miércoles, 28 de junio de 2017

Delio Gómez Ochoa, Comandante internacionalista




Por: Ramón Antonio Veras.

Introducción

La Fundación Héroes de Constanza, Maimón y Estero Hondo, en los marcos del 58 aniversario de las Gestas Patrióticas de junio de 1959, dedicado a la memoria del Héroe Nacional Mayobanex Vargas, me ha solicitado una semblanza del Comandante Delio Gómez Ochoa.


I.- Delio Gómez Ochoa. Sus inicios. Llegada a la Sierra Maestra. Su trabajo en la dirección clandestina

1.- Aunque Delio Gómez Ochoa, nació el 18 de septiembre de 1929, en Cacocum, hoy Provincia Holguín, Cuba, él es cubano de nacimiento, dominicano por adopción, internacionalista por convicción, y ciudadano del mundo por asimilación e historial en su accionar político.

2.- Demostración de apego a la brega por la libertad, la dio Delio Gómez Ochoa, cuando en 1947, contando con tan solo 17 años de edad intentó integrarse a la frustrada expedición de Cayo Confites, que se preparaba en su país para enfrentar la tiranía de Trujillo.

3.- El 30 de noviembre de 1956, ante el levantamiento en Santiago de Cuba, encabezado por Frank País, Delio Gómez Ochoa, fue detenido cuando procuró formar parte de ese movimiento.  Luego fue puesto en libertad condicional, al igual que otros compañeros suyos.

4.- El 29 de mayo de 1957, continuando con su firme militancia revolucionario, Delio Gómez Ochoa, llega a la Sierra Maestra, donde por su arrojo y destreza militar es ascendido a diferentes rangos, hasta llegar a ser designado como Segundo Jefe de la Columna No. 1 José Martí, Frente de la Sierra Maestra.

 5.- Desde su llegada a la Sierra Maestra, la valentía, el arrojo, y la determinación de Delio Gómez Ochoa, fue altamente valorada por sus compañeras y compañeros, y especialmente   por el Comandante Fidel Castro. El reconocimiento de que se hizo merecedor Gómez Ochoa, como contendiente, batallador e intrépido guerrero, se puso en evidencia en una situación complicada en el curso del proceso revolucionario cubano.

6.- Las dificultades espinosas y escabrosas son para los probados en las complicaciones, inconvenientes y apuros; curtidos en las tareas laboriosas, educados en vencer obstáculos; y experimentados en desentrañar complejidades sin buscarle tres pies al gato.

7.- En toda lucha política, social y militar se presentan circunstancias en las cuales hay que recurrir a los combatientes formados para vencer las contrariedades, los conflictos agudos y saber elevarse ante quienes procuran impedir el avance para alcanzar el triunfo.

8.- Una fase sumamente difícil de la lucha del Movimiento 26 de Julio, contra la dictadura de Fulgencio Batista, fue la que resultó de la frustrada huelga convocada para el día 9 de abril de 1958, la cual culminó con una represión brutal, y el asesinato de unos cien (100) militantes de la resistencia. El golpe contra los luchadores revolucionarios fue de tanto pesar y significación, que al cumplirse el primer año de ese hecho, y ya habiendo triunfado la Revolución, en acto efectuado en la Alameda de Paula, Fidel Castro, dijo:

“No fue el triunfo del pueblo un triunfo fácil–subrayó el Comandante en jefe-. Pero aquella derrota del 9 de abril fue lo más duro porque nunca había concebido el pueblo tanta esperanza como la que concibió aquel día. Nunca nos hicimos tantas ilusiones como las que nos hicimos en aquella ocasión”. 

9.- Con posterioridad a la fallida huelga del 9 de abril de 1958, más precisamente el 3 de mayo de 1958, en la reunión de los Altos de Mompié, se decidió que:

“En lo adelante la dirección bélica de ambas fuerzas, es decir, la milicia y el ejército rebelde, quedarán unificadas bajo el mando de un Estado Mayor del Ejército Revolucionario, que tendrá como Comandante en Jefe a Fidel Castro y radicará en la Sierra Maestra”. 

10.- En el citado encuentro se tomaron otras decisiones en lo referente a la futura organización del Movimiento 26 de Julio, una de las cuales fue sustituir en sus cargos a Faustino Pérez y a David Salvador, los que serían reemplazados por Delio Gómez Ochoa como Delegado Nacional de Acción, aunque ya el 16 de abril de 1958, había sido ascendido a Comandante y Fidel le asignó dirigir provisionalmente las operaciones de la Columna No. 4 José martí. 

“El día 5 de mayo, encontrándome en operaciones como segundo jefe de la Columna 1 José Martí en las estribaciones y llanos próximos a la Sierra Maestra, recibí un mensaje del Comandante en Jefe Fidel Castro para que me presentara en la Comandancia de La Plata, que entonces se encontraba en la casa del Santaclarero. Me comunicó que en la reunión de Altos de Mompié, donde se reestructuró la Dirección Nacional del Movimiento 26 de Julio después del fracaso de la huelga de abril, se había acordado designarme como Delegado Nacional de Acción, pero respondiendo esta vez al Mando Único, ya constituido para dirigir todas las fuerzas en operaciones en el territorio nacional. En el mencionado encuentro nuestro jefe máximo, Fidel Castro, quien a partir de esa reunión era Comandante en Jefe del Ejército Rebelde y además Secretario General del Movimiento 26 de Julio”. 

11.- Delio Gómez Ochoa, llegó a la capital cubana el 15 de mayo 1958, y lo hizo con un carné de mecánico del taller de la Empresa de Autobuses Modernos y con el nombre de Marcos Martínez Navarro. Como antes había estado estudiando en La Habana no le era desconocida.

12.- Del porqué responsabilizaron a Delio Gómez Ochoa, con la importante tarea de reactivar la acción del Movimiento 26 de Julio en las operaciones clandestinas, Delio tiene una visión permeada de modestia cuando dice:

“Yo creo que Fidel me designa a mi por una cuestión de necesidad. Así me lo pereció desde que me puso de segundo jefe de su Columna. Yo pienso que lo hizo para poder utilizar al Che como organizador: el Che tenía una capacidad muy grande para eso. 

13.- El 26 de mayo fechaba Fidel un documento en la Sierra Maestra, en el que explicaba por qué lo nombraba. He aquí lo expuesto por Fidel motivando la designación de Gómez Ochoa.

Hago constar que el Movimiento 26 de Julio ha designado delegado nacional de Acción al compañero Delio Gómez Ochoa.

