jueves, 20 de marzo de 2014

HACER DINERO, UNIFICARLO Y SUS CONSECUENCIAS


Por: Ramón Antonio Veras.

Introducción
Nuestro país está viviendo una etapa de su historia en la cual la palabra dinero se ha convertido en  motorizadora  de acciones de todo tipo. Con el fin de alcanzar la mercancía dinero se realizan las acciones más atrevidas y temerarias; se ejecutan los actos más despreciables y desenfrenados; y salvajadas de todo tipo.
Ser poseedor de grandes sumas de dinero no constituye una afrenta cuando  han sido adquiridas como resultado del trabajo,  el esfuerzo personal; bajo el empuje de acciones musculares o  intelectuales. Lo censurable es caer en la desesperación,  y en nombre de amasar fortuna económica dañar la reputación suya, la de su familia  y lesionar a terceros.
La vida me ha permitido tener amigos que han hecho dinero por su laboriosidad, capacidad y perseverancia; también he conocido a personas que han hecho, por la vía rápida, grandes capitales. A los primeros, les admiro y distingo; a los otros, a los desesperados,  les veo con pena, dan lástima, porque  con sus acciones en procura  del enriquecimiento fácil se han convertido en una afrenta ante la sociedad.
 En este escrito expongo algunas ideas para poner de manifiesto  que el  dinero no lo es todo en la vida; que llegar a tenerlo no es cosa del otro mundo, que puede ser adquirido en forma enaltecedora y también  deshonrosa.

I.- Un dinero hecho con el sistema, y otro por la vía rápida.
1.- En el curso de una conferencia que desarrollé ante un grupo de abogadas y abogados de Santiago, les dije que en nuestro medio no es difícil hacer dinero recurriendo a medios ilícitos, que lo indebido  ligado con lo ilegitimo llega a ser fuente de enriquecimiento.
2.- Para ilustrar mi razonamiento les expuse a los asistentes al acto que hasta con un susto se llega a tener dinero, pues basta con traficar con algunos kilos de cocaína desde nuestro país hasta Estados Unidos; el traficante pasará momentos de sobresaltos, pero al final la zozobra sufrida le dará resultados con la obtención de la mercancía dinero. El narco, aunque en forma espuria, se hace rico de la noche a la mañana.
 3.- Aquel que da riendas sueltas a su audacia para adquirir dinero puede sobresalir como atrevido y nada más; la temeridad tiene significación  en quienes no reúnen otras condiciones que la de ser  favorecidos de la osadía  y el descaro, acompañados  de la frialdad para realizar acciones con sutileza.
4.- Si es cierto que resulta fácil hacerse de dinero por medio de las malas artes, no es menos cierto que el patrimonio económico formado en semejante forma no genera respeto, distinción ni honra, aunque al descarado no le interesa el respeto a su persona, sino las cosas materiales y nada más.
5.- Paralelo al que hace dinero por medios espurios, está el que lo alcanza con las reglas normales del sistema, dentro de los marcos del ordenamiento social vigente el cual  tiene normas que le son propias; su estructura está diseñada en forma tal que hay concordancia entre los procedimientos y métodos que se han de aplicar en cada ocasión en forma constante.
6.- Las pautas a seguir en todo sistema, el protocolo a ejecutar está  normalizado. Así, por ejemplo, es de la esencia del sistema capitalista obtener ganancia; el lucro es uno de sus pilares; el capitalismo no tiene vida sin beneficios; las utilidades lo alimentan; la especulación lo dinamiza.
7.- No es nada ilegitimo en un sistema como el que predomina en nuestro país hacer dinero dentro de las reglas del ordenamiento social actual. Lo normal es regla, no excepción. Lo extraño es el enriquecimiento que se logra sin sujetarse a las normas del sistema. 
8.- Comprar fuerza de trabajo con poca inversión, y obtener amplias ganancias en el menor tiempo posible es un fin a perseguir por aquel que invierte en procura de hacer dinero en forma lícita. La plusvalía es su trofeo.
9.- No hay similitud entre quien alcanza el éxito económico en base a su talento, poniendo en juego su inteligencia, y  aquel que  hace dinero en base a operaciones ilícitas, utilizando su audacia.
10.- El empresario que desde las primeras horas de la mañana está en su empresa  organizando, dirigiendo y orientando a sus trabajadores,  y explorando mercados para colocar sus productos,  es un ser humano  meritorio, aporta a la sociedad; con su accionar contribuye al desarrollo del país y a su progreso personal.
11.- El ser humano emprendedor, laborioso y dinámico, difiere de aquel que sólo materializa su ambición de dinero en base a la viveza, la trampa y el engaño, para  lo que no se requiere esfuerzo,  sacrificio ni talento alguno.
12.- Pero el deterioro de la sociedad dominicana no permite distinguir entre el que hace dinero en forma legítima y el que lo ha obtenido por vías corruptas; aquí   se acepta por igual al hombre o mujer meritoria que al reprensible.
13.- Lo ideal fuera que el ser humano notable por  los logros alcanzados por su esfuerzo  y el empuje demostrado con su capacidad, ocupara  en el medio social  nuestro un espacio distinto al de  aquel  que sólo tiene como  mérito  la mercancía dinero lograda sin ninguna probidad.

II.- Enriquecimientos y conductas  diferentes. La unificación de capitales  de distintos  orígenes.

14.- El comportamiento de quien hace dinero  mediante las reglas del sistema difiere de aquel que lo obtiene por medios  gansteriles. La conducta del primero responde a preceptos clasistas, heredados de clases sociales que tienen historia de laboriosidad, disciplina, organización, y correctos guías con certeros mandatos y normas a cumplir; la actitud del segundo tiene por origen el bajo mundo, el crimen organizado; su divisa es el pistoletazo.
15.- Todo sistema social trae consigo su moral, la cual acompaña a las clases sociales que genera; en la medida que se deteriora el modelo económico surgido en un determinado ordenamiento social, se va agrietando la conducta, la actitud, la forma de proceder los integrantes de la sociedad.
16.- El decaimiento, la flojedad del orden  social establecido en nuestro país ha traído  fragilidad en el comportamiento, el raquitismo en la actitud de los entes sociales más activos y relevantes. Pura y simplemente, el vigor original, la resistencia inicial de la moral social, ha cedido  su espacio a la pusilanimería,  cobardía,  flaqueza  y el defectillo.
17.- El cuadro de enclenque de la moral conduce a colocar en el mismo plano a los hombres y mujeres de bien, con los del bajo mundo; permite establecer semejanza, en  condiciones de  iguales, entre quienes no debiera  haber comparación posible de conducta en el medio social en el cual desarrollan sus actividades.
18.- La mescolanza que resulta de las relaciones de actividades  comunes entre aquellos  que hicieron dinero fruto del capital viejo,  con las reglas del sistema; y los nuevos ricos, que han formado su patrimonio al vapor, por vía rápida, ha hecho entre ellos, en  la práctica, una unidad  maldita.
19.- El debilitamiento del actual orden social y moral del país se expresa, además, en el hecho de que ahora se han unificado el añejo capital, y el de  los políticos que se han enriquecido con los dineros del erario, y también  el dinero de  aquellos que se mueven en el bajo mundo con operaciones de toda clase de  pillería.

