martes, 31 de mayo de 2022

Educar ahora para un mejor futuro

I.- Diferente formas de actuar en nuestro medio

  1. Una sociedad humana tiene en su seno personas con diferentes formas de actuar, porque la conducta de los miembros que la integran constituye un revoltillo o mezcolanza. 
  2. En un medio compuesto por distintas clases sociales, cada una de ellas tiene su criterio muy particular de lo que es la manera de comportarse. Conducirse bien o mal, es la expresión de cómo obra un hombre o una mujer.
  3. El estilo de realizar define la conciencia social, que tiene relación con los principios y normas que sirven de guía a la comunidad. Ellas son las reglas de convivencia en las cuales se fundamenta la moral.
  4. Partiendo de que la conciencia social se expresa en los actos de los seres humanos, de cómo se manifiesta la generalidad de nuestros connacionales, explica el estado de descomposición moral de hoy aquí.
  5. Mientras el código penal de cada país determina la sanción a la violación de las disposiciones legales, las normas de la moral social, no tienen otro castigo que la condena hecha por la opinión pública.

II.- Juicios sobre la moral

  1. Pero ocurre que la opinión pública en cada país con clases sociales heterogéneas, tiene diferentes opiniones públicas, por lo que es distinto el concepto sobre lo que es moral e inmoral.
  2. En el ambiente dominicano, hay tantos juicios sobre la moral, como intereses que se contraponen, y entre ellos es imposible ponerse de acuerdo entre lo sano y lo nocivo.
  3. Lo que a diario estamos viendo en el medio social dominicano, es que con la idea de la moral se hace un juego de palabras, pero en el fondo lo que subyace es el criterio de ubicación social de cada contendiente. 
  4. Alrededor del juicio de clase social, con relación a lo que es ejecutado de conformidad con los principios morales, también hay que tomar en consideración el asunto de la sucesión de descendientes en línea recta.
  5. La decencia, la honestidad y el correcto proceder no se transmiten por la sangre, pero las épocas de nacimiento, la moral dominante en un período histórico determinado influye en la conducta. 
  6. La hija o el hijo, que se convierte en un continuador de las cualidades éticas y morales de sus progenitores, viene a ser un fiel heredero de la generación y formación de su ascendiente.
  7. En nuestro país, el descalabro ético y moral, está a la vista, tan claro que resulta indudable o innegable. Es algo irrebatible y comprobado.

III.- Preparar hoy al ser humano que educará al de mañana 

  1. En vista de que el asunto de agrietamiento moral, es un hecho que no se puede controvertir, corresponde a ciudadanos y ciudadanas, no comprometidos en la podredumbre actual, accionar para, por lo menos, ir sembrando las bases para en un nuevo orden social contar con mujeres y hombres que enseñen el decente vivir.
  2. Se hace necesario constituir una comunidad de dominicanos y dominicanas, que en el porvenir sean personas con condiciones para como ejemplo de lo bueno, puedan transmitir normas y principios de una nueva moral.
  3. Preparar a personas físicas, para que fijen en la conciencia de otras, las reglas que deben seguir y a otros enseñar, se logrará en nuestro país mediante la adecuada instrucción a la niñez de hoy.
  4. Sin duda alguna vale la pena, cualquier esfuerzo que se haga para que los adultos del mañana, se conviertan en entes de una generación de conciudadanos, para que se adiestren en el vivir decente. 
  5. El mayor y significativo aporte que puede recibir la ciudadana y el ciudadano en la actual coyuntura histórica, es comportarse para luego ser modelo en la formación cívica de sus compatriotas.
  6. Confeccionar a una mujer o a un hombre, darle formación acabada en las normas de buen vivir, es convertirlo para transmitir experiencias, para hacer gentes de correctas actuaciones. 
  7. El mejor ejemplo de munícipe es aquel que hoy se ocupa para que el país entregue a la posteridad seres humanos distinguidos por ser modelo de práctica ética en el accionar con honestidad y absoluta decencia. 
  8. El día ha de llegar, y ojalá esté cerca, cuando el mejor ser social dominicano sea aquel que sirva como paradigma de principios éticos y morales, de la misma naturaleza o esencia de su persona.

domingo, 29 de mayo de 2022

Enseñar la niñez a querer

Introducción

  1. Formar parte de una sociedad humana impone a sus integrantes la necesidad de luchar para conservarla en condiciones adecuadas para vivir con vigor y permanente entusiasmo. 
  2. Permanecer contento no es fruto de un querer, sino el resultado de un medio que hace posible el goce de una existencia material y espiritual. 
  3. De cómo está estructurado el medio donde desarrollamos nuestras actividades habituales, incide para mantenernos reposados o angustiados. El espacio donde accionamos ejerce influencia en la mente. 
  4. El deterioro de la sociedad dominicana en el orden económico y social, ha ejercido influencia en la facultad de razonar de cada uno de los que habitamos en el territorio nacional. La acción de pensar está subordinada a factores que escapan a nuestra voluntad. 
  5. Es una creación imaginaria de algunos de mis connacionales, creer que estamos compartiendo en un conglomerado de seres humanos inclinados a comportarse decente.

I.- El ambiente dominicano descompuesto

  1. La mayoría de las personas físicas que vivimos en nuestro país, quisiéramos suponer que estamos en un paraíso, y no en una parte horrible del mundo terrenal.
  2. La materialidad de la vida de cada dominicano y dominicana, está rodeada por un conjunto de fenómenos presentes, independientemente de las pretensiones de los que aquí convivimos.
  3. Proceder ajustado a la decencia es algo que no puede comprender quien solo sabe actuar fuera de la honestidad. El aseado y el sucio no pueden entenderse. 
  4. El hombre o la mujer formada para una vida basada en logros mediante el trabajo, aquí debe prepararse para la permanente frustración. Aquel que aguarda lo bueno porque para eso se esforzó, lo que le espera es la decepción. 
  5. El descompuesto ambiente que nos lamentamos compartir los limpios con los sucios de conciencia, es de mucha utilidad para prosperar aquel que tiene la moral de cafre. El delicado, el honesto, el sensible no tiene espacio seguro; solamente le espera estar acompañado de sinsabores, contrariedades y penas. 
  6. Aquí se ha hecho algo difícil la coexistencia de las buenas y sanas voluntades porque, por un lado, está ese ente social hecho para la integridad a toda prueba, y por el otro el deshonesto, que sobresale porque es el que expone la cultura actual, en la cual para nada cuenta la probidad. 
  7. Desde hace tiempo los malandrines se están moviendo a su anchura, porque se sienten que están en el campo ideal para llevar a cabo sus bellaquerías sin ser alcanzadas por la vara de la justicia.

II.- Se ha perdido la ternura entre nosotros

  1. El afecto profundo hacia alguien que bien se lo merece, ya no sale de los tiernos corazones, porque las rígidas estructuras del orden social que compartimos los han endurecido.
  2. El ánimo conmovido para manifestar afectuosidad, que antes nos caracterizó, ya no está en la forma del compatriota nuestro de ser cariñoso y altamente efusivo. Lo que a diario estamos observando es la ausencia de calor, la frialdad en el trato. Se destaca el desgano y la indiferencia, no así la calidez, ni la cordialidad.
  3. Ha desaparecido aquella unión y cariño que existía entre los que nos tratábamos como hermanos. Hacer amigos puros, es cosa del pasado. La aversión y la tirria llegaron para sustituir a congeniar e intimar.
  4. Lo que está de por medio no es llevarse bien, confraternizar y la mutua simpatía, sino discrepar, hacer contraste y sembrar la discordia.
  5. Lo normal en el ser humano es su inclinación a la ternura, a la plena bondad. La animosidad, el desapego y otros sentimientos contrarios a la estima surgen como consecuencia de taras que manchan el natural amor hacia nuestros congéneres.
  6. Una comunidad de personas en la cual la generalidad de sus comunitarios está viciada por el odio, es porque ya ha caído en la barbarie, perdiendo el sentir humanista para caer en la crueldad.
  7. La desestimación en la conducta de muchos coterráneos, prueba que el desprecio está dominando la buena acogida que debe servir de guía en las armoniosas relaciones.
  8. La situación en el ambiente dominicano ha llegado a un grado tal de inquina que sin que intervenga u ocurra disgusto alguno, una persona siente ante otra notoria aspereza.
  9. En el afán de dañar sin justificación, la descalificación, el vituperio es utilizado como un medio para hacer sentir mal y degradar a quien lleva una vida limpia, sin tachas.
  10. Por encima de todo, el mensaje que debemos mandar a la niñez dominicana, es el de que no asimile la idea del odio, sino la del querer, para así enterrar la cultura del desamor, que hoy está dominando.

viernes, 27 de mayo de 2022

Para que la patria disfrute del conocimiento de todos sus hijos

I.- Se les escaparon al sistema

  1. Nuestro país cuenta hoy con hombres y mujeres que, desde el lugar que ocupan en el seno de la sociedad, han hecho significativos aportes, contribuyendo al desarrollo cultural, económico e institucional.
  2. Uno de los jueces más talentosos y laboriosos, que ha tenido la Suprema Corte de Justicia, es hijo de un señor que levantó su familia desempeñando labores como sirviente de restaurante.
  3. Una señora madre, soltera, que laboró como despalilladora de hojas de tabaco, parió, formó y desarrolló, a un hoy distinguido magistrado del Tribunal Constitucional.
  4. Un joven, profesional del derecho, que ahora se desempeña como alto funcionario del Ministerio de Educación Superior, Ciencia y Tecnología. (MESCYT), es hijo de un señor muy respetado en la comunidad santiaguera, que se ganó el sustento suyo y de su familia, lustrando zapatos, en el parque Duarte en Santiago.
  5. Uno de los empresarios más exitosos de la República Dominicana, proviene de un hogar hecho con base en el esfuerzo mancomunado de sus humildes padres, que entregaron a la sociedad dominicana toda una prole que goza del respeto y consideración de sus conciudadanos.
  6. Una brillante magistrada de Santiago, ejemplo de capacidad y sentido de justicia, tiene su origen social en un hogar dirigido y mantenido por su progenitora, que tenía como oficio costurera.
  7. Dos jovencitos de Santiago, que en la niñez fuimos vendedores de periódicos y limpiabotas, hijos de madres trabajadoras domésticas a domicilio, en el año 1961, nos marchamos a la ciudad capital y nos inscribimos en la única universidad de la época en el país, en la facultad de derecho y de medicina. En el año 1967, resultamos investidos como doctor en derecho y médico, con calificaciones por encima del 97 por ciento.