“Al hacer esta designación, considerando la necesidad de llevar a cabo ciertos cambios en los cuadros de nuestra organización, se ha tenido en cuenta la capacidad y el valor del compañero Ochoa, que se ha ganado el reconocimiento de todos nosotros por sus méritos, durante un año de campaña en la Columna No. 1, Frente de la Sierra Maestra, donde alcanzó con su participación destacada en diez combates el grado de Comandante. 

14.- Y Fidel sigue diciendo:

“No obstante contar el Movimiento con numerosos valores revolucionarios probados en la Acción, la designación de un Comandante de nuestras fuerzas, que significa para nosotros un sacrificio desde el punto de vista militar, obedece al propósito de utilizar la experiencia de nuestras campañas militares en el desarrollo de una estrategia nueva de lucha en todo el territorio nacional. Se persigue también el fin de lograr una absoluta identificación entre los compañeros de las Fuerzas de Milicias y las Fuerzas de Operaciones del Movimiento 26 de Julio, coincidiendo con el establecimiento de un estado mayor común para planear y dirigir la acción de todas nuestras fuerzas militares”

15.- Agregando además Fidel:

 “Las responsabilidades contraídas con la patria exigen en este instante difícil un esfuerzo supremo, estrecho y fraternalmente unidos de todos nosotros para que no sea inútil el sacrificio de los que han caído. Mientras en los frentes de combate nuestras fuerzas se disponen a resistir resueltamente el poderío militar de la Dictadura, el Movimiento 26 de Julio debe reestructurar sus cuadros y prepararse urgentemente para el instante en que lancemos nuestras columnas de nuevo a la ofensiva”. No vacilaremos ante los mayores sacrificios, confiados en que nuestros compañeros sabrán corresponder al esfuerzo que nos disponemos hacer”. 

16.- La citada pieza fue firmada por Fidel así: Fidel Castro Ruz,                                        Comandante Jefe de Estado Mayor y Secretario G. del Ejecutivo del Movimiento 26 de Julio”,     y la razón es que este fue el nombre que recibió el cargo de Fidel al reestructurarse la dirección del Movimiento, en Mompié. 

                        
17.- Cuando Gómez Ochoa pisó La Habana y sostuvo el primer encuentro con la dirección del Movimiento, efectuada en el edificio Washington, en Jovellar y Aramburu, recibió una impresión desoladora:

“No había ni un apartamento donde dormir, ni un arma para la defensa personal, ni un centavo. Fui para casa de una de las hermanas de Celia y luego para otra, hasta que conseguimos los contactos necesarios con Pérez, Mario Fuentes, Manolo Núñez, Paco Badías y con las valerosas Macusa (María Josefa) Gómez Quintero, Nilda Ravelo, Angelita González del Valle y Celina González”. 

18.- La misiva, fechada el 1 de junio 1958, posee la singularidad de que Fidel puso la hora en que la hizo al pie de la fecha: 6 am. Algunos de los párrafos, son estos: 
  
“Querido Barton:

“Por tu comunicación veo la extraordinaria tarea que te espera. No me sorprende porque desde aquí la comprendía perfectamente.  Pero sé que para ello hace falta la sangre fría, la calma que tú posees en grado sumo. Te encontrarás en La Habana, inmensa, desconocida y compleja como nos encontrábamos nosotros los primeros días en la Sierra”.

“Aquí como allá el enemigo era dueño del terreno. Estaba bien informado y lo dominaba todo, pero al final fue conquistado, como será La Habana también conquistada por ustedes. Las sorpresas que nos esperan, la ira con que van a reaccionar ante las primeras acciones, las tácticas conocidas de ellos y que no van a cambiar hasta que no sufran los primeros desastres. Si   preguntan qué hubiera sido lo ideal para nosotros en esta lucha de las montañas yo respondería: haber tenido el conocimiento del terreno que hoy poseemos  y haber contado con efectivos suficientes para haber ocasionado al enemigo grandes desastres iniciales aprovechando la confianza y la despreocupación  con que se aventuraban  por la Sierra.  Esto, que es también lo ideal allá, se puede obtener por ustedes de cierta forma. Nosotros no los apuramos a ustedes, al contrario, nos preocupa que ustedes se vayan a apurar demasiado. Sigue al pie de la letra nuestra instrucción de preparar todo cuidadosamente, invertir el tiempo necesario en estudiar el ambiente, el personal, el terreno y las circunstancias”. “A juzgar por tu comunicación veo que no obstante los ingentes obstáculos has emprendido el camino con ánimo resuelto y fe en el éxito (…)”. 

19.- En septiembre de 1958, Delio Gómez Ochoa, regresó desde La Habana a la Sierra Maestra, porque Fidel lo mandó a buscar, después de una falsa noticia según la cual él habría sido apresado, lo que provocó que el Comandante en Jefe hablara por Radio Rebelde reclamando respeto para su vida. Resultó luego que el verdadero detenido, quien también salvó la vida, era otro combatiente de nombre Marcos.

20.- Tiempo después, Celia Sánchez le comunicó  a Gómez Ochoa que Fidel le había pedido que regresara a la Sierra, aunque no sospechaba Delio que su trayectoria serrana volvería a cuajar en un nuevo frente guerrillero, el Cuarto Frente Simón Bolívar, cuya jefatura se la encomendó Fidel a Ochoa a principio de noviembre de 1958.

21.- El Comandante Fidel Castro, sabía el material humano de que estaba constituido Delio Gómez Ochoa; convencido de que estaba curtido en la vida de la Sierra Maestra; con suma pericia en la táctica guerrillera; entendido en el trato a sus compañeros; acostumbrado a los momentos difíciles y, en fin un veterano de varios combates.  Estas cualidades en el orden militar, las condiciones personales y la álgida situación del conflicto, fue lo que llevó a Delio Gómez Ochoa a estar en la dirección del Cuarto Frente Simón Bolívar.

22.- El desarrollo de los acontecimientos que culminaron en Cuba con el triunfo de la Revolución el 1 de enero de 1959, demostraron la capacidad, el talento, la habilidad y sentido práctico de dirección de Fidel Castro, en cuanto al Cuarto Frente Simón Bolívar, por sus hazañas, las epopeyas en la guerra, así como la heroicidad de sus integrantes de los cuales es uno de sus artífices Delio Gómez Ochoa. .

II.- Aportes de Delio Gómez Ochoa a la lucha del pueblo dominicano por su liberación plena


23.- Delio Gómez Ochoa, no ha sido durante su existencia un empecinado, un cerrado a banda en la brega política, social y militar. Él no es más que un revolucionario, internacionalista y solidario consecuente con su pensamiento y accionar.