III. La unificación  en organizaciones de dinero sucio y limpio.
20.- lo ideal hubiera sido que aquellos que formaron y desarrollaron sus patrimonios económicos con laboriosidad y decencia, tomaran distancia de los bellacos que no han escatimado medios sucios y agresivos para llegar a tener el marbete de ricos, aunque su comportamiento y conducta deja  mucho que desear.
21.- Aquellos que han hecho dinero rápido, dudoso y tormentoso, en ningún momento debieron haber sido aceptados  formando parte de las organizaciones que, en un pasado reciente, solamente agruparon a hombres y mujeres que pueden exhibir su progreso sin temor a ser identificados como tremebundos.
22.- Resulta espantoso ver a verdaderos truhanes al frente de organizaciones que siempre fueron dirigidas por personas de bien, y ahora han caído en manos de individuos que su sola presencia deshonra, porque constituyen infamias por los malos hábitos que han cultivado.
23.-  Aquel que se hace rico en dinero moviéndose en el bajo mundo, tiene  una forma de actuar propia del medio en el cual ha formado su fortuna; la mala práctica es su familiaridad; está curtido para delinquir y delinque como algo muy usual; es un adicto  a  operaciones que por su reiteración  entrañan  una forma  normal de vida viciosa en el timo, el fraude y el disimulo.
24.- Aquel que para hacer dinero ha hecho esfuerzos en los estudios o el mundo empresarial se inserta en la sociedad para convivir ajustando los actos de su vida privada,  familiar y pública a la decencia, la honradez y el buen ejemplo.
25.- Por el contrario, quien hace dinero por la vía sucia, procede  conforme a su formación; su forma de ser en travesuras comerciales guarda relación directa con su cultura de transgredir las reglas normales del buen vivir, quebrantar el accionar decente.
26.- Quien  anda saltando de picardía en picardía para hacer dinero a la carrera,  precisa estar mentalmente armado  de la trastada para con la jugarreta del dolo malo alcanzar dinero suavemente; su grandeza está en la truhanería. Le hace una mala pasada a cualquiera, pues sus bribonadas no tienen límites, como tampoco sus canalladas.

IV.- Diferentes formas de solucionar conflictos tomando en consideración  el origen del dinero.
27.- El hombre o la mujer que hace dinero  siguiendo las reglas normales del proceso sistémico capitalista tiene su mundo, su círculo de relaciones, y las vías para dirimir sus conflictos. Su línea de conducta le dice que ante cualquier diferendo ha de recurrir ante un juez o árbitro pues para   tales fines el sistema ha generado sus instituciones,  entre ellas el orden judicial jurisdiccional, los tribunales para que, de acuerdo con las leyes que también responden al sistema, se lleguen a dirimir las divergencias.
28.- Aquellos que recurren a la vía rápida para hacer dinero, por el mismo medio donde se mueven y se han movido para  alcanzar sus recursos económicos, solucionan sus litigios, sus tumbes, no procurando abogados ni a juristas; ellos no creen ni se han formado en la legalidad. Por tanto, no tienen nada que buscar ante la justicia  ni en  los tribunales ordinarios.
29.- El mundo de los hombres y mujeres del dinero acelerado es el crimen organizado; y ahí prima, como es natural, la criminalidad; el dinero obtenido a sangre y fuego, se defiende en igual forma y con idénticos métodos. No  se  requiere de tribunales ni abogados, sino de sicarios.

V.- Dificultades al  ligar el dinero limpio y el sucio.
30.- Aquel que tiene un patrimonio económico sólido y bien obtenido, debe ser cuidadoso para asociarse con extraños. Algunos empresarios, procediendo con cierta desesperación,  en interés de ampliar sus empresas,  y bajo el argumento de obtener recursos económicos frescos, caen en el error de asociarse con personas que tienen ese dinero que necesita para renovar su empresa, pero ese dinero puede ser fruto de un tumbe; de una   cualquiera de las operaciones que hacen aquellos ligados con el crimen organizado, o robado al presupuesto de la Nación.
31.- El dinero adquirido por medios sucios contagia  al que se obtiene en buena lid; y en lo adelante resultaría muy difícil separar uno del  otro,  con el agravante de que los recursos económicos transmitidos por contaminación infectan a todos los que   se aprovechan de los mismos.
32.- El dinero para entrar a cualquier lugar no necesita visa ni protocolo alguno; su presencia siempre es bienvenida, recibido con agrado y sonrisas; genera complacencia y atracción hasta en  las personas de temperamentos antipáticos y con altas dosis de ser repelentes.
33.- Por muy placentero que se presenta el dinero hay que tomarlo con cierta cautela, partiendo de las manos donde está alojado, porque no siempre es sano, puede estar enfermo.
34.- El deterioro de la sociedad dominicana, y el afán de lucro de algunas personas, ha hecho posible que se mezcle el dinero enfermo y el sano, el malo y el bueno, para finalmente lograr un aseo del sucio por medio del inmaculado.
35.-  Lo anterior es lo que se conoce como lavado, es un enjambre fino, un desempolve a la medida, la purificación financiera, una depuración del dinero sucio a lo  siglo veintiuno, por medio de la asociación de un capital de origen licito con uno  ilícito.
36.- Lo que comienza como una necesidad por nuevas inversiones, sigue y se traduce en un enlace comercial; luego continua como casamiento por conveniencia hasta llegar a una complicidad  en operaciones de todo tipo, de la cual  sale  beneficiado el que aporta  el dinero sucio, y afectado el que aportó el patrimonio inicial limpio.
37.- El sinuoso camino transitado por el dinero sucio llega a un final recto, cuando su portador, por la unidad con un socio decente y de dinero limpio,  logra alojarlo parejo  en una sociedad, dando como  resultado que el pasado del dinero sucio queda en el olvido por la anestesia de eliminación de recuerdos desagradables que le aplica su nuevo aliado.
38.- El matrimonio entre el dinero sucio y el limpio se ha desarrollado con suma notoriedad en los últimos años en nuestro país, por la incidencia del fenómeno de la corrupción, y la habilidad de los politiqueros corruptos al asociar el fruto de sus actos ilícitos, con el dinero licito de los ricos que hicieron su dinero con las reglas normales del sistema.
39.- La ligazón entre fortunas sanas y enfermas trae  como  consecuencia que la unidad no sólo se da en lo económico, sino que se extiende a una ligadura, aunque sea en apariencia, de conducta; la atadura es vista como la inyección de  uno al otro hasta en el modo de vida, y actitudes.
40.- El que aporta en una  sociedad comercial su dinero no cuestionado, al amarrarlo con  aquel que tiene recursos económicos logrados en operaciones del bajo mundo, al final resulta perjudicado en su imagen pública, privada y empresarial.