El sistema impide, a los pobres, que con su talento aporten al país

  1. Las personas a las cuales hemos hecho referencia e identificamos como parte de los que nos escapamos del sistema porque logramos, con el sacrificio de nuestros padres y el esfuerzo propio, salir del cerco de los atrapados sistémicos.
  2. La presencia en nuestro medio de mujeres y hombres que evadieron la valla que les pone el statu quo, prueba que son millones los que no logran sortear la situación y escabullirse.
  3. Sería bueno que aquellas personas que tienen algo de sensibilidad, se hicieran la pregunta de, cuántos niños y niñas de nuestro país, hijos de padres marginados sociales, logran ir a los centros universitarios y concluir sus estudios.
  4. Cada año, cuántos niños y niñas, se ven impedidos de inscribirse en una universidad, privando al país de un futuro médico, agrónomo o educador.
  5. El brillante juez de la Suprema Corte de Justicia, hijo de un mozo, el ejemplar juez del Tribunal Constitucional, descendiente de una despalilladora, el abogado funcionario del (MESCYT), hijo de un limpiabotas; el destacado empresario, hijo de padres humildes, los dos jóvenes laureados hijos de domésticas a domicilio, y la magistrada, hija de una costurera, y otros escapados del sistema, son prototipos de la minoría de niñitos y niñitas, que hoy andan por ahí, con sus barrigas llenas de lombrices, y sin poder tener acceso a una universidad, pero que bien pudieron ser la muestra de ciudadanas y ciudadanos que por su talento engrandecen a nuestro país.
  6. Es un crimen contra el presente y el porvenir de nuestra patria, quitarle la posibilidad de contar mañana con un gran galeno, una excelente cientista, un destacado físico nuclear o una mujer dedicada a la investigación.
  7. Hacerle imposible la educación a la niñez que nace en los hogares pobres, es marchitar la esperanza y abrirle un espacio a la delincuencia, a la drogadicción y al crimen organizado.
  8. No es cuestión de privilegiar, ni otorgarles ventajas a los hijos de los que comen a veces. Lo que hay que hacer es proceder con sentido humano y lo que conviene al país ahora y en el mañana.
  9. La infinidad de niñas y niños, impedidos de una formación educativa de calidad y alcanzar un grado universitario, tiene una explicación que hay que buscarla en el sistema social que padecemos, y no en cuestiones que encierran misterios.

Ideas finales

  1. El caldo de cultivo donde se fragua el crimen que despoja a nuestro país, de entes sociales académicos altamente preparados, es la forma injusta, la desigualdad de oportunidades que lesiona, bloquea a la mayoría de la población pobre, a tener acceso a la educación, al conocimiento.
  2. No es recurrir al populismo, poner la educación en sus distintos grados al alcance y disposición de todas y de todos los integrantes de la sociedad, sin ninguna clase de distinción.
  3. El hecho de dominicanas y dominicanos, ejercer su derecho a estudiar, a llegar hasta donde les permita su capacidad intelectual, no es privilegiarlos, ni concederles exclusividades, sino un acto de justicia.
  4. La manera como está organizada la sociedad dominicana, en el orden económico y social, constituye una traba, un obstáculo para el desarrollo integral del ser humano, a la vez que favorece el progreso social y cultural de una minoría, sacrificando a la mayoría de la población.
  5. Corresponde a las dominicanas y a los dominicanos, con sensibilidad y vocación democrática, luchar para hacer posible que la educación esté, sin limitación alguna, a disposición y alcance de todas y todos los descendientes, hijos de los que con su trabajo han hecho y hacen aporte, material y espiritual, para el avance de la sociedad dominicana.
  6. Por último, estamos plenamente convencidos, y es de justicia, que la Pontificia Universidad Católica Madre y Maestra, está en condiciones de otorgar un mínimo de un mil becas, a mil estudiantes pobres, meritorios, provenientes de escuelas públicas.

jueves, 26 de mayo de 2022

Aceptar la desigualdad, o enfrentarla

I.- Nuestra sociedad, modelo de desigualdad

  1. En una sociedad humana, sin importar que sea homogénea o heterogénea, cada integrante de ella actúa atendiendo a su concepción ideológica. Su forma de pensar, viene a ser la guía para sus ejecuciones.
  2. El medio dominicano, sirve para comprobar lo que es una comunidad de mujeres y hombres, accionando bajo un orden social y económico cuya cualidad peculiar es la desigualdad de oportunidades.
  3. La desemejanza que genera el sistema, se manifiesta en las condiciones materiales y espirituales que sobreviven las personas que habitan en el territorio nacional dominicano. Marca la distancia entre la abundancia en una minoría y la escasez en la mayoría de la población. 
  4. La diversidad de posibilidades de tener acceso a educación, salud, alimentos y vivienda, indica que estamos en un ambiente de incertidumbre para una vida segura, ya que, en nuestro país, la mayor cantidad de personas no tienen alternativa de buena o mala vida, porque están colocadas en un estado de imposibilidad.

II.- Ser militante contra la desigualdad

  1. El cuadro social dominicano nos dice que estamos en la situación de no actuar para que todo siga igual, o trabajamos en el orden político y social, para lograr la igualdad de acceso al empleo, a la cultura y, en general, a una vida digna.
  2. Carece de sentido formar parte del mundo de los vivos, si no bregamos decididamente por el progreso social integral. He ahí la razón de existir como seres humanos. 
  3. Trabajar afanosamente para que mujeres y hombres se liberen de las cadenas de la opresión, es ser coherente con lo que predicamos para que se imponga lo justo contra lo injusto y la acción colectiva frente al individualismo. 
  4. Ser contendor sincero por la igualdad social, es lo que nos debe convertir en activistas permanentes, y no recurrir a justificaciones para limitarnos o abandonar las justas demandas.
  5. Porque lo social concentra los ideales e intereses de las mayorías, el verdadero competidor está obligado a comportarse contrincante abnegado por su causa. 
  6. Los agudos contrastes que observamos en nuestro país, solamente pueden ser superados por los adversarios conscientes, preparados para resistir y vencer. 
  7. Los pueblos dominados por minorías e intereses extranjeros, merecen contar en su seno con oponentes, mujeres y hombres que den toque de atención, poniendo sobre aviso y listos para luchar para hacer posible, conjuntamente con la paridad social, el rescate de la independencia y soberanía.

III.- Accionar coherente contra la desigualdad

  1. La lucha por la igualdad, siempre ha expresado contradicciones entre ricos y pobres, señores y siervos, hartos y hambrientos. Luego se transformó en la demanda de la burguesía por la abolición de privilegios y, más tarde, la decisión del proletariado de eliminar a las propias clases. 
  2. En nuestro país, el orden económico que sirve de sustentación al sistema imperante, descansa en la desigualdad que lesiona vivamente a las masas populares.
  3. La diferencia de vida trae como consecuencia un ambiente de agravio para los que son víctimas de la opresión que se manifiesta en la disparidad del modo de existencia.
  4. El contraste social genera indignación, frustración y contrariedad en el seno del pueblo y hace notoria la situación de holgura de un grupo y la estrechez de los marginados sociales.
  5. La diversidad clasista hace evidente la forma fácil para unos satisfacer plenamente las necesidades, mientras que para otros es una calamidad, algo así como un caso perdido. 
  6. La bonanza, la abundancia y el pleno bienestar, a costa de la infelicidad de la mayoría de los miembros de la comunidad, no permite llevar una vida espiritual placentera, porque lacerar a los demás causa desasosiego.
  7. La igualdad, como legítima aspiración humanista, no ha sido alcanzada, hasta ahora, bajo ningún sistema social de los que han existido.
  8. Por ahora, debemos ver y aceptar como un logro la igualdad de oportunidades, pero conscientes de que el criterio principal de igualdad lo constituye el trabajo, que es el factor que determina el lugar del individuo en la sociedad.
  9. Mientras tanto, constituye una gran conquista, que se logre la igualdad de posibilidades en el orden económico, social y jurídico, y profundizar esas premisas en un ambiente democrático.

martes, 24 de mayo de 2022

El sistema, protegido por travesuras e ilusiones

I.- Mentiras piadosas para proteger el sistema

  1. Es una mentira piadosa, pero de mal gusto, decirles a los pobres de nuestro país, que su pobreza es de origen divino, una maldición, o ha sido causada por el Consejo de Estado, Juan Bosch, El Triunvirato, de tres, de dos o de uno; García Godoy, Balaguer, Guzmán, Majluta, Jorge Blanco, Hipólito, Leonel, Danilo o Abinader.
  2. Es un engaño ideológico, hacerle creer a los necesitados de comida, empleos, vivienda, servicios públicos de salud y educación, que los que han gobernado a nuestro país, trajeron indigencia, menesterosos, prostitutas, drogadictos, narcotraficantes, corruptos y todas las lacras que emanan del actual orden social y económico. Las taras presentes en la sociedad dominicana de hoy, están vigentes desde antes de nacer aquellos que han estado al frente del Estado dominicano.
  3. Las tachas, las deficiencias, que con dureza golpean a las grandes mayorías nacionales, están ahí como testigos fehacientes de un sistema, no porque al pueblo dominicano le echaron una maldición, o por una expresión injuriosa contra los oprimidos.
  4. La gran cantidad de menesterosos que ayer y hoy han andado y andan por ahí, no deben su situación desgraciada a lo feo de rostro o a la falta de talento de quienes han pasado por el Palacio Nacional, muchos de los cuales han sido de cara fea y otros de cara bonita, lo mismo que algunos son muy brillantes, y otros con el cerebro apagado. 
  5. Lo que ha enseñado la realidad dominicana, es que la miseria, la pobreza y el sufrimiento que ha padecido y padece la mayoría del pueblo dominicano, no tiene nada que ver con la persona que gobierna o ha gobernado.