 24.- Gómez Ochoa, una vez triunfó la Revolución cubana el 1 de enero de 1959, pudo haberse dedicado en su país a cumplir tareas en los órganos del Estado, con méritos bien ganados, y los merecimientos de que se había hecho acreedor por sus valiosas contribuciones, gallardía y absoluta bizarría e intrepidez. Pero en lugar de continuar sirviendo en su lar nativo, escogió la línea la colaboración, el aporte desinteresado, del desprendimiento, de la solidaridad que es la más alta expresión de la especie humana.

25.- La contribución de Delio Gómez Ochoa, a la libertad del pueblo dominicano, no fue solamente por su presencia en la expedición de junio de 1959, sino que incidió y coparticipo en todo lo que tuvo que ver con la Gesta Gloriosa de Junio de 1959.

26.- El conocimiento que tenía Fidel Castro del comportamiento que había exhibido Delio Gómez Ochoa, en la Sierra Maestra y en la resistencia urbana; la prueba de ser valiente, su capacidad militar y habilidad para dirigir y trabajar en equipo, fue lo que le impulsó a otorgarle un salvoconducto para que asumiera como su delegado para todo lo relacionado con la proyectada expedición de Junio de 1959. La credencial dice así:

“Por la presente disposición designo como mi Delegado Personal al Comandante Delio Gómez Ochoa y se le autoriza poder entrar en todos los mandos militares, a fin de cumplir con la misión que se le ha asignado por la Comandancia General. A tales fines, se ruega a todos los mandos militares que le presten toda su colaboración”. 

27.- El trato afable de Delio Gómez Ochoa, su sentido de la camaradería, y la empatía hacia los dominicanos, y por la misión que estaba a su cargo, le llevó a establecer relaciones con dirigentes dominicanos en el exilio, entre ellos sus compañeros en la expedición Enrique Jiménez Moya y José Horacio Rodríguez;   los hermanos Ducoudray, Juan Isidro Jiménez Gullón, Francisco Canto, Luis Aquiles Mejía, Julio Ornes Coiscou, los hermanos Sanabia.

28.- Gómez Ochoa, una vez recibió la autorización de Fidel, pudo ejecutarla limitándose a algunos detalles, condicionarla a los asuntos de adiestramiento militar en su país. Pero no ocurrió así porque se convirtió en el más activo, eficiente, enérgico y entusiasta militante en todo lo que tuvo que ver con el proyecto y la materialización de la Gesta Gloriosa de junio de 1959.

29.- La ubicación en territorio cubano del lugar para el entrenamiento en Mil Cumbres; el recibimiento en Cuba de los futuros expedicionarios llegados desde el extranjero; la recaudación de recursos económicos y pertrechos militares, en fin, Gómez Ochoa se mantuvo al tanto de todos los preparativos de la expedición desde lo relacionado con el avión C-46, que llegó el 14 de junio por Constanza hasta las embarcaciones que trasladarían a los combatientes que llegarían por vía marítima.

30.- La firmeza de Gómez Ochoa, sus convicciones e identificación con la brega de nuestro pueblo por su libertad, y su deseo de enfrentar la tiranía de Trujillo, la demostró cuando todavía faltaba por determinar su participación o no en la expedición. A este respecto él escribe:

“Sobre el asunto, recuerdo que Enrique me planteaba con mucha fuerza qué iba a hacer él solo, sin apoyo, pues él nunca había comandado tropas y no tenía experiencia. Yo estaba ya convencido de que debía acompañarlo. Sin embargo, muchos compañeros cubanos entendían lo contrario. Manejaban el criterio de que yo había luchado y padecido los avatares de la guerra de guerrillas y de la lucha clandestina en misiones sumamente difíciles, de manera que ahora tocaba a otros asumir los más altos riegos. Con este argumento el Comandante Raúl Castro y Ernesto- Che-Guevara no se mostraban tampoco muy convencidos con la idea. Pero la decisión de venir a la República Dominicana fue mía. 

31.- El 14 de junio de 1959, Gómez Ochoa arribó al país en compañía de 54 expedicionarios. Él quedó al mando de un primer frente de 20 guerrilleros; los restantes 34 formaron un segundo frente dirigido por Enrique Jiménez Moya. Por la irregularidad del terreno ambos frentes se distanciaron, lo que les impidió actuar de manera concertada y facilitó la liquidación de los integrantes de dichos colectivos por parte de las fuerzas armadas de la dictadura.

32.- Por su experiencia en la Sierra Maestra, Gómez Ochoa fue uno de los últimos en ser capturados y formó parte de los seis (6) sobrevivientes de la acción guerrillera. Permaneció en prisión hasta el 9 de junio de 1961 y padeció los rigores de las torturas inhumanas de la cárcel La 40. A pesar de su fracaso, la expedición militar logró quebrar la idea de la naturaleza invencible de la dictadura trujillista, además de que contribuyó a catalizar el movimiento de oposición a la misma.

33.- Los dominicanos y las dominicanas que creen sinceramente en las ideas democráticas y progresistas, deben ver en Delio Gómez Ochoa a un compatriota excepcional que inmortaliza y honra con su ejemplo solidario e internacionalista a nuestro país, a la vez que más profundamente unifica a Cuba y a la República Dominicana.

34.- Delio Gómez Ochoa, es hoy el único sobreviviente de la Gesta Gloriosa de Junio de 1959. Su presencia simboliza la Raza Inmortal, y ha demostrado coherencia de pensamiento al expresar su deseo de ver en nuestro país, el también suyo,  hecho realidad el programa mínimo de la Raza Inmortal, la misma que vivirá eternamente en nuestro pensamiento, perdurará en nuestra conciencia  y en las de las futuras generaciones. 





Charla Conferencia 20/6/2017
Centro León, Santiago.
                                                                                                         




Fuentes de citas:


[1] En el libro Semillas de Fuego, tomo 2. Historia de Cuba. Editorial de Ciencias Sociales, La Habana 1990. Página número 8.
[1] Idem. Página número 6.
[1] Idem. Página número 7.
[1] Idem. Página número 9.
[1] Idem. Página número 9.
[1] Idem. Página número 9.
[1] Idem. Página número 10.
[1] Idem. Página número 10.
[1] Idem. Página número 12.
[1] En el libro: Constanza, Maimón y Estero Hondo. La victoria de los caídos, Página 27; de la autoría de Delio Gómez Ochoa segunda edición, Colección Historia y Sociedad número 122. Editado por la UASD. 
[1] . Idem. Página 48. 

jueves, 22 de junio de 2017

Coherente, libre de pensamiento y amigo

Por: Ramón Antonio Veras.


I.- Una cosa es ser coherente, y otra, aparentarlo


1.- La coherencia no resulta de un acto. Ella requiere un accionar en forma sistemática, porque la constancia es la esencia de la invariable conducta de quien hace de sus actuaciones una habitualidad; es tener mentalmente estructurado el comportamiento en forma metódica.