Santiago de los Caballeros,

                                                                                  20 de marzo de 2014.

martes, 18 de marzo de 2014

Mis vivencias sobre la Revolución Cubana


                                                                                                 
El Caribe, 15/03/2014




Opinión

Primera entrega


INTRODUCCIÓN

Las personas que para el año 1959 contaban con un año de edad, ya tienen cincuenta y cinco. Es posible que muchas de ellas no conozcan las distintas etapas por las cuales ha pasado el proceso revolucionario cubano, y el papel desempeñado por el Comandante Fidel Castro.

El sectarismo, los prejuicios ideológicos, la manipulación informativa y la ignorancia, se han unido para que la Revolución Cubana no sea debidamente conocida, y su principal líder, el Comandante Fidel Castro, no sea valorado en su historial de lucha antes, durante y después del triunfo de la revolución.

He tenido conocimiento directo de muchos de los datos que contiene este trabajo, y he querido compartirlos con los que puedan tenerlo a su alcance.
I.- Mi adolescencia. Mi madre. Un pequeño radio y Fidel Castro. 
 

Por allá, en los últimos meses del año 1951, contando yo unos trece años de edad, mi madre compró, por la suma de quince pesos, un pequeño radio en la casa Philco, que para esa época estaba instalada en la calle España de la ciudad de Santiago de los Caballeros.
 

Con la llegada de ese radio a mi casa, el cual todavía conservo como una prenda de recuerdo de mi mamá, entró en mi casucha la civilización. Mi mamá era una mujer que le gustaba estar bien informada, pero las informaciones las recibía de otras personas que recibían revistas extranjeras para estar al día de las noticias internacionales.

El mejor y único aliado informativo directo que tenía mamá, y yo por medio de ella, era su radito, como lo llamaba. En ese pequeño aparatito mi mamá escuchó el golpe de estado de Fulgencio Batista, en Cuba, el asalto al Cuartel Moncada por Fidel Castro y sus compañeros del 26 de julio, etc.
 

He hecho referencia al pequeño radio de mi mamá porque fue el órgano por medio del cual escuché por primera vez personalmente a Fidel Castro.
 

Una noche, mamá, muy emocionada, me llamó y me dijo: “Negro, ven para que oigas a Fidel Castro, el que está en Cuba peleando contra la dictadura de Batista”.
 

De ahí en adelante yo mismo encendía el pequeño radio, y me ponía a oír los mensajes de Fidel dirigidos al pueblo de Cuba. Mi mamá y yo nos hicimos fidelistas por radio, y cuando triunfó la Revolución Cubana, en enero de 1959,  ambos nos abrazamos. Recuerdo que mamá, muy eufórica, me dijo: “Con el triunfo de Fidel, vamos a tumbar a Trujillo”. 
 

Aquellas noches y madrugadas, cuando mamá y yo nos disponíamos a escuchar a Fidel, jamás pensé que iba a llegar a admirar y conocer personalmente al que llegaría a ser, con el tiempo, el más grande de los líderes políticos del siglo veinte y lo que va del veintiuno.

Desde un principio me sentí cautivado por Fidel, por su valentía, y por el contenido redentor de su prédica. El hecho de él organizar, dirigir y participar en el asalto al Cuartel Moncada; defendiéndose con gallardía ante el tribunal que le juzgó; el documento que elaboró para su propia causa exponiendo lo que había escrito en “La Historia Me Absolverá”, y luego de salir en libertad trasladarse a México y regresar a su país en el Granma con 82 hombres; suben a la Sierra Maestra y desde ella descender triunfante, contra el ejército regular de Fulgencio Batista, el 1 de enero de 1959. La suma de todos estos hechos llegaron a ejercer en mí una gran influencia política e ideológica.

Debo de confesar que por mi mente nunca pasó que aquel hombre que comencé a oír hablando cuando yo contaba con unos pocos años de edad, llegaría a ser uno de los hombres que transformaría por completo a América Latina y el Caribe, hasta el punto de que en un libro que leí recientemente con el título: “Cien Horas Con Fidel”, el autor dice, refiriéndose a Fidel: “Pocos hombres han conocido la gloria de entrar vivos en la historia y en la leyenda.
 
Fidel es uno de ellos. Es el último “monstruo sagrado” de la política internacional. Pertenece a esa generación de insurgentes míticos —Nelson Mandela, Ho Chi Minh, Patricio Lumumba, Amílcar Cabral, el Che Guevara, Carlos Marighela, Camilo Torres, Turcios Lima, Mehdi Ben Barca— quienes, persiguiendo un ideal de justicia, se lanzaron en los años posteriores a la Segunda Guerra Mundial a la acción política con la ambición y la esperanza de cambiar un mundo de desigualdades y de discriminaciones, marcado por el comienzo de la guerra fría entre la Unión Soviética y los Estados Unidos. Como miles de intelectuales y de progresistas a través del mundo, y entre ellos hasta los más inteligentes, esa generación pensaba con sinceridad que el comunismo anunciaba un porvenir radiante, y que la injusticia, el racismo y la pobreza podían ser extirpados de la faz de la tierra en menos de un decenio.”
 

“En aquella época, en Vietnam, en Argelia, en Guinea-Bissau, en más de medio planeta se sublevaban los pueblos oprimidos. La humanidad aún estaba entonces, en gran parte, sometida a la infamia de la colonización. Casi toda África y buena porción de Asia seguían dominadas, avasalladas por los viejos imperios occidentales. Mientras, las naciones de América Latina, en teoría independientes desde hacía siglo y medio, permanecían despotizadas por minorías privilegiadas, y a menudo sojuzgadas por crueles dictadores (Batista en Cuba, Trujillo en República Dominicana, Duvalier en Haití, Somoza en Nicaragua, Stroessner en Paraguay...), amparados por Washington.”