II.- No es cuestión de personas, el problema es sistémico

  1. La causa, lo que motiva, el fundamento y origen de todos los males que sienten y sufren los pobres de nuestro país, hay que buscarlos en ese conjunto de reglas y principios que constituyen el sistema social predominante.
  2. Cualquier persona, fea o bonita, joven o anciana, que vaya al Palacio Nacional, a gobernar, siguiendo los lineamientos del sistema, no hará otra cosa que administrar para los beneficiados del statu quo, y nunca para el pueblo. 
  3. Sin distinción alguna, los presidentes de la República Dominicana, lo que han hecho como representantes del Poder Ejecutivo, no es más que disponer para el bien de la minoría nacional, para lo que aquí son los menos; manejar el Estado como un instrumento al servicio de una parte pequeñita de la población, y contra la mayoría. 
  4. No cabe duda. Los que han ido al Palacio Nacional, no han sido santos ni demonios, buenos ni malos. Pura y simplemente, hombres del sistema, que les ha correspondido regir los destinos del país, bajo un modelo económico ya agotado y no da para más.
  5. Gobernar a la República Dominicano, al igual que a otro país con una semejante estructura económica y social, es no hacer otra cosa que vivir día a día tapándole parches, remendando un modelo fallido.
  6. La fatalidad para los oprimidos no la trajo Hipólito Mejía, y se la dejó a Leonel Fernández, ni la guardó Danilo Medina, para joder a Luis Abinader. Lo que ocurre es que ellos, al igual que sus predecesores, no son más que políticos sistémicos que aplican prácticas curativas.
  7. Sea quien sea, llámese como se llame, poco importa. No es cuestión de ñe ñe ñe, ni que María estaba lavando y se le acabó el jabón. Gobernar bajo un sistema que cada minuto trae al mundo de los vivos, pobres por pipá, no lo salva ni su Espíritu Santo. 
  8. Debemos estar claros. Los problemas sociales no se solucionan eliminando físicamente a opositores, como tampoco rezando; haciéndole ojos bonitos al imperio, ni obras de caridad piadosa o benéfica. 
  9. Los problemas económicos y sociales, que padece la mayoría del pueblo dominicano, no se eliminan matando los pobres que se multiplican cada día, ni con migajas por lástima. El modelo cada vez se hace más infuncional, y crecen las demandas populares.
  10. La crisis que golpea a nuestro pueblo, no se puede ocultar; las lacras sistémicas, no se tapan con tierra y las protestas imposibles de silenciar. Lo que está a la vista, aunque se quiera, no se puede enmascarar.
  11. Lo que nos queda es, a la franca, mostrar un modelo económico insalvable; destapar el sistema para que se vea su podredumbre; sacar a la luz todas las injusticias que genera para, sobre sus cenizas, levantar otro orden social que garantice el progreso a todo el pueblo dominicano.

Ideas finales

  1. No es más que una travesura grande, verdadera diablura, ilusionar a los que aquí comen de vez en cuando, diciéndoles que ahora están mal, pero que después de las elecciones del 2024, llegará su felicidad. 
  2. Lo cierto es que los oprimidos de ahora, más lo que se sumen en lo adelante, cambiaran para peor desde ahora hasta el 2024, llegando a convertirse en un montón de pasados y presentes pordioseros.
  3. Porque los aprovechados del añejo modelo económico presente, no tienen nada nuevo para el pueblo, se contentan con ofrecerles cosas futuras, que supuestamente van a venir, aunque los mismos beneficiados sistémicos saben que nunca llegará nada nuevo, a no ser más pobres y más miseria. 
  4. Debemos de sacar del ambiente político nacional, la diatriba, y concentrarnos en la brega contra el actual modelo, que es el que mantiene a lo mejor del pueblo dominicano en estado de horripilante miseria.
  5. El discurso injurioso no impulsa a la lucha social, quedándose todo en lo personal, que en nada contribuye al progreso social.
  6. Se impone desarrollar la brega política, vinculando a ella a todo ese ejército que se opone a continuar mal viviendo como hasta ahora, en estado de opresión sistémica.

domingo, 22 de mayo de 2022

La Revolución Cubana, por el ser humano

  1. Con el título: Enseñanza de dignidad de nuestros pueblos, el día 20 de mayo, en curso, 2022, escribimos un artículo en el cual, con relación a la Revolución Cubana, expusimos:
    1. La historia política y social de América Latina y el Caribe, está marcada por un antes y un después de la Revolución Cubana, para nosotros el acontecimiento de mayor trascendencia en el pasado y presente siglo.
    2. Cualquiera de nuestros coterráneos latinoamericanos y caribeños, no prejuiciado y con sano juicio, que le ha dado seguimiento a los diferentes fenómenos políticos y sociales ocurridos en su lar nativo, desde enero de 1959 hasta hoy, sabe que han contado con la incidencia del proceso revolucionario que se desarrolla en Cuba.
    3. Quiérase o no, la Revolución Cubana fue la chispa, el fenómeno luminoso que trajo claridad a todas esas masas de mujeres y hombres, ubicados en estos territorios, que las minorías nativas y el imperio, creían les pertenecían y podían disponer de ellas a su mejor conveniencia.
  2. Al poco rato de ser publicado el aludido escrito por diferentes medios de comunicación, una distinguida y talentosa empresaria, preocupada por los problemas del país, y en particular los de Santiago, nos escribió una nota con los términos siguientes:
    1. “Cuando leo sus escritos, en especial los que tienen como tema Cuba, Venezuela y Nicaragua, me pregunto si ha tenido la experiencia de vivir en esos regímenes con las personas “de a pie”
    2. Va mi pregunta, porque cada vez más conozco cubanos que logran salir (¿por qué retienen a gente que no quiere estar?) diciendo lo mal que lo pasaban y la desesperanza de lograr mejorar la calidad de vida con su trabajo.
    3. Siempre que lo leo estos temas que expone, me preocupa mucho, el que me estén dando información equivocada, por la credibilidad y respeto que siempre me ha merecido”.
    4. Por el respeto y distinción que nos merece como persona y ciudadana, procedimos a darle respuesta a nuestra respetable interlocutora, diciéndole:
    5. Porque conozco de tu preocupación para que las cosas se hagan bien en tu país, que es el mío, doy respuesta a tu inquietud.
    6. Tuve la dicha de convivir en todos los países de la Europa de Este, de Asia, en Cuba y en Nicaragua. En esas naciones, la gente de a pie, no vive en un paraíso, como tampoco en el infierno que pintan los enemigos ideológicos. Pero te aseguro, que en todas esas latitudes los pobres viven mejor que aquí.
    7. Por último, porque creo más en un yo lo vi, que en un millón de me dijeron, me gustaría que cinco santiagueros, incluidos tú y yo, hiciéramos un viaje a Cuba o a Nicaragua, para ver, directamente, cómo viven en esos países los de a pie.
  3. Por muy talentosa y de buena fe que sea una persona, no está en condiciones de resistir el permanente asedio ideológico que desde siempre ha mantenido Estados Unidos contra Cuba y su proceso revolucionario.
  4. Las campañas malévolas de los Estados Unidos, contra los cubanos y su revolución, en su momento también se llevaron a cabo frente a Guatemala y el gobierno democrático de Jacobo Árbenz, al igual que contra Salvador Allende, en Chile, Juan Bosch, y han continuado con Venezuela y Nicaragua.
  5. En cualquier país del mundo, en el más atrasado de los modelos socialistas, los pobres viven mejor que en el más desarrollado capitalismo.
  6. Reitero, insisto, y no me cansaré de repetir, que luego de la Revolución Cubana, en América Latina y el Caribe, despertaron para bien de todos los hombres y mujeres que, en cada uno de nuestros países, son los más, las grandes mayorías nacionales, las masas populares.
  7. Para saber cómo la Revolución Cubana, ha iluminado la conciencia, el pensamiento de nuestros pueblos, ayer mental y políticamente apagados, basta con recurrir a las fuentes donde reposan los datos estadísticos del pasado y el presente.
  8. Los documentos están ahí, como testigos de piedra, como prueba de que los hechos, son los hechos y no se derriten. Ellos sirven para darles respuesta a los incrédulos y a los confiados.
  9. Para saber cómo viven en Cuba, los ancianos, niños, y personas con trastornos mentales, decidimos compartir y habitar con ellos, durante varios días y en distintas oportunidades.
  10. Lo mismo que en Cuba, en Corea del Norte, en la Unión Soviética, Polonia, Nicaragua, en ocasiones muy diversas, departí con personas de diferentes ocupaciones, con altas funciones en el Estado, en fábricas o cooperativas de campesinos.
  11. En nuestras estadías en países socialistas, no nos limitamos a estar presentes en casas de gobiernos y ministerios, sino también en centros de detención, en cárceles de mujeres y hombres, unas veces en compañía de funcionarios del país visitado, o con amigos como Juan Bosch, Hamlet Herman y Euclides Gutiérrez Feliz.
  12. Además, precisamente en Cuba, tuvimos la oportunidad de compartir con presidiarios en cárceles de mujeres y hombres, cuando intervenimos para lograr la libertad de un dominicano preso en Cuba, por espionaje.

Ideas finales

  1. A los que dan seguimiento a todo lo relacionado con Cuba, debe llamarles la atención que todas aquellas personas que, por una u otra razón, salen de ese país, gozan de buena salud; lucen fornidos, y tienen alto nivel educativo y hábitos de higiene.
  2. Los que emigran de Cuba, ya sea como peloteros, presentadores de televisión, artistas, profesores, etc., de inmediato encuentran espacio en el mercado laboral del país receptor.
  3. Entonces, dónde está el secreto de la preparación física, educativa, cultural y académica de ese ente social, nacido y desarrollado en un país bloqueado por aire, mar y tierra, durante 60 años. La respuesta está en que para la Revolución Cubana, la primera preocupación es el ser humano.
  4. El imperio no manifiesta ningún deseo de robarse los cerebros de los nacionales de ningún otro país de América Latina y el Caribe. Solo de los cubanos y cubanas, a los cuales la revolución ha desarrollado física y espiritualmente, como seres humanos para servirles a toda la humanidad. 
  5. Al momento de hacer un análisis sobre Cuba y el proceso que allí se desarrolla, lo determinante es razonar qué sería ese país sin el bloqueo.
  6. Desde el punto de vista político y social, mido los aportes de un sistema social para el ser humano, por sus resultados en lo que se refiere a la salud, educación y esperanza de vida de los miembros de la comunidad.
  7. Cubanas y cubanos, están haciendo su revolución conforme sus condiciones objetivas, su realidad nacional y, de igual manera, cada país hará la suya partiendo de sus tradiciones y la formación y preparación de sus fuerzas motrices.
  8. Particularmente nosotros, dominicanas y dominicanos, estamos comprometidos a hacer nuestra revolución, al paso de güira, tambora y acordeón, desempeñando papel fundamental los trabajadores del campo y la ciudad, los intelectuales, y la burguesía nacional dispuesta a demostrar que defiende su mercado y ama a su patria.
  9. Ningún país, grande o pequeño, está en condiciones de recetarle a otro cómo ha de hacer sus transformaciones económicas, políticas y sociales. Los cubanos y las cubanas están trabajando para construir una mejor nación, partiendo de sus propias realidades.