2.-   La persona demuestra consistencia al obrar siempre atendiendo a una reglamentación. Actuar inmutable, permanente, prueba firmeza de parte de quien así se comporta. No hay inestabilidad en aquel que es estable al portarse siempre igual probando coherencia.

3.- La actitud asumida por un individuo ante situaciones concretas revela la postura que lo identifica como consecuente, porque obra de acuerdo con sus ideas o principios; demostrando perseverancia, obstinación en ser igual, llegando a la terquedad, manejándose con tesón en sus convicciones. Al mantenerse siguiendo la misma línea, siendo afanoso ante los hechos que ocurren en el medio donde vive, es una clara evidencia de que su asiduidad lo identifica como tesonero en la forma de vida, empeñado en no flaquear, conservar la insistencia en sus actuaciones.

4.- Conducirse siempre con la misma actitud evidencia en el ser humano estar educado para desenvolverse respondiendo a los hábitos que integran su código de comportamiento, algo que solo hacen los que son coherentes en armonía con todo lo que es su práctica.

5.- Actuar en forma enlazada, exhibiendo encadenamiento en sus actuaciones, hace posible identificar a las personas que en el medio social poseen conducta fuera de toda pose o artificialidad,  porque lo falso no cuadra en los auténticos que son los que se manejan con naturalidad, con espontaneísmo.

6.- La vida coherente es la de quienes proceden en forma habitual, normal y corriente; sin actitudes que los hacen ver como extraños, incongruentes e inconsistentes. De ahí que solo la actitud mantenida ante los diferentes fenómenos sociales sirve para definir a los seres humanos.

7.- La continuidad, la fijeza, la secuencia haciéndole frente a los acontecimientos marcan, califican por sus cualidades a un sujeto como consecuente, de proceder acorde con su discurso racional, creíble.

8.- No basta una actuación aislada, inconexa y accidental para identificar a un individuo como coherente, porque la coherencia es una conducta, un actuar igual en forma permanente, constante.  Accionar en forma continua, sostenida, permite comprobar un proceder integrado, consecuente.

9.- Aquel que cree en la justicia y lucha por su vigencia, limpieza y aplicación, obra con coherencia cuando procura que sea aplicada al que resulta culpable de un acto delincuencial, sin importar quién sea. Pero es incoherente el que solo quiere justicia por conveniencia o para satisfacer deseos de venganza.

10.- Demuestra ser inconstante quien aspira a que la vara de la justicia solo alcance a quienes odia por prejuicios, aunque predica que quiere que a todas y a todos se les aplique por igual la ley. El proceder circunstancial está muy lejos de la perseverancia.

11.- Aunque el proceso seguido a los autores de la acción criminal contra mi hijo Jordi, ha sido aplazado en más de sesenta (60) ocasiones, siempre he defendido que a ellos se les respete el debido proceso. Habría obrado en contra de la defensa que he hecho toda la vida de la igualdad de todos y todas ante la ley, si me opongo a que con ellos no se cumpla con la ley. Tampoco es coherente aquel que predica que hay que respetar la presunción de inocencia, pero le lanza el calificativo de ladrón a quien es acusado de robo sin haber sido condenado.

12.- Enfrentar el fenómeno de la corrupción es manifestarse en su contra en cualquier circunstancia, demostrando así un proceder perseverante, coherente. Pero no hay persistencia cuando solo se censura a los corruptos de una sola bandería política.

13.- Ser consecuente con la defensa de los derechos humanos es defenderlos siempre, sin importar la persona víctima de la violación. Se desenvuelve no regular aquel que solo censura el ataque a los derechos de quien es su aliado.

II.- Sin temor a confrontar mis ideas

14.- En mi cerebro tengo las ideas debidamente organizadas; las he educado para exponerlas libremente; enfrentarlas con las de mis adversarios y armonizarlas con mis aliados ideológicos. En ellas confío plenamente hasta el punto que son dueñas de mi pensamiento y accionar.

15.- Por la devoción, el afecto, apego y confianza a mi estructura mental, mis opiniones políticas se las he expuesto a Jorge Puello Soriano-El Men-, y al Cardenal  Nicolás de Jesús López Rodríguez; a Fidel Castro,   Manuel Antonio Noriega y a Jean Bertrand Aristide; las he  discutido con Yasser Arafat, Kim II Sung y Muamar el Gadafi; con Juan Bosch y José Francisco Peña Gómez; don Antonio Guzmán Fernández y Salvador Jorge Blanco; Hipólito  Mejía y Narciso Isa Conde; así como con Luis Abinader y Rafael Chaljub Mejía. Son las mismas ideas, aferrado a las cuales defendí ante los tribunales a Onelio Espaillat y a Lorenzo Vargas, y con las mismas que reclamé la libertad, en pleno invierno, en las calles de New York, de Marcelo Bermúdez.

16.- La concepción que tengo sobre la vida y el mundo, y el juicio que anido en mi cabeza con relación a la realidad de mi país, lo he examinado con Monseñor de la Rosa y Carpio, Agripino Núñez Collado, como también con Luis Abinader, Leonel Fernández y Danilo Medina.

17.- Pensar con libertad, razonar sin prejuicios y meditar sin condicionamiento, me han permitido entregarme por entero a ejercer el derecho que tengo, sin consultar a mi almohada ni pedirle permiso a persona física u organización política alguna, para reunirme en cualquier momento y lugar, con quien sea, y sin importar que esté en la cima del poder del Estado, o haciéndole oposición ciega al gobierno de turno.

18.- Sin darle mucha vuelta a mi cabeza, ni procurar   autorización de amigas, amigos o familiares, he puesto en peligro mi vida defendiendo en mi país, y en otros lugares del mundo, el derecho que tiene todo hombre o mujer a actuar conforme se lo dicta su conciencia.

19.- Poner las ideas frente a frente, carear los pensamientos, encarar, confrontar los criterios ideológicos con altura y sin procurar imposiciones, solo es posible entre personas que creen en lo que piensan y están convencidas de las opiniones que sustentan.

20.-Todo aquel que se ha preocupado por creer solo en lo que ve; entender lo que ha asimilado de la vida práctica; juzgar sin pasión; confiar en lo que ha reflexionado fruto de su inteligencia, de la concentración de conocimientos y de una cavilación sin cortapisas, no tiene nada que temer en la polémica, el diálogo, en el debate franco, en la controversia desarrollada en un plano civilizado.

21.- Siempre he estado dispuesto a sostener discusión política con el que se identifica con mis ideas, así como con aquel que está en desacuerdo. La disensión no me aísla; por el contrario, me motiva a mantenerme en el escenario de la discrepancia.  La desavenencia me impulsa a tener mis opiniones a flor de labios y listas para el acuerdo o la discordancia.