“¿No es acaso Fidel Castro el jefe de Estado que más tiempo ha permanecido ejerciendo su cargo? Ha tenido que lidiar nada menos que con diez presidentes estadounidenses (Eisenhower, Kennedy, Johnson, Nixon, Ford, Carter, Reagan, Bush padre, Clinton y Bush hijo).”

“Tuvo relaciones con algunos de los principales líderes que marcaron la marcha del mundo después de 1945 (Nehru, Nasser, Tito, Jrushchov, Olof Palme, Ben Bella, Boumedienne, Arafat, Indira Gandhi, Salvador Allende, Brezhnev, Gorbachov, Mitterrand, Jiang Zemin, Juan Pablo II, el rey Juan Carlos, etc.,). Y ha conocido a algunos de los principales intelectuales y artistas de nuestro tiempo (Jean-Paul Sastre, Simone de Beauvoir, Hemingway, Graham Greene, Arthur Miller, Pablo Neruda, Jorge Amado, Oswaldo Guayasamín, Henri Cartier-Bresson, Julio Cortázar, José Saramago, Gabriel García Márquez, Eduardo Galeano, Oliver Stone, Noam Chomsky y muchísimos otros).”

“Bajo su dirección, su pequeño país (poco más de 100,000 kilómetros cuadrados y de 11 millones de habitantes) ha podido conducir una política de gran potencia a escala mundial, llegando incluso a echarle un pulso a Estados Unidos, cuyos dirigentes no han conseguido derribarlo, ni eliminarlo, ni tan siquiera modificar el rumbo de la Revolución Cubana.” (1)
 

La persona que lea este trabajo se debe suponer la influencia que ha ejercido Fidel Castro, por su comportamiento, inteligencia, condición de estadista y de revolucionario, ante millones y millones de latinoamericanos, caribeños, en fin, de y hombres y mujeres de todo el planeta tierra. Y yo no he sido la excepción. l

FUENTES:
(1) “CUBA”. El Nacional. 12 de marzo de 1974.
 

Continuará la semana próxima

viernes, 14 de marzo de 2014

SANTIAGO, EL BASURERO DE HOY




Por: Ramón Antonio Veras.
1.- Acumular desperdicios en una ciudad o  casa habitada, es propio de sucios,  de personas indiferentes ante la sucieza. Precisamente, en la casa grande de los santiagueras y santiagueros, los desperdicios se han convertido en compañeros en la vida diaria de los que habitan su casa grande,  que   es la ciudad de Santiago de los Caballeros.
2.- Santiago es, pura y simplemente, un basurero con luz y vitrinas, calles y avenidas; es un basural desorganizado que apesta, contamina y enferma; es un sumidero con habitantes muy refinados a los cuales no les  importa la hediondez; es una porquería  con una Alcaldía que menosprecia a los santiagueros y santiagueras.
3.- Santiago es un estercolero que vive de un pasado de limpieza, en un presente de basura y desorden; es un bañadal con apariencia de ciudad civilizada;  es un escorial con habitantes bien vestidos y harapientos; es una ciudad dominada por lo que no sirve o sirve poco, la cual se ha convertido en el símbolo de un Santiago abandonado, desordenado, asqueroso, desamparado, desatendido, y desprotegido por una Alcaldía indiferente a todo lo que significa limpieza para Santiago.
4.- Todo aquel habitante de la ciudad de Santiago de los Caballeros, que quiera comprobar si es cierto o no que está conviviendo con  la basura, la sucieza y la contaminación, que haga un recorrido por el centro de la ciudad;  se motive a dar un paseo  por el Hospedaje Yaque; haga un tour por el parque Duarte, el Mercado de los jueves frente al Cementerio de la 30 de marzo,  al mercadito que está frente al Hospital Cabral y Báez y el Hospicio San Vicente de Paul;  y, finalmente, pañuelo en nariz concluya su tránsito  en la humareda del vertedero de Rafey, para después necesariamente visitar a su neumólogo.
5.- La vida, al igual que la política, se nutre de realidades.  Quisiéramos decir que Santiago es una ciudad limpia, bonita, aseada, en la cual se respira un ambiente agradable; y que su alcaldía  se ocupa de mantenerla bella.
6.- Pero no podemos vivir de ilusiones, la realidad nos está dando en la cara. Santiago es, lamentablemente, y hay que decirlo con todo pesar, una ciudad inviable, un basurero, dominado por todas las porquerías, y con una Alcaldía que es una afrenta; ella está en cualquier cosa menos ocupándose  de Santiago.


Santiago de los Caballeros,

                                                                               14 de marzo de 2014.

