenciado García,  termina su escrito  preguntándose…”al ver los titulares de toda la prensa de los últimos días dando cuenta de la suspensión de 5 jueces por corrupción y la alarmante confesión pública de la Jueza  Awilda Reyes Beltré, admitiendo dar sentencias “por dinero y por órdenes superiores”, mi pregunta es, y no es solo mía, sino de muchos dominicanos: ¿QUÉ NOS ESPERA COMO PAÍS, SI HACE 31  AÑOS, TENÍAMOS ESTA MISMA REALIDAD?  Por favor, sin que se conviertan en profetas apocalípticos, dígannos algo. Gracias anticipadas”.

2.- Conociendo la correcta  trayectoria de ciudadano  y como profesional del derecho, del licenciado Fausto García,  comprendo perfectamente  su preocupación  por los chisguetes de pus  que han salido  desde el área judicial, y  ante su petición  le doy como  respuesta lo siguiente:

3.- Lo que se está viendo hoy en el orden del servicio judicial, es la expresión de una sociedad deteriorada, agrietada por todas partes; dominada por vicios sociales de diferente naturaleza, entre los que se destacan  desigualdad, individualismo, egoísmo, envidia, ladronismo y corrupción generalizada.

4.- La realidad que teníamos hace 31 años, la tenemos hoy, pero  agravada, porque el modelo económico sobre el cual  descansa la estructura social del país, está agotado, no  da para más, se manifiesta inservible, sólo genera lo nocivo, sucio, dañoso, pervertido, degenerado y asqueante.

5.- El empeoramiento que estamos observando no se detiene; va a continuar recrudeciéndose, sin alivio ni mejoría alguna. El agravamiento ha ido  de recaída en recaída, no se va a detener, y sin posibilidad de recuperarse o reponerse.

6.- A la pregunta del licenciado Fausto García, de  qué nos espera como país, la respuesta la tenemos  a  flor de labios: lo que nos aguarda el futuro  depende de la capacidad de lucha de nuestro pueblo, para la realidad actual que es  fea, desagradable, repugnante, injusta y depravada; cambiarla  por otra distinta, que sea agradable, acogedora, justa y honesta.

7.- Las expectativas de los mejores hombres y mujeres del país, han de ser halagüeñas, a los fines de,  sobre los  escombros de sistema actual, construir una sociedad nueva, basada en la igualdad de oportunidades para todos y todas; que permita  formar los miembros de la comunidad en el amor al trabajo, a la honradez, la lealtad y otras virtudes que  adornar al ser humano.

8.- Los recientes escándalos de corrupción en el aparato judicial, que han alarmado a amplios sectores sensatos del país, incluyendo al licenciado Fausto García, no son más  que una parte del todo; y  tal vez  peores ocurren  en otras áreas del ordenamiento social dominicano. No nos equivoquemos, es la sociedad dominicana actual  que constituye un rámpano, con llagas purulentas en instituciones del Estado.

9.- El desaliento que expresa el licenciado Fausto García, es la fiel expresión de los que en  nuestro país se sienten descorazonados, desanimados ante tantas y tantas cosas sucias que desalientan hasta el más animado. La desfachatez en la corrupción está haciendo pensar a las personas decentes, que aquí la honradez desapareció  sustraída por  los  actores del ladronismo y la cleptocracia.

10.- Para instaurar la decencia política en el país se impone que cambiemos de rumbo y de  modelo económico, para que surjan  instituciones funcionales, y así recobrar  la esperanza, la dignidad, el decoro y la fe perdida. Hay que edificar una sociedad sana, con seres humanos sanos, no podridos por el fenómeno de la corrupción, libres de lacras sociales, para que personas como el licenciado Fausto García, no sientan asco, repugnancia, fastidio en este medio fétido en que vivimos.

11.- Solamente me resta decirle al amigo el licenciado Fausto García, no se desanime, manténgase firme como hasta ahora, que  el futuro del país  es nuestro y la historia dominicana la escribirán con sus acciones ejemplarizadoras  sus mejores hombres y mujeres, que son  los mismos que ahora  están libres  de las porquerías  que motoriza el sistema social que padecemos, y que hace posible  que fenómenos como el de la corrupción mantenga arropada a la sociedad dominicana entera.

Santiago de los Caballeros,

4 de diciembre de 2015.