viernes, 20 de mayo de 2022

Enseñanza de dignidad de nuestros pueblos

I.- La Revolución Cubana, la chispa que iluminó a los pueblos de América Latina y el Caribe

  1. Los pueblos aspiran y merecen estar dirigidos por personas con sensibilidad y sentido de lo que es seriedad, responsabilidad política y social, cualidades no siempre fácil de encontrar.
  2. Es posible que algunos ciudadanos y ciudadanas, a lo mejor, no se dan cuenta de que en política, un espacio de tiempo, un determinado período de la historia, incide en el proceder de una o más generaciones.
  3. La historia política y social de América Latina y el Caribe, está marcada por un antes y un después de la Revolución Cubana, para nosotros el acontecimiento de mayor trascendencia en el pasado y presente siglo. 
  4. Cualquiera de nuestros coterráneos latinoamericanos y caribeños, no prejuiciado y con sano juicio, que le ha dado seguimiento a los diferentes fenómenos políticos y sociales ocurridos en su lar nativo, desde enero de 1959 hasta hoy, sabe que han contado con la incidencia del proceso revolucionario que se desarrolla en Cuba.
  5. Quiérase o no, la Revolución Cubana fue la chispa, el fenómeno luminoso que trajo claridad a todas esas masas de mujeres y hombres, ubicados en estos territorios, que las minorías nativas y el imperio, creían les pertenecían y podían disponer de ellas a su mejor conveniencia. 
  6. A los fines de que se comprenda la razón por la cual hemos hecho referencia a la importancia de las épocas en política, así como la presencia determinante de la Revolución Cubana en la concienciación de nuestros pueblos, desarrollamos más adelante lo que justicia esta introducción.

II.- Política exterior con dignidad

  1. Una persona física, un Estado o un Gobierno, no tiene motivo alguno para sentirse perturbado por comportarse con seriedad, porque le basta con saber que ha actuado ajustado a la dignidad.
  2. La respetabilidad entraña respetarse a sí mismo, que no es más que proceder acorde con la seriedad, honrando la formalidad, que define la forma de actuar y obrar con compostura.
  3. La dignidad de un gobierno, la podemos medir por la posición que asume en la ejecución de su política exterior, la cual se basa en la diplomacia, en el conjunto de métodos y maneras aplicadas en las relaciones con Estados extranjeros.
  4. Recientemente se ha puesto a prueba la dignidad de muchos de nuestros gobernantes, ante la convocatoria hecha por el Presidente de los Estados Unidos, para la celebración de la Novena Cumbre de las Américas, que se llevará a efecto del 8 al 10 de junio de 2022, en Los Ángeles, California, excluyendo a Cuba, Venezuela y Nicaragua. 
  5. El respeto a su pueblo, a su soberanía e independencia, ha sido probado por varios gobiernos que, demostrando decencia y alto comedimiento, han declarado que no asistirán al encuentro, en caso de que se mantenga la exclusión a Nicaragua, Cuba y Venezuela.
  6. Los representantes de los gobiernos que han expresado su negativa a estar presentes en el encuentro de Los Ángeles, no han hecho otra cosa que demostrar, con hechos, decoro y probidad.
  7. Para llevar a la práctica la honradez, no hay que renunciar a nada, recurrir a inmolarse, ni dar la sangre de sus venas. Tampoco tiene que limitarse en su pensamiento y acción. Basta con honrar la consideración que cada quien cree merecer. 
  8. Una acción indecorosa desdice mucho de la persona que la ejecuta, mientras que proceder con honor la eleva. El imperio se encontró con gobernantes pudorosos.
  9. Tener sentimiento vivo del honor, es muy propio de mujeres y hombres que, en el ejercicio del poder político y como jefes de Estado, enseñan lo que es la honra.

Ideas finales

  1. Excelente opinión y bien ganada fama, merecen tener hoy, de parte de mujeres y hombres dignos y honrados, aquellos jefes de Estados y Gobiernos, que han rechazado la exclusión de Venezuela, Nicaragua y Cuba.
  2. El derecho a decidir por sí mismo la reivindicación de su liberación, y la prerrogativa a su organización económica estatal, forman parte de la autodeterminación de los pueblos. 
  3. Con la posición de los mandatarios que han reclamado el derecho de Cuba, Nicaragua y Venezuela, a no ser excluidas, se ha puesto de manifiesto el sentir democrático de gobernantes que, contrariando la prepotencia imperial, levantaron dignamente la vocación de quienes creemos en la autodeterminación, la soberanía y la plena independencia. 
  4. En todo escenario hay que reiterar la idea de que cada pueblo tiene derecho a exigir de su gobierno que mantenga una conducta política exterior ajustada al honor y al decoro. 
  5. En América Latina y el Caribe, aquellas masas irredentas, burladas, despreciadas, explotadas y oprimidas, con la clarinada de la Revolución Cubana, se levantaron y comenzaron andar, y desde lo más profundo de sus gargantas sacaron y levantaron su voz de liberación, y hoy se han dado gobiernos democráticos, que no responden con docilidad a los dictados de Washington.

jueves, 19 de mayo de 2022

El orden social dominicano, creando pobres

I.- Un sistema que engendra oprimidos

  1. Un sistema social, que de la explotación saca su potencial para preñar a la sociedad humana, engendra explotados que nacen convertidos en sus adversarios.
  2. En esa masa de descendientes sistémicos, está la clase obrera y, junto a ella, una multitud de pobres, un montón de desclasados, entre los que se encuentra un sinnúmero que padece de taras físicas o psíquicas.
  3. El orden económico y social vigente en nuestro país, parió a la minoría que mantiene olvidada a la mayoría del pueblo dominicano.
  4. Esa gran cantidad de marginados sociales, hijos directos del sistema que hizo posible su llegada al mundo terrenal, para venir a sufrir en lo material y espiritual, son los llamados a crear un modelo económico nuevo que les permita existir dignamente.
  5. No hay que ser un sabihondo, para saber que menesterosos, drogadictos, prostitutas, narcotraficantes, corrompidos, degenerados y demás estropeados que habitan en nuestro país, no han nacido para ser tarados. 
  6. Las clases sociales ya señaladas, son expresiones de la sociedad dominicana que tiene organizado el orden social bajo el cual estamos viviendo, y quienes no estemos de acuerdo con que el país siga desarrollando subproductos sociales, debemos oponernos al sistema que los ha engendrado.
  7. En el ambiente dominicano, muchos grupos humanos forman parte de la sociedad, pero desconocen su ubicación clasista y la función que han de desempeñar para que llegue el progreso real y efectivamente.
  8. La organización económica y social que rige en el país, por necesidad y conveniencia para la producción de mercancías, concentra en las fábricas a los obreros, y a los demás oprimidos los empuja a vivir en tugurios y barrancones. 
  9. De todos los expoliados por el sistema, la clase obrera está llamada a cumplir su misión histórica, de liberarse junto a todo el pueblo y, será entonces, cuando la sociedad dominicana alcanzará la plena felicidad. 
  10. Aquí, en este país de nuestros amores y sinsabores, algunos desorejados pretenden que mujeres y hombres santifiquen la situación actual, pero lo que procede es que se mantengan resistiendo hasta su triunfo que será, sin discusión alguna, irrebatible.

II.- Un orden social basado en la desigualdad que lastima al ser humano

  1. Una sociedad humana que descansa en la desigualdad de oportunidades, le es imposible tener en su seno semejanza de clases sociales. La diferencia está presente entre quienes disfrutan de todo a su gusto, y aquellos que solo tienen la esperanza de alcanzar, a veces, un pedazo de pan.
  2. Lo que ha parido la sociedad dominicana, son los hijos que el sistema engendró, y muchos de esos descendientes, lamentablemente, han abrazado la cultura de los vicios sociales, siendo sinuosos, farsantes e insinceros.
  3. Las mujeres y los hombres pobres, encuentran en sistemas como el que está dominando aquí, mortificarse, lastimarse y vivir en condiciones de damnificados, mientras un puñado de gente saca amplios beneficios del presupuesto nacional.
  4. La gran mayoría de la población dominicana, tiene más que justos motivos para mantenerse desilusionada y la pérdida de ilusión le viene porque la desigualdad genera, además de divergencia, desencanto y estado de frustración.
  5. La disparidad, la desemejanza que existe entre el pequeño grupo que aquí todo lo tiene, y el pueblo en general golpeado por las necesidades, marca la normal indignación popular.
  6. Comer, habitar, educarse y curarse con suma dificultad, solo ocurre en una sociedad cimentada en un orden que tiene su origen en la heterogeneidad de clases sociales, en la diferencia entre los grupitos que gozan de abundancia y el pueblo que padece pobreza.
  7. No resulta nada difícil establecer la naturaleza del sistema que manda aquí, caracterizado porque oprime y asfixia a los pobres, llevándoles angustia y una vida de abusos y desasosiego.
  8. Por permanecer los humildes del país bajo situación de pobreza, nunca han disfrutado de la felicidad, la prosperidad y el goce real de sus derechos y libertades, prerrogativas que han visto de manera formal, pero no real.