jueves, 13 de marzo de 2014

Para enfermos y ancianos de Santiago: otro mercado tolerado por la Alcaldía









Por: Ramón Antonio Veras.
1.- En toda sociedad civilizada las autoridades se interesan por darles atenciones especiales a los enfermos y a los ancianos, tomando en consideración la lesión en sus  organismos  para  los aquejados de salud, y la edad en  los   envejecientes.
2.- Pero en la ciudad de Santiago de los Caballeros, los enfermos y los viejitos son ignorados,  maltratados como si fueran cosas insignificantes, algo así  como despojos humanos, desechos sociales.
3.-  Hay que estar despojado de sensibilidad, no tener el menor sentido de humanismo, para permitir que se burle la tranquilidad espiritual, la paz  para el descanso y para la concentración del sueño; la calma para soportar las consecuencias de una enfermedad, o el alivio para mitigar un dolor.
4.- Todo aquel que quiera saber hasta dónde llega el desorden que impera en Santiago, y la indolencia de las autoridades municipales de la ciudad, le basta con detenerse en la Sabana Larga, frente a frente al Hospital José María Cabral y Báez y al Hospicio San Vicente de Paúl.
5.- Lo que se ve en el lugar antes descrito sólo puede compararse  con lo que ocurre en el Parque Duarte, en el Mercado Hospedaje Yaque y con el mercado  que funciona los jueves frente al Cementerio de la 30 de Marzo.  
6.- En el otro fango instalado en la Sabana Larga, frente a donde están los viejitos del Hospicio y los enfermos del  Hospital Cabral y Báez, se ve con claridad el deshonor que impera en Santiago, con la  indiferencia y desprecio de la Alcaldía de la ciudad, hoy convertida en un medio social ultrajado por aquellos que fueron elegidos para honrarla, prestigiarla como Santiago merece.
7.- Ninguna persona con sano juicio puede formarse una idea del desastre que hoy se advierte en Santiago, causado por una gestión municipal que se ha manejado en la línea de  la calamidad, en procura de orientar los servicios por la vía de la hecatombe, hacia el fracaso.
8.-  La debacle que observamos en los parques y avenidas; el caos en el transporte público; la colocación  de letreros en forma anárquica; el desprecio en la recogida de la basura, en fin, lo que exhibe la ciudad de Santiago en estos momentos es la  expresión de una ciudad que, al parecer, fue   condenada por una maldición  apocalíptica.
9.- En Santiago no hay que hacer mucho esfuerzo para comprobar que estamos en presencia de una Alcaldía que se ha dispuesto convertir la ciudad en un medio social sólo habitable por personas rastreras, sucias, por  aquellos que se identifican con la asquerosidad,  la porquería, la inmundicia y la mugre.
10.- Santiago de los Caballeros no puede seguir como hasta ahora, moviéndose bajo un estado  de  desbarajuste; el caos hay que pararlo, la anarquía  tiene que ser  erradicada. Debemos rescatar la ciudad para que regrese el orden y la limpieza.
11.- Los viejitos que están viviendo en el Hospicio San Vicente de Paúl, necesitan paz; tranquilidad, reposo, sosiego, quietud; ellos merecen pasar los últimos años de su existencia en calma, con placidez. La intranquilidad, la bulla,  la algarabía, les amarga la vida a los ancianos.
12.- Ese mercado que funciona en Santiago  entre el Hospital José María Cabral y Báez y el Hospicio San Vicente de Paúl, lo que  le genera a los viejitos y a los enfermos es alboroto y  tumulto.
13.- El desguañangue que presenta la ciudad de Santiago en estos momentos está presente por todas partes; el descuido está vivo en cada calle o avenida; lo fatídico lo vemos en los barrios y urbanizaciones, el desamparo le ha llegado a Santiago como si fuera una ciudad signada por el infortunio.  Sus habitantes llevan una vida atribulada.  No hay tranquilidad para los vivos, los ancianos, los enfermos  ni para los muertos.



Santiago de los Caballeros,

12 de marzo de 2014.

miércoles, 12 de marzo de 2014

ANTE EL FALLECIMIENTO DE LA COMANDANTE MELBA HERNÁNDEZ, SÍMBOLO DE LA LUCHA DE LAS MUJERES DEL MUNDO QUE HAN LUCHADO Y LUCHAN POR UN FUTURO MEJOR PARA TODA LA HUMANIDAD.-





Por: Ramón Antonio Veras

El pasado domingo 9 de marzo en curso, falleció la heroína del Moncada, la doctora Melba Hernández

La Comandante Melba Hernández, fue una  mujer excepcional; con ella tuve la dicha de compartir en su país, Cuba, y en el extranjero. Ambos formamos parte del Tribunal Antiimperialista de Nuestra América. Melba Hernández, simbolizó lo que es la firmeza y la disposición de las mujeres cubanas, latinoamericanas y caribeñas en la lucha por una vida mejor para toda la humanidad.

Al igual que yo, es bueno que otros dominicanos y dominicanas conozcan el historial de lucha de Melba Hernández. Por tal razón detallo a continuación una parte de lo que fue la vida de la heroína del Moncada.

Nacida el 28 de julio de 1921 en el municipio de Cruces, en la provincia de Las Villas, al centro del la isla de Cuba, hija de un hogar pequeño en su composición, pero grande en su modelo revolucionario; llegó a La Habana con sus padres, como hija única, y estudió la carrera de Derecho. Eran años convulsos, de confrontaciones políticas, de desmanes y corrupciones administrativas en el entorno político, pero su brújula revolucionaria la llevó por el sendero adecuado, tomó el partido de las bases populares, pensó en ser una abogada para defender al pueblo, y ser recompensada en su vida profesional por la resolución de pleitos en los que prevalecieran la justicia y no la ganancia económica a ultranza. Su proyección sin embargo apenas pudo verla realizada en el campo de la ciencia del Derecho.

Muy pronto Melba se unió a compañeros que buscaban como ella otros horizontes, tras un cambio profundo de las condiciones existentes en Cuba en las décadas de los años cuarenta y cincuenta del mil novecientos. Fue justamente la década del cincuenta, en sus albores, cuando ocurre el acontecimiento más trascendental en su vida pública, a partir del momento en que conoce a un joven colega —abogado como ella— que tomará el liderazgo revolucionario: el doctor Fidel Castro Ruz.

Para entonces el camino establecido en Cuba para los cambios institucionales o de gobernación del país mediante el sistema electoral tradicional de la república neocolonial, acababa de ser interrumpido abruptamente por un golpe militar perpetrado por un hombre que respondía a los intereses de los Estados Unidos de Norteamérica, el General Fulgencio Batista, que no podía traer otra cosa que no fuera el incremento de la corrupción y nuevos crímenes políticos. El hecho ocurrió el 10 de marzo de 1952, en vísperas de la celebración de unas elecciones generales donde el partido político que sin duda alguna vencería hubiera sido el opositor Partido del Pueblo Cubano (Ortodoxo), fundado por un hombre todo honradez y valentía llamado Eduardo Chibás, aunque para esa fecha ya él no vivía. El joven abogado Fidel Castro, vio primero que todos los demás que el frustrante golpe de estado militar, perpetrado en el Cuartel General o Fortaleza de Columbia, cambiaría los destinos de Cuba y que su artero protagonista no abandonaría el poder de otro modo que no fuera mediante la acción armada. No fueron muchos los que creyeron fervientemente que fuera de esa manera. Pero entre las que creyeron en esa nueva voz hecha acción, estaba la doctora Melba Hernández.

Dos mujeres de vanguardia se constituirán pronto en símbolo de la gesta que protagonizó Fidel, al año siguiente del golpe militar, con los asaltos de los cuarteles Moncada en Santiago de Cuba y Carlos Manuel de Céspedes en Bayamo, al oriente de Cuba seguido de un grupo consciente de jóvenes revolucionarios, bien adiestrados en el uso de las precarias armas que llevaban al asalto: Las dos mujeres fueron Melba Hernández y Haydée Santamaría — ya fallecidas-, fundadoras ambas del incipiente movimiento organizado por el doctor Fidel Castro, con el apoyo de su “lugarteniente” Abel Santamaría, hilo conductor para que Melba y Fidel se conocieran. Hubo una mujer, una sencilla trabajadora cubana, de profundos ideales patrióticos llamada Elda Pérez, amiga de Melba y de Haydée, quien sin saberlo hizo este haz indisoluble en la historia de Cuba.