22.- No me creo portador de la verdad absoluta, y de la misma forma que puedo poner en duda la opinión de otro, estoy preparado para ponerme de acuerdo o controvertirla. No es mi estilo convertirme en espíritu de contradicción; creo en la argumentación sensata y estoy presto a respaldar lo que equivocado he impugnado.

23.- En mi vida nunca aceptaré que se me quiera prohibir hacer, o no decir lo que me manda mi pensamiento, y mucho menos aceptar que se ponga en entredicho lo que ha sido el comportamiento, la limpieza como he tratado de comportarme en la vida pública nacional e internacional.

24.- Todo aquel que procede ajustado a sus sanas convicciones no puede, bajo ningún concepto, aceptar en silencio el chantaje ideológico cubierto de perversidad, alimentado por cerebros letrinos,  con el marcado objetivo de ensuciar  vidas dedicadas a actuar por lo que más conviene a lo que sirve de la sociedad. 
III.- Con los amigos y amigas siempre

25.- Con mis amigas y amigos estoy preparado para compartir la alegría o la tristeza; la felicidad o las penas; cuando permanecen recontentos o deprimidos. Poco me importa que por cualquier razón estén en libertad o en prisión; en una fiesta o en la funeraria. Donde quiera que mi presencia sea conveniente a mi aliado en la amistad, ahí estaré presente.

26.- Soy amigo de la persona, no de sus actos, los cuales han de ser tomados en cuenta por la sociedad; de su proceder antisocial no me convierto en árbitro para condenarlo o liberarlo, porque de esto se encargan los tribunales.

27.- El amigo que se involucra en un acto de corrupción, no justifico su actuación, ni me pongo la toga y el birrete para defenderlo ante los tribunales; pero si es condenado voy a la cárcel a verlo sin entrar en reproches por la acción que motivó la sanción penal de que se ha hecho acreedor.

28.- Al igual que con el amigo, también cuenta con mi distinción la persona que en un  momento de dificultad para mi  y mi familia me extiende la mano solidaria. No estoy preparado para la ingratitud que tanto abunda en el medio social dominicano de hoy, donde la gratitud ha desaparecido y su lugar ocupado por el olvido y la deslealtad.

29.- Aunque no vivo dominado por las relaciones primarias, creo firmemente en la solidaridad y la correspondencia. Pero lamentablemente, por el agrietamiento de la sociedad, ya hoy no tiene ningún sentido ser apegado a la fidelidad y a la rectitud en los vínculos de amistad.

30.- Lo que es un deber en las relaciones entre amigos, no hay que pensarlo dos veces para cumplirlo. Particularmente yo, me siento liberado de pedirle permiso a un familiar o camarada para demostrarle al amigo infortunado, que ha caído en desgracia, que sigo siendo su amigo.

31.- Es muy fácil compartir con las amistades en ocasiones de dicha, prosperidad y alegría, y luego sacarles los pies cuando están arruinadas, fastidiadas, en situaciones calamitosas. Los que son mis amigos, pueden contar conmigo en los momentos de suerte y en los de hecatombe, en los de triunfos y en los de derrotas, porque no estoy hecho de la doblez, sino de una sola pieza.

Una reflexión final

Por último, debo decir que por tratar de ser coherente, confiar en mis ideas y honrar la amistad, he tenido que escuchar palabras salidas de las gargantas de canallas, perversos, pura y simplemente, de toda la escoria social que tanto abunda en este país, en alianza impúdica con personas que simulaban ser mis amigas.


Santiago de los Caballeros,

22 de junio de 2017.

Honrar las ideas: es signo de coherencia

Por: Ramón Antonio Veras. 


I.- El apego a las ideas políticas

1.- Por muy degradada que esté una sociedad, en su seno necesariamente hay personas que no se corrompen, porque están formadas para permanecer inmunes a los vicios sociales; intactas ante las tentaciones que puedan presentarse; ser extrañas a las seducciones pecaminosas.

2.- La realidad histórica de nuestro país ha demostrado que no obstante el estado calamitoso que se encuentra el medio social dominicano, todavía es posible contar con mujeres y hombres de valía, que pueden exhibir una página limpia, de comportamiento correcto, sin tachas.

3.- La reciedumbre de buena formación, el vigor en el buen proceder, y la entereza de vida ejemplar se hace más notoria en la medida que el medio social se debilita en lo ético y moral, porque es ahí donde sobresale el aguante, el aplomo de quienes están libres de flaquezas.

4.- Aquellos que están educados para ser íntegros; instruidos para ser probos y honrados  por entero, pueden moverse en agua y tierra firme, y nada les modifica su carácter, porque fueron adiestrados  para vivir dignamente en la línea de ser coherentes en su pensar y actuar.

5.- Quien predica la necesidad de crear una sociedad justa debe mantener una conducta inquebrantable, inequívoca e incuestionable. La concordancia de vida hace posible al actor ser visto invariable en sus ideas, libre de duda en su accionar, sin sospecha en su mensaje y en sus actuaciones.

6.- El apego a las ideas políticas debemos llevarlo a cabo con firmeza; quererlas con el convencimiento de que nos simpatizan porque son buenas, sanas y convenientes para el bien de la sociedad. La inclinación a ellas ha de ser el resultado del cariño finamente cultivado en nuestra conciencia, lo que nos lleva a ligarlas en forma indisoluble en nuestro pensamiento.

7.- Aquel que en política se ha mantenido meritorio defendiendo su ideario, debe conservar su honorabilidad, sin tomar en cuenta lo deshonrosa que está la politiquería; lo vergonzoso, oprobioso y afrentoso que es ser político vinculado con el sistema. El proceder desfachatado, descarado y atrevido ha hecho que la política sea vista como algo que degrada, propio de truhanes.

8.- La ideología que se abraza debe ser enaltecida por quien la propaga; encumbrada por el que procura hacerla atractiva; engrandecerla con actuaciones el individuo que la defiende como lo correcto y adecuado para que prevalezca sobre las que se le oponen. La forma de pensar y actuar define a la persona y a sus ideales.

9.- La persona de ideas liberadoras hace trabajo político en base a exponer con claridad, porque procura orientar con sinceridad, a diferencia de los politiqueros que tienen como finalidad sembrar en sus seguidores la confusión, la vacilación y la incertidumbre.

10.- Solamente es posible la aprobación de los pueblos a las teorías que les transmiten sus dirigentes cuando están conscientes de dar su consentimiento a lo que es conforme a su demanda, aspiración y sentir. Es una anuencia fruto de la conciencia.

