El caso Julian Assange y las ONG momias
- Forma parte de la brega política de los pueblos, conocer lo que se esconde y mueve dentro de las acciones que realizan organismos nacionales, con vínculos internacionales, así como qué hacen y quién financia.
- Las organizaciones identificadas como de la sociedad civil, sin fines de lucro, ONG y otras denominaciones, se han convertido, muchas de ellas, en verdaderos instrumentos nativos al servicio de los intereses de la política exterior de Estados Unidos.
- Los gobiernos democráticos, caracterizados por la defensa de su independencia y soberanía, permanecen en la mira para ser desestabilizados por el imperio de occidente, sirviéndose este de la colaboración de órganos que hacen de fachadas, de apariencia limpia, pero cargados de suciedad.
- Es una tarea a ejecutar por cualquier gobierno que decida cuidarse, en todo momento interesarse, estar al acecho, prestar atención y poner empeño en lo que hacen en cada ocasión esas cosas, algunas diabólicas, al servicio de los peores fines imperiales.
- Con las ONG, y otras de igual factura, hay que aprender a leer a lo que se dedican y saber apreciar sus fines; poner de por medio sagacidad política con el fin de descifrar, bien descodificar el objetivo que persiguen desde el interior del país donde intervienen.
- De muchos de esos instrumentos de las sociedades sin fines de lucro hay que partir, no de su prédica, sino de su práctica; no de lo que proclaman, sino por sus ejecuciones, porque su esencia es la simulación.
- Son temas de la sociedad civil, los derechos humanos, las libertades públicas, la corrupción, transparencia y otras cuestiones que motivan las sanas voluntades e inquietudes de personas con fibras sensibles y honestamente preocupadas por las cosas buenas, las limpias.
- Para conocer el material humano del cual está hecho el equipo que dirige una sociedad sin fines de lucro, de la sociedad civil o una ONG, hay que darle seguimiento, saber quién la mueve, la dirige y desde dónde o por medio de cuál otra aliada o afín recibe los dineros desde el exterior.
- A nivel mundial existe en la actualidad todo un abanico de voces democráticas, interesadas en los derechos humanos, reclamando la libertad y respeto a la vida del periodista Julián Assange, privado de su libertad y perseguido por Estados Unidos, porque dio a conocer documentos que el imperio mantenía ocultos a estadounidenses y a la humanidad entera.
- Porque los intereses monopolistas norteamericanos están de por medio en el expediente preparado contra Julián Assange, las ONG que responden a los dictados de Washington, han guardado silencio, no han dicho ni pío.
- Recientemente, el presidente de México, Manuel López Obrador, con la sencillez que expone, logró poner de manifiesto el comportamiento hipócrita, la falsía y total simulación de algunas ONG, cuando saben que hay una trama de típico corto imperial, como es la urdida contra Julián Assange.
- “Esos que defienden la libertad de expresión, ¿qué están haciendo hoy para defender a Julián Assange? ¿Qué están haciendo con lo del bombardeo en Gaza y la muerte de periodistas? Nada, callados como momias”.
- El presidente López Obrador, habló clarito; les quitó la careta; logró desenmascarar, destapar y presentar tal y como son muchas ONG: simples servidoras de quien les paga para que sigan haciendo labor de agentes o quinta columna contra las aspiraciones democráticas de los pueblos que luchan por romper las cadenas del colonialismo.
- En la época actual, caracterizada por las grandes batallas que llevan a cabo los movimientos de liberación nacional contra el dominio imperial, aparecen ONG y otras de sus afines haciendo funciones de paralizadoras.
- Cada gobierno mínimamente progresista debe cuidarse de las misiones que llevan a la práctica en sus respectivos países la sociedad civil, porque algunas tienen como misión socavar, minar, quebrantar y de cualquier manera derribar gobiernos no afines a la política exterior de Estados Unidos.
- El papel de delimitadas ONG, sociedad civil y sus iguales, es el de actuar motivadas, animadas, impulsadas cuando así conviene al imperio occidental, y desactivadas, desanimadas, como momias, si así lo decide su proveedor de fondos, el que manda y les traza la línea a seguir.