Melba y Haydée participaron de la organización del 26 de Julio de 1953. Año en que se celebraba el Centenario del nacimiento de José Martí, Apóstol de la independencia de Cuba. Les cupo a ellas el honor de integrar la retaguardia bajo las órdenes de Abel Santamaría, a quien Fidel había nombrado para sucederlo en caso de que él pereciera en la toma por sorpresa del Moncada. El hecho ocurrió de diferente manera y fueron Abel y sus compañeros los primeros prisioneros asesinados luego del combate que se convertiría en una victoria estratégica aunque no se consiguiera el triunfo esperado aquel día 26 de Julio. Melba y Haydée fueron víctimas de torturas psicológicas horribles para que delataran a los demás integrantes y al jefe del movimiento. Los criminales no consiguieron arrancarles una palabra. Fidel ya había podido retirarse y trataba de hacerse fuerte en las montañas próximas a Santiago de Cuba para proseguir la lucha.

Como actoras heroicas del 26 de Julio y testigos excepcionales de los crímenes perpetrados por el ejército en el Moncada, Melba y Haydée se crecieron como mujeres y ejemplos de fortaleza espiritual y valor frente a quienes tenían sus vidas en las manos y luego ante quienes la juzgaban.

Es una larga historia. Digamos que Melba Hernández, como abogada revolucionaria y en su condición de acusada en el juicio del Moncada-  tan solo dos meses después del asalto-, desafió al tribunal que los juzgaba y entregó a este, públicamente, una carta en medio del terror circundante y una sala atestada de militares con sus rifles cargados y bayonetas caladas. En términos jurídicos y éticos era la defensa de un engaño del tribunal y los militares. En la carta Fidel denunciaba que lo habían sacado del proceso judicial; que pretendían asesinarlo y que él no estaba enfermo, como habían dicho los militares para evitar su presencia en la sala porque de acusado se había convertido en acusador. Esta audacia revolucionaria y jurídica de Melba les valió a las acusadas un castigo mayor en la prisión preventiva.

Cárcel y vida clandestina activa son otros de sus muchos méritos. Melba, y Haydée recibieron la encomienda del doctor Fidel Castro, desde la cárcel de Isla de Pinos, de agrupar a los integrantes del Movimiento Revolucionario que asaltó e Moncada; se trataba de aquellos jóvenes que --aunque entrenados-- no habían podido ir al Moncada porque la agrupación revolucionaria no contaba con armas suficientes. Simultáneamente el propio Fidel les dio también la misión impostergable de encontrar la forma de imprimir clandestinamente, en el más breve tiempo, su discurso de autodefensa del Moncada, conocido hoy, históricamente, como La Historia me Absolverá el cual constituye una denuncia de crímenes e ilegitimidad del régimen que imperaba, y a la vez un avanzado programa revolucionario. Este programa fue cumplido por la Revolución en sus albores y se hizo aún más profundo. Las tareas encomendadas a Melba y Haydée fueron cumplidas a cabalidad.

Las heroínas del Moncada cumplieron otras misiones difíciles: Melba, se trasladó a México y colaboró directamente, junto a quien fuera su esposo entonces, el también revolucionario Jesús Montané — combatiente del Moncada— en la organización de la expedición del yate Granma que saldría posteriormente del puerto de Tuxpam en México, con Fidel al frente: se abría a partir de ese momento la lucha en la Sierra Maestra.

También ella conoció de nuevo los avatares y riesgos enormes de la lucha clandestina en La Habana y luego de la lucha en la Sierra cuando pasó a formar parte de una Columna del Ejército Rebelde al frente de la cual se encontraba el hoy Comandante de la Revolución Juan Almeida Bosque —combatiente del Moncada y expedicionario del Granma-. En el Tercer Frente Oriental, donde operaba la columna de Almeida, ella fungió como responsable del departamento Jurídico de aquel Frente, próximo a Santiago de Cuba.

Tras el triunfo de la Revolución, Melba Hernández ejerció diferentes tareas importantes, pero en aras de la síntesis de tan rica vida revolucionaria diremos que una de ellas se desarrollo en el ámbito económico de combate, en el proceso de nacionalización de las compañías petroleras extranjeras en Cuba. Sería fundadora del organismo revolucionario ICP (Instituto Cubano del Petróleo) y durante un tiempo significativo, trabajó junto al Comandante Ernesto Guevara, el Che cuando este era Ministro de Industrias.

Su estrecho vínculo con el Ché incorporó a su formación política revolucionaria una visión más abarcadora del mundo en que vivía, desde la esfera de la solidaridad internacional. Simultáneamente  Fidel Castro abría en ella el camino para desarrollar una vertiente por la cual se le conoce mucho internacionalmente, esta fue la senda transitada de la solidaridad durante un largo y cruento período de más de una década.

Fidel le había designado en 1963 para que presidiera el Comité Cubano de Solidaridad con Vietnam del Sur, que sería el primer Comité de Solidaridad con la lucha del pueblo vietnamita en el mundo entero. El hecho ocurrió poco después de un viaje que auspiciado por el Movimiento por la Paz le permitió a Melba concurrir a un Congreso de Mujeres en Moscú, donde las vietnamitas la invitaron a visitar a su país. De Moscú viajó a Hanoi y allí se entrevistó con el venerable Presidente Ho Chi Minh.

El Comité de Solidaridad con Vietnam del Sur, que luego sería por todo Viet, por Laos y Cambodia, se convirtió con el trabajo aglutinador, inteligente, impulsivo, ininterrumpido, apasionado y febril de Melba, en un movimiento solidario interno sin precedentes en Cuba hasta entonces. Foros, simposios, conferencias a lo largo y ancho de la isla sumaron a obreros, profesionales, poetas, artistas, periodistas, escritores, estudiantes, campesinos, científicos, mujeres, niños, militares, en fin a toda la gama de la sociedad en pro del conocimiento de la lucha de Vietnam y en solidaridad con ella. El Comité cruzó las fronteras nacionales y se convirtió con Melba al frente, en un factor decisivo en la organización del Tribunal Internacional contra los Crímenes de Guerra en Vietnam, dirigido por Beltrand Russell, más conocido como el Tribunal Russell que sesionaba cada año en Europa, fundamentalmente en Suecia y Dinamarca.