11.- Es de fiar aquel que es consecuente con el plan que predica demostrando así lealtad a sus convicciones y, de igual manera, se hace merecedor de consideración en política quien por devoción a sus creencias cumple con exactitud lo que es de interés para la generalidad de los miembros de la sociedad.

12.- Da prueba de honradez en las actividades políticas aquel que con el fin de materializar sus creencias llega hasta el sacrificio. La nobleza tiene significación cuando el actor político le hace honor levantándola por encima de conveniencias particulares.

13.- El luchador político demuestra ser coherente en sus actividades cuando plantea, elabora planes sociales confiables y motiva confianza en el seno del pueblo. La seriedad en política genera seguridad, creencia y certidumbre en quien levanta sus ideas con entusiasmo, aplomo y mensaje de esperanza.

14.- El ciudadano o la ciudadana de firmes convicciones, que honra sus creencias y confía en la potencialidad de su pueblo para cambiar el país para bien, tiene un compromiso ineludible; un deber que no puede soslayar; y mucho menos transigir comportándose indiferente ante la cochambre que nos afecta.

15.- Todos aquellos que se iniciaron en la actividad política movidos por ideales, deben mantenerlos con  la compostura, la dignidad y la mesura que caracteriza a los que luchan sinceramente por cambios sociales,  aunque hoy se encuentran haciendo política en el pantano nacional dominicano. El estado de gravedad de una sociedad no impone la actuación incorrecta, el descaro político.

16.- Sin importar la vehemencia y el entusiasmo que se manifieste, el sentir político debe ser ejercido conservando la creencia con decencia, porque ella refleja la conducta del accionante. Actuar en forma iracunda es un reflejo de que no hay madurez y que el arrebato se ha apoderado de quien quiere imponer su criterio a rajatablas, atropellando sin miramientos, desconsiderando sin contemplación alguna.


II.- Predominio de las ideas atrasadas

17.- Las ideas que emanan del sistema social predominante influyen en la generalidad de los integrantes de la sociedad, por lo que quienes sostienen criterios ideológicos distintos están en el deber de permanecer alerta porque pueden ser penetrados, o de cualquier forma condicionados a actuar como conviene al orden establecido.

18.- La penetración de la ideológica retardataria resulta dañina para aquel que está en la brega política con el objetivo de cambiar la situación actual, es decir, el modo de vida que impone el statu quo. Pero aunque es difícil mantener la pureza de las ideas, hay que tratar de que no sean totalmente contaminadas por las de los adversarios.

19.- La práctica diaria nos está diciendo que, quiérase o no, las opiniones, los pareceres, los criterios más absurdos y aberrantes   han logrado influir en amplios segmentos de la sociedad dominicana. El modo de ver la realidad nuestra ha sido condicionado por las ideas que buscan justificar el mantenimiento del sistema y, principalmente, el actual modelo económico y social.

20.- Aunque es un absurdo, una desviación, querer justificar la desigualdad y un descarrío defender las lacras sociales que genera el orden actual, la verdad es que contra todo acierto, prudencia y tino, se están imponiendo las consideraciones, teorías y creencias que mantienen a la mayoría del pueblo apegado al pensamiento del atraso, de lo que significa atavismo.

21.- Por más esfuerzo que se ha hecho, lo que pinta la realidad es que en nuestro medio se han impuesto, y siguen imponiéndose, las ideas conservadoras y tradicionalistas, y no han prendido las renovadoras. Lo ancestral, lo secular está por delante de lo innovador.

III.- Las ideas nuevas que convienen

22.- Lo ideal fuera que lográramos que la niñez dominicana comenzara a ser formada con una concepción de la vida que se fundamente en ideas renovadoras, principios éticos y morales de nobleza, honorabilidad y correcto proceder.

23.- Para el porvenir de nuestro país conviene, que lo mejor de la juventud actual se interese en formar familias que sirvan de modelo en sus actuaciones; personas a ser imitadas por tener criterios bien acabados de sensibilidad, cultivados en valores que sirvan como paradigmas y muestras de el buen vivir en forma civilizada.

24.- La formación de los futuros dominicanos y dominicanas debe estar orientada para que   su proceder esté ajustado a lo que conviene a la sociedad, no a las apetencias personales. El alma, cuando se educa en lo social, se convierte en una fuerza que hace posible estructurar una comunidad humana con voluntad dirigida al colectivismo, y no al individualismo que sólo conduce al egoísmo.

25.- El brillo, el esplendor de una sociedad se evidencia cuando sus miembros han sido educados para manifestarse satisfechos por cumplir voluntariamente con las acciones de solidaridad, revelando así su desprendimiento, lo estupendo de su forma de proceder.

26.- Cumplir tareas en provecho de los que representan a la mayoría se logra cuando se instruye para que se practiquen ideas que sirven como guía para la acción de la ruptura de las cadenas de la opresión.

27.- Para renovar una sociedad atrasada como la dominicana, se impone llevar a la conciencia de los más lúcidos y sensibles la idea de que no podemos continuar viviendo como hasta ahora en lo material y espiritual, y que se hace impostergable un cambio para hacerle   la vida menos pesada a lo que aquí son los más.

28.-  Debemos actuar con el convencimiento de que no es posible modificar el orden económico y social actual esperando que lo hagan los sostenedores de las ideas del pasado, que no son otras que las mismas que conservan, mantienen el statu quo, y son incapaces de remplazarlo  por otro diferente.

29.- El país nuevo que merecemos, necesitamos y queremos debe ser obra de mujeres y hombres con criterios y conceptos novedosos; de pensamiento fresco, cultivado, debidamente adecuado al signo de los tiempos. El modelo que lamentamos padecer es arcaico, vetusto, no sirve ni como pieza de museo. Su lugar es el zafacón.


Reflexiones finales

a.- A un pueblo cualquiera resulta difícil cambiarle la  ideología nociva que tiene arraigada por la influencia de las ideas predominantes en el medio donde vive, pero hay que hacer esfuerzos  por extirpar, desarraigar aquellos conceptos que en nada bueno contribuyen a la sana educación y formación ciudadana y cívica.

b.- Por la ruta que vamos, en lo que a ideas progresistas se refiere, la realidad nos está diciendo que hay que cambiar de dirección, porque la preparación educativa en ese sentido ha resultado, si no fallida, por lo menos deficiente, carece de méritos, lo que se evidencia por las actuaciones de nuestros paisanos.

c.- Debemos armarnos de ánimo, empuje y absoluto aplomo, para derrotar el atraso y el pesimismo, apoyándonos en nuestras propias fuerzas y convicciones para salir adelante; y con la firme creencia de que las actoras de la historia y los cambios sociales serán las masas populares compuestas por los mejores hombres y mujeres del país.

d.- Con todo pesar hay que decir claramente que las ideas nuevas están en desuso en la actividad política del país, porque ya no se valora lo fidedigno, auténtico y sincero, sino lo hipócrita y aparente. Estamos en el periodo de lo solapado, falaz y taimado y, al parecer, mientras más falso, dudoso e inexacto, mejor.

e.- Ante los engaños de que ha sido víctima nuestro pueblo, necesita tener en la política a personas en quien confiar. La confianza, el tener por cierto ha desaparecido en el medio político, porque lo que ha primado es el chismoso, el intrigante, el difamador, pura y simplemente el infame que disfruta con el descrédito de quien lo ha ganado por un comportamiento firme, responsable, honesto, coherente y sin pasarle factura al pueblo dominicano. 