Ideas finales

  1. Un análisis sereno y desapasionado hecho por las grandes mayorías nacionales, las lleva al convencimiento de que deben rechazar el actual sistema, porque las ha condenado a una existencia deshonrosa, ignominiosa, nada digna ni honrosa.
  2. La realidad, la verdad, le está diciendo a lo que constituye el pueblo dominicano, que no debe continuar arrastrando las condiciones materiales y espirituales que ha padecido y padece, manifestadas en deshumanización, insensibilidad, desigualdad, opresión y ausencia de igualdad de oportunidades.

martes, 17 de mayo de 2022

Sembrar confianza en la conciencia popular

I.- Educar al pueblo para su liberación

  1. Debemos estar preparados para disfrutar de todo lo bonito que nos aporta la naturaleza, como también saber sufrir por lo feo que hace la especie humana. La realidad se nos presenta cambiante.
  2. Nuestra generación lleva en su conciencia el daño físico y moral causado por la Segunda Guerra Mundial, pero se puso contenta con la llegada del hombre a la luna.
  3. En la actualidad, la gran mayoría de las dominicanas y los dominicanos, está pasando por momentos de pesares que se manifiestan en angustia y notoria tribulación.
  4. A los causantes de la tristeza de los hombres y mujeres del pueblo, les resbala, poco les importa ese estado de aflicción, pero sí preocupa a quienes se identifican con las mejores causas que hacen sentir bien a los que sufren las injusticias sociales.
  5. Cambiar la existencia real y objetiva dominicana, no depende de la individual voluntad de los que no estamos de acuerdo con el statu quo. Los problemas sociales se enfrentan en forma colectiva, con acciones de masas, no obrando individualmente.
  6. Las fuerzas motrices que deben movilizarse contra las trabas que frenan la felicidad del pueblo, están en la obligación, ante todo, quitarse de la mente todo aquello que le impide pensar libremente.
  7. Para moverse hacia el futuro, las masas populares tienen que ser orientadas para eliminar de su pensamiento cualquier idea preconcebida que las guíe a creer en la imposibilidad de cambiar su estado, para salir de la opresión y lograr su liberación.
  8. Se hace indispensable convencer a los marginados sociales dominicanos, que deben tener inclinación, disposición, vocación de autoridad y de poder político, para dirigir el Estado.
  9. Es una labor de sana formación ciudadana, cívica, política y social, educar a lo mejor de nuestro pueblo, para que se aprenda todo aquello que haga posible limpiar su cerebro, de cuantas ideas mezcladas le impiden distinguir los mensajes buenos de los dañinos.
  10. Adiestrar, bien cultivar y correctamente encauzar, a quienes desde siempre han sido víctimas de la ignorancia, es una labor educativa que procede ejecutar como mandato de civismo.
  11. Unificar todo lo que el ser humano tiene para pensar, es armarlo para hacerle posible el uso adecuado de su pensamiento, y una vez provisto de ideas, estar listo para razonar lo que es de su interés y conveniencia.
  12. El aprendizaje, la ilustración y todo lo que tenga que ver con la instrucción, acerca a la masa de dominicanos y dominicanas desamparados, a convertirse en personas listas para darle riendas sueltas a su justa aspiración liberadora.

II.- Formar bien a las masas es un trabajo cívico

  1. Es un trabajo que debe ser visto como positivo y de orden cívico, preocuparse por aleccionar a aquellos que, históricamente, han sido utilizados como ciudadanos y ciudadanas para que voten en los procesos electorales, y en lo adelante tratados como desarraigados sociales o semovientes.
  2. En la medida que se le fijan al pueblo las ideas que lo han de llevar a su liberación, también hay que enseñarle las que no deben guiarlo al sometimiento, a la subordinación.
  3. El político que lleva al pueblo dominicano a aceptar la miseria, el desempleo y todo aquello que lo reduce como humano, lo está invitando a que permanezca hundido en el fango de la pobreza.
  4. Enemigos jurados de los pobres del país, son aquellos que, de una u otra forma, justifican el desánimo, la desesperanza y el catastrofismo. A los mensajes de pesimismo, hay que oponerle el optimismo, y la llegada de un nuevo amanecer cargado de esplendor.
  5. Convencer a los oprimidos, a los que comen a veces, a esos que viven de las dádivas de cajitas de comida y tarjetas oficiales, hay que convencerlos de que la certidumbre de su liberación, no es para llenarles la cabeza de triunfalismo infundado, sino que es un optimismo basado en la confianza de sus propias fuerzas, en su justo deseo de romper las cadenas de la opresión.
  6. Aunque una minoría de la población dominicana, ve muy lejos el triunfo de la gran mayoría de nuestro pueblo, no hay duda de que estos van a resultar victoriosos, porque va a prevalecer, a imponerse la igualdad sobre la desigualdad y el éxito ante la derrota.
  7. La confianza está al lado de los que en nuestro país son los más, aunque hoy no están en el poder. La decisión de liberarse, el ánimo para alcanzar el control del Estado, el empuje está en los que ahora están al margen del progreso social.
  8. Sin importar las dificultades que tenga que enfrentar el pueblo dominicano, para obtener su felicidad; el dilema que tenga que dilucidar, ni el atolladero donde lo ha metido la minoría nacional, la solución la encontrará más temprano que tarde.

domingo, 15 de mayo de 2022

Ante inflación, apagones y asesinatos, adelante!

Introducción

  1. Ante la difícil situación que estamos atravesando, matizada por problemas de todos los colores, algunos negociantes de la política se aprovechan para motivar la frustración en el sentir popular.
  2. Frente al desasosiego que impulsan aquellos que no creen en el accionar de nuestro pueblo, hay que salirle al paso sembrando confianza en quienes con sus propios bríos están llamados a levantar un mejor país.

I.- Motivar entusiasmo al pueblo

  1. Ningún argumento es válido para no colocarnos a la altura que demanda el momento actual, que requiere de la actitud militante de sus ciudadanas y ciudadanos más lúcidos con sentido de compromiso social.Todo aquel que voluntariamente se ha involucrado en la brega social, debe saber que está comprometido a aceptar los riesgos que entraña la obligación contraída, y no puede ahora salir haciéndose el desentendido.
  2. Cada militante por las causas justas, tiene que moverse con agilidad espiritual, estar listo para accionar en el momento y lugar que mandan las circunstancias, y ejecutar en procura de éxitos para la causa que defiende.
  3. El desgano nunca formará parte de la forma de ser de quien ha hecho del trabajo político y social parte esencial de su vida. Portarse flojo, desdice de aquel que está obligado a mantenerse enérgico, cargado de entusiasmo y siempre dispuesto.
  4. Nada puede frenar la marcha emprendida hasta lograr el triunfo de los que han confiado en tener como aliados consecuentes a los que se obligaron a enfrentar las adversidades, para que las grandes mayorías nacionales sientan que merecen estar liberadas.
  5. La coyuntura que está viviendo el pueblo dominicano, es para mujeres y hombres que desde siempre han aspirado a que las masas demuestren poder y capacidad para accionar en el ambiente nacional y ser dueñas de su propio destino.
  6. El tiempo es propicio para que los que tienen confianza en el buen ánimo de los pobres para liberarse, les alienten, estimulen e inciten para que no se detengan en el reclamo de sus justas demandas.
  7. El momento no es para transmitir conformidad ante las adversidades. Lo que se impone es llevar a la mente de los oprimidos, la defensa de su derecho a una existencia digna; a comportarse refractarios, negarse a permanecer como hasta ahora; oponer resistencia frente a los abusos; plantar cara a los prepotentes que buscan la docilidad ante la opresión.
  8. Conviene alimentar a los de a pie, con prédica de fortaleza, para que no sean propensos a ver las cosas en su lado negativo. Nada de derrotismo; fortalecerlos de optimismo, con lo más hondo del sentir positivo y esperanzador.
  9. Es necesario orientar a lo mejor de nuestro pueblo, en la línea de que no haga caso a los ideólogos del sistema, que procuran hacer fijar en los pobres la falta de decisión, con el fin de crear en su cerebro el concepto de poco dominio para hacer y deshacer, sembrándoles la impotencia.
  10. Es una tarea importante la enseñanza a los oprimidos de que no deben tener duda de la justeza de su lucha. La indecisión, la inseguridad, y la vacilación jamás deben ser aceptadas por quienes están llamados a permanecer confiados, bien seguros y con la certeza de su brega contra la opresión.

II.- Nada de pensar en la sumisión

  1. Es de principio para ciudadanas y ciudadanos identificados con la liberación nacional de su país, no ceder a la prepotencia de los que nos han convertido en un ambiente ideal para todo lo que significa sumisión.
  2. No hay razón para comportarse complaciente ante aquellos que cercenan nuestra independencia y soberanía, y nos ven como un país sin dolientes al sentir nacional. Plegarse reduce el deseo de nuestro pueblo a una existencia digna.
  3. Condescender, transigir y capitular, nos hace ver como un pueblo de borregos, que ha perdido el anhelo de construir un mejor país, edificado sobre un orden económico y social que satisfaga las aspiraciones más sentidas de todas y todos. 
  4. Ante las pretensiones de los que procuran que el pueblo dominicano siga bajo penurias, debemos demostrar que nos arden los deseos de vivir en un medio donde la desigualdad sea cosa de un pasado injusto.

Ideas finales

  1. Cada día debe servirnos de motivación para dar demostración fehaciente, de que nos mantenemos opuestos a continuar moviéndonos alrededor de un orden social que no genera nada útil para los seres humanos; que la realidad dominicana de hoy es incompatible con una vida decente, honesta y civilizada.
  2. Corresponde a los mejores seres humanos del país, hacer aportes para construir una sociedad nueva, en la cual el pueblo disfrute de alegría, sosiego y plena satisfacción de sus necesidades materiales y espirituales, para que salga del estado de angustia, desazón y pobreza que hoy padece.
  3. Sería un logro para los connacionales que han dado los mejores años de su existencia a la brega social y política, que llegue el momento en el cual las masas populares se comporten alegres, de buen genio, bien humoradas, para que olviden el presente que las mantiene ceñudas, adustas y muy carifruncidas.
  4. Por encima de la inflación galopante, los apagones y los asesinatos en cuarteles policiales, estamos en el deber de hacer que lo mejor de nuestro pueblo siga aferrado a la idea de que el porvenir le pertenece, que más temprano que tarde disfrutará de un nuevo amanecer, con mucha luz, alimentos garantizados y seguridad de vida.
  5. Debemos de mandar al carajo, a quienes buscan fijar en la mente de los marginados de la sociedad dominicana, el criterio de pesimismo, desilusión y conformidad. Hay que difundir optimismo y buen ánimo para continuar luchando por un mejor país para el disfrute de todas y de todos.

viernes, 13 de mayo de 2022

La realidad del ambiente donde vivimos

I.- Este ambiente es adecuado para simuladores

  1. No es más que un contrasentido, algo fuera de toda lógica, pretender vivir en un ambiente de decencia, allí donde se motiva el desarrollo de la suciedad. Estimular la deshonestidad, impulsa la desvergüenza.
  2. El medio social dominicano, no tiene forma de cómo mandar un mensaje de integridad a los integrantes de la sociedad dominicana de hoy. La prédica de la inmoralidad cautiva a los ausentes de probidad.
  3. Allí donde se le da base de sustentación a un modelo económico que descansa en la desigualdad de oportunidades para todas y todos, lo más normal es que se acepten como bienvenidas sus lacras.
  4. Es puro fingimiento de sentimientos, alta hipocresía, manifestar sorpresa por el hecho de que, en nuestro país, una menor de edad confiesa ser adicta a los estupefacientes y habitualmente ejerce la prostitución.
  5. Es un ambiente ideal para mojigatos, como el dominicano de hoy, aquel donde abundan ideólogos del sistema que simulan hacer escrúpulos de los mismos vicios sociales que se alimentan económicamente. Aparentan sorprenderse de la misma perversión que les amamanta.
  6. Solamente risa debe motivar el hecho de determinados sectores sociales, que aquí ven como inmoral que una menor venda sexo, pero santifican el tráfico de drogas narcóticas, el comercio de órganos humanos y especulan con la prostitución infantil.