Esta dinámica organización que, según la propia Melba llegó a declarar, fue una de las tareas más hermosas de su vida, se mezcló con otros movimientos solidarios disímiles, salvo en su justeza, entre ellos la lucha por los Derechos Civiles de los Negros Norteamericanos.

La Comandante Melba Hernández, expone en el Tribunal Antiimperialista de Nuestra América-TANA-,  presentes el  Dr. Ramón Antonio Veras, el Dr. Guillermo Torriello, y otros miembros del Tribunal, en el curso de un encuentro en La Habana.

El pueblo vietnamita, el Partido Comunista de Vietnam y el Gobierno de aquel país, aún ven a Melba como una hermana de lucha y los más jóvenes la veneran como a una madre. El desarrollo del Comité, había coincidido con la llegada de numerosos grupos de estudiantes vietnamitas becados por el Gobierno Revolucionario para estudiar en Cuba, y ello contribuyó a que varias generaciones conocieran profundamente el trabajo de Melba en el campo de la solidaridad y la Paz.

Concluida victoriosamente la guerra de Vietnam, y luego de ser Embajadora de Cuba en ese país, Melba Hernández pasó a desarrollar otras tareas en el campo académico organizando el Centro de Estudios de Asia, así como transmitiéndole a los jóvenes, por conducto de la Unión de Jóvenes Comunistas (UJC) las experiencias más variadas de su vida revolucionaria.

Gloria eterna a la Comandante Melba Hernández. Desde este Santiago de los Caballeros querido, me inclino reverente ante la memoria histórica  de la compañera y amiga Melba Hernández.


viernes, 7 de marzo de 2014

EDITORIAL Basta de burla

 

No hay que ser un jurista para darse cuenta que la justicia de Santiago se ha dejado manipular por el acusado del atentado sufrido por Jordi Veras, el señor Adriano Román. Ya hace cerca de cuatro años que se celebró la audiencia preliminar del caso, y desde entonces, la defensa del acusado y el acusado mismo, con actitudes complacientes de ciertos actores, han conseguido extender un proceso más allá de lo razonable.

Pensar que se trata de un hecho que conmovió al municipio de Santiago, a toda la provincia, a la región Norte y al país, que se trata del hijo de un connotado e íntegro abogado como Ramón –Negro- Veras, que por elemental notoriedad haría pensar que la justicia actuaría con apego a los plazos, nos indica cuánto sufren las personas humildes que pasan por un proceso judicial.

“Si eso le pasa a un hijo de Negro Veras”, como dice la gente común en Santiago, “imagínese a las personas simples”. Este caso retrata de manera palmaria un régimen de negación de justicia que desacredita a quienes tienen la responsabilidad de conducir por mejores cauces la administración de ese estamento institucional.

El mecanismo más utilizado por el acusado es jugar a la renuncia manifiesta a la defensa, mediante recursos que los jueces han tenido la singular paciencia de tolerar. En la antesala del juicio, desautoriza a sus abogados; constituye nuevos abogados, quienes con subterfugios e irrespetos, como abandonar la sala del tribunal, consiguen sistemáticamente aplazar el juicio.

Ante la negativa del inculpado, el recurso necesario es la defensoría pública. Extrañamente, la Oficina Nacional de Defensa Pública se resiste a designar un defensor, con el alegato de que Román tiene solvencia económica para sufragarlo, y la vocación de la ley es la protección de los desvalidos.

Ante una manifiesta actitud de obstrucción, debe imponerse el sentido de la ley 277-04 y de la Constitución de la República, de que a nadie se le niegue el derecho a la defensa, primero, y luego, que su negativa no pueda interponerse a la misión de la justicia. ¡Basta de burla!

Periódico El Caribe, 6 de marzo de 2014.

miércoles, 5 de marzo de 2014

ANTE UNA SENTENCIA DE INCONSTITUCIONALIDAD.


Por: Ramón Antonio Veras

1.- La decisión del Tribunal Colegiado de Santiago, al declarar en el curso de la tarde de hoy la inconstitucionalidad del adefesio jurídico definido como  Instrucción General, elaborado por la Oficina de la Defensoría Pública,  de fecha 31 de enero de 2014,  reivindica  y  recoge el honor,  la majestad y el respeto que merece  la Constitución vigente.
2.- Al emitir su decisión el tribunal hizo una correcta, adecuada y justa interpretación de las disposiciones constitucionales a la luz de los artículos 6, 69, 176 y 177, los cuales con claridad meridiana disponen:
Artículo 6.-  Todas las personas y los órganos que ejercen potestades públicas están sujetos a la Constitución,  norma suprema y fundamento del ordenamiento jurídico del Estado. Son nulos de pleno derecho toda ley, decreto, resolución, reglamento o acto contrarios a esta Constitución.
Artículo 69.-  Toda persona, en el ejercicio de sus derechos e intereses legítimos, tiene derecho a obtener la tutela judicial efectiva, con respeto  del debido proceso que estará conformado por las garantías mínimas.
Artículo  176.- El servicio de Defensa Pública es un órgano del sistema de justicia dotado de autonomía administrativa y funcional, que tiene por finalidad garantizar la tutela efectiva del derecho fundamental a la defensa en las distintas áreas de su competencia. El servicio de Defensa Pública  se ofrecerá en todo el territorio nacional atendiendo a los criterios de gratuidad, fácil acceso, igualdad, eficiencia y calidad, para las personas imputadas que por cualquier causa no están asistidas por abogados. La ley de  Defensa Pública regirá el funcionamiento de esta institución.
Artículo  177.- El Estado será responsable de organizar programas y servicios de asistencia legal gratuita a favor de las personas que carezcan de los recursos económicos para obtener una representación judicial de sus intereses, particularmente para la protección de los derechos de la víctima, sin prejuicio de las atribuciones que correspondan al Ministerio Público en el ámbito del proceso penal.
3.- De igual manera, la sentencia del Tribunal Colegiado, viene a recoger el sentido y alcance  del artículo 5  de la ley 277-04, el cual  redactado correctamente no admite duda al establecer:
“El Consejo Nacional de la Defensa Pública determinará vía reglamentaria, los mecanismos, criterios y tasas aplicables a las personas comprobadamente solventes que requieran o que se le haya suministrado el servicio”.
4.- Además, al emitir la sentencia de inconstitucionalidad con relación a la Instrucción General elaborada por la Oficina Nacional de Defensa Pública,  el Tribunal Colegiado de Santiago,  hace reverencia y manda a respetar   los artículos  111-115 y 116  del Código Procesal Penal, los cuales claramente rezan así:
Artículo 111.- El imputado tiene derecho   irrenunciable a hacerse defender desde el primer acto del procedimiento por un abogado de su elección y a que si no lo hace se le designe de oficio un defensor público. El imputado puede asumir su propia defensa, conjuntamente con aquél.  En este caso, el juez vela para que esto no perjudique la eficacia de la defensa técnica. La designación del defensor no debe menoscabar el derecho del imputado a formular directamente solicitudes e informaciones. La inobservancia de esta norma produce la nulidad del procedimiento.
Artículo 115.-  Sustitución.  La designación de un defensor, público o particular, no impide que el imputado elija otro de su confianza con posteridad.
El defensor puede, con autorización  del imputado, designar un sustituto para que intervenga cuando tenga algún impedimento. En caso de urgencia, se permite la intervención del sustituto aun  a falta de la autorización del imputado, pero se solicita su opinión en la primera oportunidad.
Negado el consentimiento, el juez nombra un defensor público.
Artículo 116.- Renuncia y abandono.- El  defensor particular puede renunciar a la defensa. En este caso el juez o tribunal emite una resolución fijando un plazo para que el imputado nombre un nuevo defensor.
Transcurrido el plazo y a falta de dicho  nombramiento, el juez o tribunal nombra de oficio un defensor público. El renunciante no puede abandonar la defensa hasta que intervenga su reemplazo. El defensor no puede renunciar durante las audiencias.
Si el abandono ocurre poco antes o durante el juicio, se puede aplazar su comienzo  o suspenderse por un plazo no mayor de diez días si lo solicita el imputado.

