miércoles, 30 de octubre de 2024

Ayudas oficiales reducen la dignidad

  1. Los ideólogos del statu quo, encargados de acondicionar la forma de los pobres pensar, les han fijado la idea de que deben permanecer viviendo de ayudas.
  2. A los oprimidos les han metido en la cabeza que solo sirven para ser objeto de asistencia piadosa desde el gobierno central, que lo suyo es ser subvencionados.
  3. Para mantener al pueblo pobre, arrodillado, a la espera de la colaboración, nunca se le explica la causa de ser asistido, apoyado con una especie de limosna.
  4. Lo que se quiere hacer creer con las ayudas es que el dominicano es un pueblo que no tiene capacidad o aptitud para, por sí mismo, producir para satisfacer sus necesidades.
  5. Detrás de las ayudas oficiales, lo que se esconde es la imposibilidad del régimen económico y social vigente en el país a dar solución efectiva a las necesidades materiales y culturales de la población.
  6. Los programas de ayudas guardan relación con la pobreza, que es generada por formas de organización social que descansan en la desigualdad de oportunidades.
  7. En el medio social dominicano están presentes las lacras que identifican a un ordenamiento injusto. Mientras exista la desigualdad, estará presente la pobretería.
  8. Los subproductos sociales procuran cubrirlos con mantillas grandes que permiten tapar las manchas que dañan a la gente pobre, aniquilándola, reduciéndola a la nada.
  9. Lo ideal sería que, al momento de hacerle entrega de la asistencia al dominicano pobre, se le explique la razón por la cual vive, a expensas de colaboraciones, la causa real de su desamparo.
  10. El sistema de engaño ideológico está también organizado, que la víctima de la pobreza acepta como lo más normal ser ubicada como parásito social.
  11. Los defensores del sistema que padece el pueblo dominicano, consideran que es más efectivo prestar auxilio de vez en cuando, que sacar a las masas para siempre de las humillantes subvenciones.
  12. Las ayudas desde el oficialismo pueden servir para llevar conciencia a la generalidad de la población que, por su estado de necesidad, se ve obligada a tener una existencia de caridad.
  13. Es duro comprobar que amplios sectores acepten sin indignarse que unos pocos están llevando una existencia a todo dar, ante una gran masa que vive degradada, menospreciada, herida en su amor propio.

Ideas finales

  1. Desde cualquier ángulo que se analice, no es bueno aceptar que al pueblo lo mantengan de ayudas, si puede vivir dignamente de su trabajo físico o intelectual. Las donaciones oficiales hacen de parches sistémicos.
  2. Si el régimen económico bajo el cual vive el pueblo dominicano no le garantiza la comida, entonces ese sistema no sirve y debe ser sustituido por otro que funcione, que sea útil, provechoso.
  3. El trabajo ha hecho posible la existencia del ser humano, pero las dádivas condicionadas por pobreza y politiquería resultan afrentas, abochornan, reducen la dignidad.