Santiago de los Caballeros,

13 de junio de 2017.

viernes, 2 de junio de 2017

A los 84 meses de la tentativa de asesinato contra mi hijo Jordi

Por: Ramón Antonio Veras.


1.- El expediente donde figuran los imputados por el caso Jordi, se encuentra en estado de fallo ante la Suprema Corte de Justicia, desde el 27 de marzo, del año en curso 2017.

2.- Los procesos judiciales están regidos por plazos, de donde resulta que, luego de iniciados, en un momento dado llegarán a su final. Por tanto, la desesperación, el desaliento y la desmoralización, que nunca han estado presente en mi, mucho menos ahora me van a dominar.

3.- En mi condición de padre de Jordi, permanezco esperando, animado y enteramente alentado, porque estoy confiado que, más temprano que tarde, el caso terminará.

4.- Porque soy hombre de convicciones, al caso de mi hijo le he dado seguimiento en calma, tranquilo; sin desilusionarme, y con el convencimiento de que exasperarme podría llevarme a sacarme de quicio, en un asunto que requiere actuar en forma equilibrada, con suma ecuanimidad.

5.- Confiar, creer, estar plenamente convencido de que el expediente que comprende el caso de Jordi, en todo momento ha estado y está en manos de magistrados confiables, me lleva a permanecer en una espera sin temores, sobresaltos, ni atrapado por el susto.

6.- La tranquilidad espiritual que me acompaña para esperar el fallo del más alto tribunal del país, no va a cambiar; la conservaré con serenidad, en pleno sosiego, con verdadero aplomo. No tengo razón alguna para estar nervioso, perturbado o inquieto.

7.- El momento ha de llegar para que Jordi, su familia y la sociedad dominicana sana descansen, estén en paz, luego de haber permanecido con intranquilidad por un hecho repugnante, abominable y despreciable.

8.- Por muy degradada que está la sociedad dominicana, no todo está perdido, en su seno hay mujeres y hombres no contaminados, en los cuales hay que confiar. Debemos conservar, dar fe, certificar como correcta la conducta de jueces que históricamente han probado ser probos y honestos. El fallo de la Suprema Corte de Justicia, lo espero tranquilo y me inclinaré ante lo que decida.



Santiago de los Caballeros,
2 de junio de 2017.

El luchador social real, y el que lo aparenta

Por: Ramón Antonio Veras.

1.- Necesariamente, para ser luchador social hay que ser sensible, repugnarle las injusticias. Solamente el que hace suyas las causas nobles está en condiciones de interpretar correctamente la solidaridad y ponerla en práctica.

2.- La combinación de sensibilidad y conciencia social lleva al individuo a la actividad política comprometida. Una vez es conocida la justeza, la razón que justifica motorizar el cambio de lo negativo actual, por lo positivo para el futuro, el sujeto se siente compelido, impulsado a trabajar para que se materialicen los cambios que requiere la sociedad para el bien colectivo.

3.- El accionar de los luchadores sociales responde a que perciben que sus sentimientos les imponen estar ahí, donde conmovidos por la situación de injusticia deben colocarse al lado de los que padecen como consecuencias de iniquidades resultantes de un ordenamiento económico y social injusto que descansa en la desigualdad de oportunidades.

4.- La persona física de firmes convicciones, comprometida con los cambios sociales, se siente en el deber de realizar tareas, implicarse para perpetrar actos que tengan como objetivo alcanzar el poder político del Estado, para ponerlo a disposición del pueblo. Cumplir con la misión liberadora que se ha impuesto es tarea ineludible de quien hace causa sincera con los que demandan justicia.

5.- Está comprobado que quien busca la liberación del ser humano de toda opresión social, combate por el amor hacia los demás, tratando en todo momento de construir un orden nuevo; instituir una nueva sociedad; fundar un ambiente de convivencia fraterna; crear el medio donde florezca el amor y no el odio, la paz y no la guerra, la integración y no la discriminación.

6.- Las actuaciones de quien está dominado por ideales que entrañan abnegación, está presto para la búsqueda de todo lo que significa modificación, cambio del statu quo. El devoto, el seguidor consecuente con los intereses que defiende no está condicionado en sus decisiones.

7.- Aquel que se adhiere a las transformaciones sociales se obliga a sus realizaciones; a empujar con pasión para lograrlas; realizar con vehemencia cuantas misiones estén a su cargo, y hacerlas con altura; y comportarse magnánimo ante el adversario. El draconiano no cuadra en el que busca el bien.

8.- A los fines de lidiar en busca de  un ambiente que represente la alegría del pueblo, hay que estar consciente de que el combatiente es un actor con condiciones que lo hacen estar dispuesto a mantenerse beligerante, un guerrero contra todo lo que expresa atraso e injusticia. Es un contendiente, un adversario de lo que está vinculado con el pasado, de la misma forma aliado de quien hace causa común con sus propósitos de esplendor.

9.- Demostramos la afectividad de las ideas cuando las abrazamos y procuramos que se materialicen para bien de lo que en cada país son los más, con el fin de que alcancen y disfruten de felicidad y plena alegría. La indiferencia ante el sufrimiento ajeno es demostración de insensibilidad, frialdad y ausencia de compasión.

10.- Se supone que quien decide recorrer el camino que ha de conducir a un nuevo amanecer para el país, es porque se siente ser un hombre o mujer dispuesta, preparada para el sacrificio, porque querer romper las cadenas que oprimen a las grandes mayorías, tiene como contendores a los que se benefician del sistema opresor, y a sus aliados conscientes e inconscientes.

11.- El optimismo, el buen estado de ánimo acompaña a los que hacen de los cambios sociales la razón de su existencia, y  les lleva a ser abiertamente contrarios a todo lo que se relaciona con desesperanza y desilusión, porque la negatividad y el abatimiento solo generan pesimismo, que no es estímulo para el triunfo.