5.- La Constitución no puede ser interpretada en forma antojadiza y caprichosa para satisfacer apetencias familiares, personales, de clases ni de grupos.  La Carta Magna Dominicana, ha sido levantada  desde el lugar donde había sido lanzada como algo sin valor, respeto ni consideración.
6.- Todas las personas que en el país se identifican con la legalidad y la constitucionalidad deben aplaudir la decisión emitida en la tarde de hoy por el Tribunal Colegiado de Santiago, que conoce el expediente contra Adriano Román y los demás imputados que se asociaron para asesinar a mi hijo José Jordi Veras R.
7.- Por último, la sentencia declarando la inconstitucionalidad emitida por la Oficina Nacional de Defensa Pública,  viene  a reverenciar  la Constitución Dominicana, a la vez que envía un mensaje de esperanza y confianza a las dominicanas y dominicanos que aspiramos vivir en una sociedad donde  predominen las instituciones, se respeten las leyes y se dignifique la justicia.

Santiago de los Caballeros,

 5 de marzo de 2014.

lunes, 3 de marzo de 2014

Santiagueras y santiagueros: si no por los vivos, por lo menos por nuestros muertos





Por: Ramón Antonio Veras

1.- Una vez se agota el modelo económico predominante en un país, la  sociedad entra en crisis, sus instituciones se hacen infuncionales, se relaja la disciplina, y el caos se observa por todas partes; tal es el caso que se ha presentado aquí donde el desorden ha tomando su imperio.
2.- En la República Dominicana,  Santiago de los Caballeros es la ciudad donde más se advierte el agrietamiento social como consecuencia de la debilidad del ordenamiento económico vigente; en ella los vivos y los muertos resultan víctimas del caos existente.
3.- Así, por ejemplo, aquel que por coincidencia fallece un día jueves, y su velatorio se efectúa en la funeraria situada frente  al Cementerio de la calle 30 de Marzo en Santiago, se va a morir dos veces  por lo que ocurre en  el mercado de las pulgas que hace varios años comenzó en la plaza pública de la J. Armando Bermúdez, en Pueblo Nuevo,  y ya se ha extendido hasta la esquina formada por las calles 30 de Marzo  y Salvador Cucurullo.
4.- Lo que se observa en el citado lugar los días  jueves de cada  semana, no puede ser descrito con palabras; aquello hay que verlo para comprender lo que es el Santiago de hoy en lo que a decadencia se refiere; eso da grima, espanta, hace llenar de asombro hasta al ser humano   más pasible. La foto  que encabeza este trabajo lo explica todo.
5.- En verdad, el mercado de los jueves en los alrededores del Cementerio de la calle 30 de Marzo, en Santiago, constituye una afrenta, una desvergüenza, un bochorno  para toda persona sensible, decente y con un mínimo de sentido  cívico.
6.- Lo ideal fuera que los directores de escuelas y colegios de Santiago lleven  a sus alumnos y alumnas al sitio ya aludido, y les expliquen lo que fue nuestra ciudad ayer, y el basurero, la inmundicia que es hoy por culpa de los politiqueros irresponsables,  y munícipes  santiagueros indolentes e indiferentes.
7.-  Si no por los vivos, por lo menos  por la paz que merecen los  muertos que descansan en el Cementerio de la 30 de Marzo, esa área de Santiago debe ser rescatada, para que vuelva a ser un espacio respetado y aseado; que simbolice recogimiento, y honra al lugar que sus familiares escogieron  como última morada: el Cementerio de la 30 de Marzo.
8.- El respeto hacia un ser querido fallecido se prueba honrando su memoria; todas aquellas personas que tienen seres queridos descansando para siempre en el Cementerio de la  calle 30 de Marzo, en Santiago, por consideración a sus muertos deben sentirse vivamente lesionadas, ultrajadas, burladas, y de todas  formas  ofendidas en sus nobles sentimientos.
9.-  El cariño hacia una persona no termina con su muerte; el afecto se extiende más allá del cementerio, es eterno.
10.- De alguna forma hay que  demostrar que en Santiago todavía quedan mujeres y hombres con dignidad y decoro;  que si la Alcaldía irrespeta a los vivos y a los finados,  todavía hay dolientes que aspiran a que sus parientes fallecidos tengan un camposanto que su entorno genere un ambiente de decencia, no como lo es ahora, una afrenta para  vivos y muertos.
11.- Señores, señoras, santiagueras y santiagueros,  por favor, ¿hasta cuándo  se va a seguir  tolerando tanta infamia ante nuestras propias narices?
12.- ¿Es que  los muertos  que están enterrados en el Cementerio de la calle 30 de Marzo en Santiago, fueron olvidados por  sus deudos?
13.- ¿Es que ya los santiagueros y santiagueras  perdieron el orgullo de ser munícipes  reconocidos por su apego a la limpieza, a la decencia y por querer a nuestra ciudad como nuestras propias casas?

Los días venideros nos darán la respuesta.


Santiago de los Caballeros,

                                                                       

                                                                                  3 de marzo de 2014.