II.- Ante los males sociales, nada de indiferencia

  1. Cuando una ciudadana o un ciudadano comprueba que en el seno de la sociedad algo funciona mal, lo que procede es enfrentarlo, y no hacer causa común con lo dañino, ni comportarse con indiferencia.
  2. En nuestro país, toda persona que tiene un mínimo de inteligencia conoce o está informada de lo que es el fundamento u origen de todo lo que daña al pueblo dominicano.
  3. Las feas manchas que vivamente lesionan a las grandes mayorías nacionales dominicanas, no han sido enviadas como maldición divina, sino que son la consecuencia, los resultados de un ordenamiento económico y social injusto.
  4. Ese mismo orden improcedente e inicuo, es el que mantiene a la mayoría de los dominicanos y las dominicanas, viviendo, no solamente en estado de pobreza, sino también en un fango social.
  5. Por más maniobras que hagan los aprovechados del poder, quiérase o no, la mugre que es la sociedad dominicana actual, con sus subproductos sociales que le son inherentes, en la medida que beneficia a una minoría, daña y causa vergüenza a lo que en verdad se llama pueblo.
  6. Por más que se quiera aromatizar el modelo económico que padecemos, el medio social nacional dominicano apesta, y su fetidez llega a los pocos que viven de la hediondez, como también a los muchos que les causa hastío.
  7. La repugnancia, el disgusto bajo el cual vive marchitado nuestro pueblo, se comprueba sin el mayor esfuerzo. Basta con tener un mínimo de sensibilidad y humanizarse aunque sea momentáneamente.

III.- La transformación aquí es inexorable

  1. El floreciente, el nacimiento de la felicidad de los que aquí son los más, el pueblo, no les llegará por piedad de quiénes hoy se sienten a gusto bajo el estado de bienestar de que gozan, sino por el accionar de quienes no comulgan con el horrible medio donde hoy avergonzados vivimos.
  2. La miopía política no impide a las personas sensatas apreciar la existencia de la realidad exterior del país, es decir, de las degradantes condiciones materiales y espirituales bajo las cuales estamos viviendo, en lo social, ético y moral.
  3. Lo que pinta la existencia dominicana actual es que, por más que la minoría trate de mantenerse como hasta ahora, le será imposible conseguir confabulación, buscar convergencia con quienes se identifican con un proceso de renovación social verdadero.
  4. Las contradicciones presentes en nuestro país, son de una naturaleza tal, que solamente conducen a un rompimiento, porque la podredumbre ha llegado a un nivel tan hondo, que hace imposible el sostenimiento de tantas y tantas iniquidades juntas. 
  5. Aunque a los procesos sociales es imposible ponerles fecha de llegada, lo ideal fuera que las transformaciones económicas, sociales, éticas y morales que necesitamos y merecemos, lleguen sin traumas y lo más pronto posible. 
  6. La materialidad dominicana, no es para dar demostración exagerada de admiración. Basta con proceder armado de sentido común para saber que no está muy lejano el día que el pueblo termine de ser yunque, para convertirse en martillo.
  7. No se detienen los procesos sociales por el desprecio contra el pueblo; por la ignorancia que se les imponga a los oprimidos, ni por muy profundo y dañino que sea el fenómeno de la corrupción. El cambio de un sistema viejo por uno nuevo, es inexorable.

miércoles, 11 de mayo de 2022

Un compromiso de demócratas sinceros

I.- Una enfermedad en el cuerpo humano, y otra en el organismo social

  1. Una vez el organismo de los seres humanos está afectado de una lesión, manda signos de quebrantos, lo mismo que el cuerpo social enseña sus enfermedades por medio de crisis que se manifiestan de diferentes formas.
  2. Ante la alteración de la salud de la persona física, se hace necesaria la presencia del médico, y frente a la dolencia del ordenamiento económico, se requiere la intervención de luchadores sociales.
  3. Los hechos dañosos hablan del desmejoramiento de un medio social, a la vez que manda el mensaje de la necesidad de que se tomen las medidas para restituir la salud, aplicando los medicamentos indispensables para la sanación.

II.- El modelo económico dominicano enfermo, necesita como sanadores a los luchadores sociales

  1. El ambiente dominicano hace notar que está convaleciente, muy enfermo, que urge que lo que se va a hacer se ejecute rápidamente, ahora, porque su tratamiento es impostergable.
  2. El modelo económico predominante hoy en el país, genera notorias enfermedades, por lo que se impone eliminarlo, porque resulta perjudicial para la mayoría de la población dominicana.
  3. Un quebranto crónico social salta a la vista cuando, por ejemplo, tres seres humanos son eliminados físicamente, mediante torturas en cuarteles policiales y, de igual manera, la moral deteriorada de la sociedad se comprueba con el caso de un profesor que abusa sexualmente de 11 alumnas menores de edad, una colega suya y la que hace la función de conserje de la escuela.
  4. Históricamente, los que han controlado el Estado, no lo han abandonado voluntariamente en ningún tiempo ni ocasión, como tampoco por cansancio, por falta de apetito, aburrimiento o generosidad. La única forma de sacar del poder a los grupitos que de él se han adueñado, ha sido mediante la disputa, querellándose, defendiendo con obstinación el derecho del pueblo a disfrutar de la administración estatal. 
  5. En cualquier lugar del planeta tierra, lo ideal sería que los que siendo una minoría de la sociedad y gozan del poder político y social, lo entreguen de manera graciosa, pero semejante situación nunca ha ocurrido, ni ocurrirá.
  6. Por injusto y degradado que sea un sistema, no va a dejar de funcionar, a no ser que contra su permanencia accionen sus contrarios.
  7. En nuestro país, aunque el orden social actual se evidencia incapaz de solucionar los problemas que afectan a la mayoría del pueblo dominicano, el mismo se prolongará demasiado, a no ser que para que deje de persistir intervengan los luchadores sociales.

III.- Ahora recordando a Roger Garaudy

  1. Al observar la difícil situación que desde hace tiempo arrastran las masas populares del país, por la agudización del estado de pobreza, y comprobar la actitud contemplativa de sectores democráticos, llegó a mi memoria lo siguiente.
  2. En los primeros meses del año 1962, el doctor Roger Garaudy, desde Francia, hizo una visita a Cuba, y dictó una conferencia, en el curso de la cual abordó el tema relacionado con la necesidad de la intervención de los seres humanos en los procesos de cambios sociales.
  3. El doctor Garaudy, comenzó diciendo: “Durante el período de tránsito del régimen esclavista al feudal, al finalizar la antigüedad, como no existía una clase social capaz de tomar en sus manos estas transformaciones revolucionarias, hubo, en efecto, un largo período de putrefacción. La necesidad histórica se afirmó, pero a través de una serie de catástrofes”.
  4. Y siguió exponiendo Garaudy: “Si nosotros fuésemos incapaces o cobardes, es decir, si no cumpliésemos nuestra tarea de militantes, la serie de catástrofes que surgen de las propias contradicciones del capitalismo podrían durar mucho tiempo”.
  5. Es posible plantear que los males sociales que lesionan a la infinidad de los pobres de aquí, no será para siempre, pero razonar así conduce a hacer eternizar las calamidades.
  6. Nada justifica quedarse tranquilo, como si nada ocurre alrededor, mientras el pueblo dominicano pasa por lo peor. Debemos pensar que contra lo injusto hay que luchar sin descanso, porque lo que hemos hecho, no es nada en relación con lo que nos queda por hacer.

Ideas finales

  1. El régimen social actual de la República Dominicana, no tiene garantía de vida, a pesar de la buena voluntad del presidente Luis Abinader; no lo salva la sensibilidad y prédica bondadosa del papa Francisco; no tiene redención por las plegarias del obispo Francisco Osoria; ni que resucite Fidel Castro, con su sabiduría política. A este moribundo orden económico solo le queda un camino, el que seguro lo llevará a su destino: el zafacón de la historia.
  2. Por muy dañino que resulte ser un modelo económico, su desaparición no le llega, a no ser que de una manera decisiva actúen las fuerzas políticas y sociales con condiciones y decididas a asumir la responsabilidad de crear un nuevo ordenamiento social de progreso.
  3. La forma como está organizada la sociedad dominicana, constituye una traba para que la mayoría de las dominicanas y los dominicanos, tengan a su alcance los medios de subsistencia indispensables para una vida digna.
  4. Nuestro país, no tiene hoy la posibilidad de desarrollo social, porque las masas populares están marginadas e impedidas de lograr su avance material y espiritual, e integrarse a los cambios que resultan del adelanto cultural, científico y tecnológico.
  5. El mantenimiento del actual modo de vida, convierte a la mayoría de la población dominicana, en una masa de gente pobre, porque carece de lo más mínimo para vivir. La falta de amparo caracteriza a cada uno de nuestros connacionales.
  6. Aquí, las mujeres y los hombres con vocación democrática, políticamente, tienen una opción: bregar firmemente en el orden político y social, o mantenerse a la espera de que el sistema social imperante desaparezca, cuando así lo decidan sus beneficiarios, algo que nunca ocurrirá.

lunes, 9 de mayo de 2022

La crisis se supera enfrentándola sus adversarios

I.- La política ejercida con seriedad

  1. La política verdadera es una actividad humana, expresada en objetivos de clases sociales, partidos y el Estado; ejecutada aplicando medios y métodos de lucha, para alcanzar un fin, el cual depende de los intereses clasistas que estén de por medio.
  2. El trabajo político debe ser realizado con seriedad y convencimiento de lo que se está haciendo, para que la operación dé los resultados esperados. La formalidad, el buen juicio, tiene que estar de por medio cuantas veces nos movemos políticamente.
  3. Al ocuparnos de la política debemos probar con hechos que intensamente deseamos materializar el ideal que con esfuerzos procuramos conseguir.
  4. Los elevados objetivos políticos a que aspiramos solamente pueden ser convertidos en realidades, por la coherencia, las convicciones y la laboriosidad. He ahí donde están sintetizadas, en conjunto, nuestras ideas.