12.- Prueba ser coherente en su pensamiento y prédica, aquel que comprende la realidad negativa donde vive, y brega para transformarla, cambiarla a positiva, y lograr así que sea adecuada para una buena vida material y espiritual de la mayoría de los que componen la sociedad.

13.- Para ser actor modificador del orden establecido hay que comportarse llano, demostrando sinceridad; hacer trabajo político con alegría, como algo que se disfruta; con un accionar campechano, despojado de vanidad, sin ningún proceder ceremonioso. La jovialidad es de la esencia de quien actúa enamorado del desenvolvimiento de tareas en procura de que los cambios se produzcan para el progreso social de la colectividad.

14.- La claridad en el proceder caracteriza a los que hacen de la brega por cambiar la situación que golpea a las grandes mayorías nacionales. La transparencia en su accionar revela en el que busca la felicidad de los marginados de la sociedad, que no tiene nada que ocultar, que sus actos  responden a lógica, no a lo absurdo, a lo compatible y no a lo discordante.

15.- Los luchadores políticos honestos se consideran en el deber de sustituir todo sistema social que genera desigualdad, sufrimiento, tormento y desprecio a los seres humanos; convertir la infelicidad en felicidad, reemplazar las arcaicas estructuras por nuevas, modificar el modo de vida individualista por colectivo, innovar las instituciones que son retrancas, por nuevas que respondan a las aspiraciones democráticas.

16.- Al combate por las transformaciones sociales hay que ir con la mente dirigida a vencer para satisfacer las aspiraciones de toda índole de los que en conjunto constituyen lo que es el pueblo dominicano. Hay que moverse enfocado en que el triunfo de las ideas no quiere decir provecho personal ni beneficio particular. Los logros por la participación se traducen en conquistas de los marginados de la sociedad.


II.- Lo que no es un luchador social

17.- En política hay que tener la suficiente lucidez para no confundir la realidad con la ficción; la fábula con la verdad; la esencia con la apariencia; lo verdadero con la mentira; el mundo real, con la utopía; y al luchador social con el farsante.

 18.- En el accionar político dominicano hay una especie de cóctel, un tutifruti de santos y demonios; una ensalada de honrados y ladrones; una macedonia combinada con los más variados especímenes, en sí, una mezcolanza en la que no es fácil distinguir el ensamblaje ideológico, el empalme que los guía ni la forma como encajan unos y otros. 

19.- Al sinvergüenza, por el agrietamiento moral y ético de la sociedad dominicana, le basta con disfrazarse colocándose una careta de honesto por la mañana; un antifaz de honorable en la tarde, y una hermosa máscara de luchador social en horas de la noche.

20.- Transfigurarse para distorsionar su persona, ha hecho posible al vagabundo andar con el traje de moralista de hojalata, fingiendo  ser partidario de la lucha contra las lacras sociales, cuando en verdad no es más que un disidente, desertor, tránsfuga, renegado transitorio de la corrupción. 

21.- Una vez la desfachatez y el descaro convierten en sobresalientes a los aberrantes de inconductas, toma preponderancia todo aquel que como escoria social solo sirve para dañar con su presencia, empañar la vida limpia de los demás, y entorpecer con su presencia el desarrollo  de cualquier movimiento social que busca adecentar la sociedad.

22.- Es de interés para los que participan en las acciones de masas, saber distinguir; establecer diferencias; considerar por separado el que aporta a las buenas obras, así como también a los que hacen de retrancas; demoran la llegada de deseable; retrotraen lo que se espera como una bendición, una delicia, algo maravilloso.

23.- Así como existe entre nosotros la mujer o el hombre entregado, hecho para ser luchador o luchadora auténtica en el campo político y social, también tenemos a los que se han enganchado, colado, empalmado en los movimientos sociales, comportándose como lo que en verdad son; puros advenedizos, que por actuar sin sentir lo que practican, proceden en forma calenturienta, se nota que están afiebrados.

24.- El recién llegado a la brega política busca la forma de darse a conocer aunque sea con acciones audaces, aventureras y totalmente desajustadas de la realidad. El arribista, al igual que el entrometido, hace de    forastero hasta que suda la fiebre que le impulsa a proceder con la única finalidad de sobresalir en los escenarios donde hace acto de presencia.

25.- Aquel que carece de escrúpulos y decide escalar por la vía rápida, poco le importa ser visto como un advenedizo, siempre y cuando cumpla con su rol de ambicioso, porque lo que le interesa es estar ahí, donde en base a resaltar se presenta como algo significante.

26.- La degradación a que ha llegado la sociedad dominicana, lleva a los residuos sociales, al sobrante de los descalificados a alzarse, vivir haciendo bultos politiqueros, aunque nunca llega a igualarse con los que logran descollar por méritos propios.

27.- Sorprende la forma descarada como los arribistas pueden colarse en organizaciones cívicas que propugnan por el adecentamiento del ambiente dominicano que está contaminado por las distintas lacras, es decir,  los codiciosos, trepadores y arrimados, los pegados en los movimientos de masas.

28.- El que carece de ideales, el impedido de ser decente, se acerca a personas de convicciones y buena conducta; se junta con los sanos de pensamiento, para no revelarse nocivo. Está probado que el que no sirve, o sirve muy poco, busca resalir, brillar con la luz propia de aquel a quien hace compañía por conveniencia.

29.- El medio social nuestro es propicio, sumamente favorable para quienes luego de haber sido actores del cohecho, la mordida y otras tantas formas de corrupción, se presentan como insobornables, íntegros, libres de acciones pecaminosas. El venal, comprable y astuto coimero busca colarse, filtrarse, concurrir con las personas de bien; converger con aquellos que han llevado una vida digna.

30.- Mientras aquí se acepten como compañeros de viaje a los que buscan aparentar sentir pesar por sus fechorías, a los que simulan compunción por las diabluras ejecutadas, será común ver juntos a los honrados y a los profesionales del pillaje, del latrocinio y la depravación.

31.- Porque aquí se acepta como arrepentido al ladrón que se desgarganta, chilla “abajo la corrupción”, es que a diario vemos lo más campante a delincuentes consuetudinarios lo más orondo, garboso y flamante a quienes han hecho gárgara con los dineros del erario. Por tal razón hay que cuidarse de tener como adlátere en los movimientos que buscan asear la sociedad, a quienes deben buscar como agregados a sus iguales en las inconductas.

32.- El escalador, el trepador que quiere encumbrarse hasta donde han llegado dignamente las mujeres y hombres honestos, hay que hacerlo descender, logrando así que no se encarame, no se instale donde no merece estar. En el hogar de los limpios nunca pueden alojarse los sucios. 



Santiago de los Caballeros,

31 de mayo de 2017.