II.- Las situaciones. Situación de crisis en el país

  1. En las sociedades humanas, en un momento determinado ocurren fenómenos sociales que sirven para definir una situación actual, económica, política y de crisis.
  2. Hace unos días, con el título: Nuestro país estremecido por crisis, escribimos un artículo en el cual expusimos las notas distintivas de una serie de hechos materiales y espirituales que, juntos, ponen de manifiesto la crisis estructural que afecta a todo el ordenamiento económico y social sobre el cual descansa hoy la sociedad dominicana.
  3. Los hechos que narramos en el indicado escrito, que sirven de fundamento a nuestra creencia para destacar la crisis, son tan evidentes que no pueden ser controvertidos, porque están a la vista de todas y todos.
  4. La existencia de los casos que expusimos, que están ahí como testigos de piedra, por sí solos no van a servir de motor para superar la crisis.
  5. A los fines de cambiar la deshumanizada realidad dominicana, se hace necesaria la incidencia de mujeres y hombres, que hagan de fuerzas motrices opuestas al mantenimiento del actual modelo económico, que es contrario a las justas aspiraciones de nuestro pueblo.
  6. La lucha política no se decide por buenos o malos deseos, sino por la actividad desplegada de manera tesonera por las clases y capas sociales comprometidas con lo nuevo que, inexorablemente, ha de venir.

III.- La presencia del ser humano para hacer cesar la opresión

  1. Ciertamente, con toda seguridad, que un nuevo y renovado orden económico ha de llegar, pero su aparición debe ser causada, impulsada, promovida por seres humanos, es decir, por aquellos que creemos que nuestro pueblo merece la felicidad aquí en la tierra.
  2. Las leyes objetivas de la historia de seguro se cumplirán, pero no de una manera mecánica, lo que significa que los seres humanos deben accionar para que se hagan realidad.
  3. El modelo que predomina en nuestro país beneficia a la minoría nacional y a los intereses del imperio, y esa situación se mantendrá, a no ser que quienes adversan esa forma de dominación, se pongan políticamente en tensión para eliminarla. 
  4. Es correcto razonar en el sentido de que sus propias crisis van a hacer desaparecer el orden social actual injusto, pero hay que completar la idea diciendo que su ausencia no se logrará sin el trabajo político unido de sus adversarios.
  5. Para que las masas populares se liberen del estado de pobreza que se encuentran, hombres y mujeres sensibles del país, están obligados a moverse para hacer posible las transformaciones que merecemos y necesitamos.
  6. El sistema que mantiene al pueblo dominicano viviendo en permanente crisis, se impone sea sustituido y, por necesidad histórica, sus sepultureros no pueden eludir el cumplimiento de su deber de ser transformadores sociales.
  7. Todos aquellos que en este país han luchado y luchan por un futuro luminoso para lo que en verdad se llama pueblo dominicano, están en la obligación de despojarse de sectarismo, de pequeñeces, y marchar unidos alrededor de un programa mínimo, sin abandonar su esencia ideológica e independencia.

Ideas finales

  1. Al reconocer que no debemos continuar viviendo como hasta ahora, en este fango expresado en opresión social y degradación ética y moral, debemos saber que estamos comprometidos a comportarnos como intérpretes conscientes del deber en la liberación nacional.
  2. La presente coyuntura exige, de sus mejores ciudadanos y ciudadanas, una mayor profundidad de pensamiento; no dejar de obrar solos a los demás; armarnos de actitud enérgica y de desprendimiento. Nada de prejuicios, que únicamente benefician la eternización del presente descalabro nacional.
  3. La situación de crisis económica, social, ética y moral, que vivamente lesionan a nuestro pueblo, solo pueden ser eliminadas con la intervención militante de dominicanas y dominicanos identificados con la renovación de la sociedad dominicana.

domingo, 8 de mayo de 2022

Endiosar el dinero, daña al ser humano

I.- En los hogares y en las escuelas abordar temas importantes

  1. Por la forma como está organizada la sociedad dominicana, y la dinámica de vida que ella impone, impiden que muchas personas tengan conocimientos de asuntos de importancia, o los manejan con trivialidad.
  2. En este país, cualquier tema vacío, sin contenido, motiva atención, pero una cuestión profunda, de sumo interés, se maneja con desatención y total descuido.
  3. Quisiera estar totalmente equivocado, pero es mi creencia que en la sociedad dominicana actual, la niñez es lo único que se puede salvar desde el punto de vista de buena conducta. Pero para lograr algo positivo de nuestros niños y niñas, desde ahora hay que comenzar a cultivarles su mente, sembrarles ideas fructíferas.
  4. Los hogares y las escuelas, son escenarios adecuados para conseguir los loables fines perseguidos, porque son los espacios donde se conquista con facilidad ese material humano que procuramos tallar.

II.- Conocer el significado social del dinero

  1. Los dominicanos y las dominicanas del futuro, están en el deber de saber que el dinero no es algo que representa un concepto moral o intelectual; que el mismo no es otra cosa que una mercancía que, como categoría histórica, llegará a desaparecer.
  2. Porque el dinero ha sido aceptado como un símbolo, ha llevado a la gente a convertirlo en divinidad, como que pertenece al cielo.
  3. Por la función desempeñada por el dinero en una sociedad como la dominicana actual, es normal que sea visto con poderes semejantes al Dios de los cristianos, porque es medio de pago universal; libera deudas; es el contravalor de todas las mercancías, servicios o prestaciones, en fin, es equivalente general y posibilita adquirir todo lo que está en el mercado y, a veces, hasta a los corazones.
  4. El dinero, que permite la adquisición infinita de mercancías, penetra por todas partes, disuelve todos los lazos tradicionales y transforma relaciones establecidas.

III.- Enseñar sobre la función del dinero

  1. Aquellos a quienes en el porvenir queremos verlos convertidos en mujeres y hombres de bien, es necesario explicarles que esa mercancía, el dinero, que hoy hace un más cómodo acceso a las grandes y hermosas tiendas de ropa y vehículos de lujo, no lo significa todo en el ser humano.
  2. El uso fuera de lo común, la utilización extravagante del dinero, no es signo para dignificar a un individuo, sino que se presta a ser objeto de calificativos que le rebajan.
  3. Hace falta en nuestras escuelas enseñarles a los alumnos que la persona física, no debe convertirse en esclava del dinero, ni verlo como el curalotodo, la panacea de la vida. Sirve como medio de cambio, pero no para enaltecer a la especie humana.
  4. padres y los maestros, cada uno en su lugar para educar, deben hacer surgir en los hijos y en los escolares, la idea de que tener dinero no es una afrenta, siempre que se adquiera en forma licita y se hace uso de él para asuntos limpios.
  5. Es una cuestión de honor para cualquier sembrador de ideas, papá, mamá o maestros, hacer saber al niño o a la niña, que lo único que le da valor a los seres humanos es la decencia y la moderación en la conducta moral y social.
  6. Ninguna ciudadana o ciudadano se hace merecedor del respeto y la consideración de sus connacionales, por su patrimonio económico holgado, sino por su correcto proceder en el medio donde vive.
  7. La mujer o el hombre que sobresale de manera extraordinaria, no es el que dispone de dinero para envilecer a los demás, sino quien aporta en la sociedad humana para el desarrollo material, ético y moral.
  8. Los pueblos no se identifican con las personas físicas que han hecho dinero con el fin de elevarse sobre los demás y sintiéndose en las alturas, ver a las víctimas de la opresión con indiferencia despreciativa.

Ideas finales

  1. A las niñas y a los niños, hay que convencerles para que acepten y retengan como principio suyo, que el hábito o disposición hacia el bien, es lo que les hará personas de valía, y no la ambición de opulencia en dinero, que solo genera vicios y pretensiones desmedidas.
  2. Necesitamos desarrollar el intelecto de la niñez dominicana, para que en el mañana obre con virtud, demostrando en su accionar que está formada para la honestidad, la integridad y la fortaleza moral.
  3. Se impone que la mujer o el hombre del mañana, no tenga el afecto profundo que hoy muchos coterráneos sienten por el dinero, llegando a enloquecer por él, por amarlo excesivamente.
  4. En el ambiente dominicano, hay que comenzar a borrar de la mente de nuestra gente, que dinero y dólar no son expresiones de poder social invencible y que, por el contrario, fijar la idea de que dinero y dólar ambicionados, degeneran la moral y nuestras buenas costumbres, hasta llevar a muchos a la corrupción.

jueves, 5 de mayo de 2022

Nuestro país estremecido por crisis

I.- Fenómenos sociales presentes aquí

  1. A veces, la buena fe en lo que dice o hace, lleva a nuestro pueblo a no ver la dura realidad de lo que está ocurriendo, lo afecta directamente y está llamado a ser el actor principal en la solución de cualquier conflicto social.
  2. En una determinada sociedad humana, todo hecho tiene una explicación que lo motiva, y es su fundamento u origen.
  3. Siempre debemos de comenzar por hacernos la pregunta de por causa de qué, como consecuencia de qué, en vista de qué y a qué se debe que han estallado con violencia las pasiones.
  4. Porque los fenómenos sociales responden a cuestiones que tienen su fuente en el medio donde han sucedido, el sitio de su nacimiento debemos someterlo a análisis.

II.- Algunos hechos que expresan la crisis estructural en nuestro país

  1. De forma sucesiva, uno seguido de otro, hemos sido testigos de hechos que, por su secuencia y trascendencia, han llamado la atención de amplios sectores de la comunidad dominicana.
  2. Ha sido muy notorio que personas que se hacen las distraídas ante cualquier problema y hasta llegan a hacerse las tontas, hoy están reaccionando encogidas de hombros, y preocupadas, demostrando inquietud.
  3. El ser humano reacciona por algo que le motiva a comportarse ahora, de manera diferente a como lo hacía antes, de ahí que hay una actuación distinta entre negarse y resignarse.
  4. Sorprende que de un momento a otro, en un abrir y cerrar de ojos, han ocurrido de manera concomitante, entre otros, los hechos siguientes:
    1. En la Región del Cibao, grupos populares llaman a un paro reclamando las más variadas reivindicaciones;
    2. Supuesta violación a una menor, por un alegado artista, sirve como motivación a la fiscalía para extender el asunto a investigar red de prostitución infantil; 
    3. Relajamiento moral y familiar, por madres involucradas en prostitución de hijas menores; 
    4. Conflicto entre transportistas por el corredor de la avenida Charles de Gaulle; 
    5. Tres muertes en recintos policiales, con características de asesinatos; 
    6. Atropello en el Canódromo, por agentes de la Digesett, contra el Defensor del Pueblo y periodistas;
    7. Notorio descontento de la población por inflación y dificultad para adquirir artículos de primera necesidad; 
    8. Enfrentamiento militar entre Rusia y Ucrania, incide negativamente en la crisis de la economía nacional dominicana; 
    9. Conflicto por asunto salarial entre el gremio de los maestros y el Ministerio de Educación; 
    10. Pacientes afectados de quebrantos graves manifiestan quejas por falta de entrega en hospitales públicos de medicamentos de alto costo; 
    11. Críticas de sectores intelectuales por la falta de organización en la reciente XXIV Feria Internacional del Libro;
    12. Quejas de productores nacionales por la ley de aranceles tasa cero;
    13. Inquietud colectiva de la población dominicana, por incontrolable inseguridad diurna y nocturna, personal y de bienes, en domicilios y en la vía pública; 
    14. Las denuncias de recientes actos de corrupción, prueba que el fenómeno es inherente al sistema y que está presente, hoy como ayer; 
    15. Nuestro país convertido en parte importante para el tráfico internacional de drogas narcóticas, situación comprobada con la reciente incautación de más de una tonelada de cocaína;
    16. El Servicio Judicial Dominicano, hace brotar el hedor de su purulencia que indigna, con la puesta en libertad, en Montecristi, de la Ayudante Fiscal y los agentes de la Dirección Nacional de Control de Drogas, que estaban acusados de colocar droga en una peluquería;
    17. En Montecristi, Policía Nacional, busca padre agredió brutalmente a su hijo menor;
    18. En Montecristi, mujer embarazada, en presencia de su hija menor de edad, es apaleada por miembros de la Policía Nacional.
  5. Lo que está a la vista de todos y de todas, es una agudización de la crisis económica y social que afecta a la sociedad dominicana, y se está expresando con dureza. El modelo económico vigente en nuestro país, ha dejado de alentar el desarrollo de las fuerzas productivas y, por el contrario, ya es una traba para el avance del país.
  6. Quiérase o no, aunque lo nieguen los grupos de poder, lo que está revelando el ordenamiento social y económico dominicano, son los males que ha traído y cada vez se incrementan, y el pueblo ya no aguanta más penurias.
  7. La crisis estructural que con dureza ataca a hombres y mujeres de trabajo, resulta asfixiante, y solo se resuelve mediante un cambio verdadero que saque a nuestro pueblo del infierno que la minoría lo ha metido.

III.- Lo que muestra nuestra realidad

  1. Sin necesidad de que lo agiten, el ambiente dominicano lo que deja ver es el cuadro de un pueblo indignado por una crisis que no tiene otra solución que la modificación de sus estructuras.
  2. Aunque quieran ponerle un nombre perfumado, el actual modo de vida ya vetusto conduce a las masas populares a la protesta, a negarse a continuar viviendo bajo un estado de miseria.
  3. El modelo impuesto aquí, que crea la desigualdad de oportunidades, hace tiempo que está en crisis. Lo que ha ocurrido ahora es que han salido a flote sus lacras, como prueba de que ya no pueden esconderse más. 
  4. No bastan los programas sociales, para aliviar la miseria a la caterva de pobres que día a día produce el sistema. Los parches, los remiendos y los retoques, son insuficientes a los fines de compensar las deudas sociales acumuladas, que hoy se dejan sentir mediante hechos espeluznantes, altamente pavorosos.

IV.- Ideas finales

  1. Las grandes mayorías nacionales están hastiadas de permanecer en una situación de pesadumbre, que las lleva al abatimiento y les quita la alegría y el deseo de vivir.
  2. Los hechos que están ocurriendo aquí, desde el alza de los artículos de primera necesidad, pasando por las protestas en el Cibao, hasta las muertes violentas en destacamentos policiales, expresan una crisis sistémica insostenible. 
  3. Las contradicciones de todo tipo que están saliendo a flote, la única explicación que tienen es que son originadas por un modelo que va a seguir pariendo crisis y pobreza, hasta que el pueblo se sacuda enviándolo al zafacón.
  4. El presidente Luis Abinader, con el transcurrir de los meses, tiene que haberse dado cuenta que el cuerpo social dominicano es, algo así, como una piltrafa, cuya masa hace tiempo se la tragaron, sin masticar, los grupos nacionales minoritarios y el imperio. 
  5. La descomposición social de la cual hoy estamos siendo testigos, está llevando al país a convertirse en una especie de astilla de madera resinosa, una tea, que va a terminar de dar luz al pueblo entero, para que vea con claridad su porvenir de felicidad material y espiritual.

martes, 3 de mayo de 2022

Una carta al Cardenal, sobre las drogas

  1. Tengo la firme creencia de que la Iglesia Católica, está llamada a incidir, por su influencia ideológica, en todas las actividades relacionadas, de una u otra forma, con las masas populares dominicanas.
  2. Partiendo de la convicción anteriormente expuesta, en procura de llevar orientación al pueblo sobre el vicio de las drogas ilegales, me dirigí al Cardenal Nicolás de Jesús López Rodríguez, en los términos siguientes:
Santiago de los Caballeros,
11 de Septiembre de 1989

Monseñor
Nicolás de Jesús López Rodríguez
Arzobispo de Santo Domingo
Santo Domingo, D. N.

Estimado monseñor:

1. He considerado prudente y procedente remitirle la presente para llevar a su conocimiento una idea que, por tener relación con un fenómeno que, como el de las drogas ilegales, hoy preocupa a todo el mundo y en particular al pueblo dominicano, de seguro que es de su interés.

2. La idea que me permito plantearle es que recientemente me dirigí al ciudadano presidente, doctor Joaquín Balaguer, sugiriéndole que estudie la posibilidad de elaborar un mecanismo legal que obligue a los medios de comunicación –prensa, radio y televisión– a prestar su concurso gratuito en la lucha contra las drogas ilegales y el crimen del narcotráfico. Una medida legal sería que la radio y la televisión entren en cadena, a una misma hora de la noche, todos los días, para difundir mensajes relacionados con las drogas narcóticas. De igual manera, la prensa escrita puede, en virtud de una ley, insertar todos los días, en media página, un mensaje.

3. El objetivo de difundir mensajes, por órgano de los medios de comunicación, tiene como finalidad una labor de orientación y prevención. Hace unos días usted habló «dela necesidad de que sean fortalecidos los planes de prevención contra la drogadicción; que se diseñen programas dirigidos a orientar a la juventud en ese sentido».

4. Precisamente, orientación es el método más eficaz para luchar contra la drogadicción; así se enfrenta el fenómeno, el mal, en su nacimiento. Los medios de comunicación son los órganos principales para edificar a la ciudadanía respecto a los fenómenos sociales.

5. Estoy de acuerdo con usted, en el sentido de «que el problema del narcotráfico hay que enfrentarlo ya, con toda la responsabilidad, integridad, valentía y decisión porque en la medida en que se le deje tomar cuerpo, y es lo que luce en Colombia, será mucho más difícil». Monseñor, es ahora que tenemos que luchar; mañana sería tarde. Una forma de luchar, en el plano ideológico, contra el crimen del narcotráfico es orientar al pueblo dominicano utilizando los medios de comunicación del país.

6. La única forma de llevar a la práctica la concepción que usted tiene de «que todos los dominicanos deben tomar conciencia del problema, de la gravedad que conlleva el narcotráfico, y al mismo tiempo haría falta todo un proceso educación a la juventud», es que los dominicanos, aún aquellos que no saben leer y escribir, pero sí escuchar, reciban un mensaje de orientación ayudado por una acción decidida que debe ser –como dijo usted– «comenzando por el Gobierno y ayudado por todos los estamentos sociales, hasta la persona más sencilla».

7. El objetivo de esta carta es que usted analice la idea que le he planteado al ciudadano presidente, doctor Joaquín Balaguer, y si la considera positiva para la lucha contra la drogadicción y el crimen del narcotráfico, interponga sus buenos oficios a fin de que sea llevada a la práctica la idea que se dicte una ley o decreto que obligue a los medios de comunicación –radio y televisión– a entrar en cadena, media hora, todas las noches, para difundir mensajes contra las drogas ilegales y el crimen del narcotráfico, y de igual manera se legisle para que los otros medios de comunicación –periódicos y revistas– inserten, todos los días, media página con mensajes contra el fenómeno de las drogas narcóticas y el crimen blanco del narcotráfico. 
Con distinción y respeto le saluda.

domingo, 1 de mayo de 2022

50 años atrás, y nunca más

  1. Como de costumbre, el día lunes 1 de mayo de 1972, me levanté bien temprano, y ya a las nueve horas de la mañana, estaba dictando una conferencia, en su local en Santiago, a los miembros del Sindicato de Trabajadores de la Tabacalera.
  2. Luego de concluida mi intervención, los directivos del Sindicato de la Tabacalera, fueron informados de que la Policía Nacional, tenía ocupado el local de la Unión de Choferes Sindicalizados-UNACHOSIN, en cuyo interior estaban presentes mujeres, hombres y niños.
  3. La dirección del Sindicato de la Tabacalera, decidió nombrar una comisión de tres miembros, presidida por mí, para que hiciera de mediadora, entre la Policía Nacional y la directiva de UNACHOSIN.
  4. Una vez los comisionados llegamos al local de UNACHOSIN, y el Jefe del Servicio Secreto de la Policía, en Santiago, notó mi presencia, ordenó a un sargento que me golpeara, y lo mismo hicieron otros agentes policiales, los cuales, después de propinarme varios macanazos, me lanzaron al piso. Recobré mi conocimiento en la morgue del Hospital José María Cabral y Báez, cuando hicieron acto de presencia mi compañera Carmen y el doctor Salvador Jorge Blanco, quienes al comprobar que todavía estaba con vida, gestionaron mi traslado e internamiento a la clínica Centro Médico Cibao, donde permanecí por espacio de tres semanas.
  5. La acción del Servicio Secreto, en mi contra, fue la respuesta a la defensa que había asumido de los presos y perseguidos políticos.
  6. Para mí, el hecho ocurrido en UNACHOSIN, el 1 de mayo de 1972, forma parte de mí accionar político, por el cual no guardo ningún rencor y lo traigo a colación, ahora, cincuenta años después, como un recuerdo de lo que nunca más debe ocurrir en nuestro país. 
  7. Para mayor información, debajo de este escrito incluyo dos recortes de periódicos que hacen una reseña de lo ocurrido en UNACHOSIN, 1 de mayo de 1972.